
Para los despistados, estoy hablando de esto

Y punto pelota
 	
	
Para los despistados, estoy hablando de esto

Y punto pelota
-El DCverso cinemátográfico es un Desastre Sin Paliativos™
-¡No lo es!
-¡Sí lo es!
-Es un universo rico y complejo desplegado sabiamente y no pedacito a pedacito para estirar el chicle como hacen los de la Marvel.
-¡Deceita irredento!
-¡Marveloso sectario!
-Chiiicos, chiiicos, no discutais más.
-Huy, ¿de dónde ha salido este viejo!
–Malditos mileniales de mieAy qué graciosos sois los jóvenes de hoy en día. Mi nombre es irrelevante. Vosotros podeis conocerme como… ¡aquel que ha venido a resolver vuestro dilema!
-¿Y de dónde ha salido usted, señor AQHVARVD?
-Eso también es irrelevante. Lo que no lo es es que puedo resolver vuestro dilema. Y puedo hacerlo gracias a mi dominio de… ¡LA LOMOMANCIA!
-¿La Lomana?
-La LOMOMANCIA… el arcano arte adivinatorio de leer el futuro en los lomos de los tebeos. Nacido en La Noche De Los Tiempos ™ cuando ciertos aficionados se dieron cuenta de que los cambios en el diseño de los lomos no respondian al azar sino que reflejaban en clave acontecimientos pasados, presentes y futuros. Antiguos lomomantes de renombre supieron prever la resurrección de Barry Allen en los lomos del recopilatorio de Crisis en Tierras Infinitas o la identidad de She-Thor en el lomo del primer recopilatorio de Thora: Diosa de la Truena.
-Entonces… ¿cuál de los dos tiene razón?
-Sí. ¿Cómo es la trayectoria del DCverso cinematográfico presente?
-Permitidme unos segundos de observación… Si… Si-si… Lo estoy viendo… Lo veo claramente… La trayectoria del DCverso cinematográfico…

…está llena de marcados altibajos…

…MUY marcados altibajos..
Los habituales del blog recordarán diversos anuncios de los rifles de aire comprimido marca Daisy que fueron apareciendo en las publicaciones de DC a lo largo de los años, pero siempre hay espacio para alguno más. Este es de 1973

A medida que por delante de uno van pasando los Eventos, las Macrosagas, los Cruces, las Crisis y los Nada volverá a ser lo mismo, uno se va volviendo un poco páginavieja, y le da menos importancia a los grandes golpes de efecto y valora un poquito más la coherencia y la tranquilidad. Ya se han visto muchos In-your-face de garrafón, muertes de puerta giratoria o Grandes Revelaciones que se contradicen en menos de tres meses. Se buscan más las etapas tranquilas pero coherentes, las tramas cocinadas a fuego lento, los desarrollos pausados. Con dibujantes chulos siempre que se pueda, por supuesto, pero incluso eso a veces no es motivo suficiente. Que los páginavieja somos muy nuestros y muy raros.
El ejemplo más reciente en mi caso fueron los Thunderbolts. Que me he tragado los de Busiek, los de Nicieza ¡los de Arcudi! los de Ellis, los de Diggle, y de Parker tanto los Thunderbolts como cuando se llamaron Vengadores Oscuros. Y cuando fueron el equipo Rojo de Los Vengadores comandados por Trueno Ross. Todo, vaya, pero cuando debían volver a interesarme porque los dibujaba el bueno de Jon Malin decidí pasar.

Muy a mi pesar, desde luego, pues Malin apunta muy buenas maneras. Y no puedo quitarme de la cabeza paralelismos (simetrías, más bien) entre la primera splash del inicio de este volumen…

…y esta otra.

Pero no lo seguí ¿sabéis por qué? porque en la alineación habían incluido a Arreglador.
Ese personaje murió y quedo atrapado en un bucle temporal en uno de los últimos episodios de los Vengadores Oscuros de Jeff Parker. Viajaron al pasado y Arreglador mató a su yo del pasado, y para no escogorciar el continuo se operó físico y recuerdos para hacerse pasar por si mismo y revivir su vida tal cual hasta que volviera a viajar al pasado y… Ahí quedó el personaje y en cambio ahora lo volvía a tener en portada y equipo, fresco como una rosa y sin mención a cómo había regresado. Llamadme páginavieja, pero esto me incomodaba tanto que decidí no pillarlo. Me enteré más tarde de que a la altura del número 6 de la serie se le dio una justificación, cosa bastante sencilla cuando una de las razones de ser del grupo era contar entre sus filas con un cubo cósmico con coletas.

Pero en ese sexto número ya era tarde para mi y habían perdido a un lector.
Si esa explicación estaba prevista, hubiera estado bien que se hubiera dado desde un principio para no provocar la desbandada de los páginavieja, que somos cobardes, supersticiosos, y más de los que se piensan. Explicar eso en su momento hubiera sido la labor de un buen Editor.
Esa es la labor del Editor. Servir de nexo entre lectores y autores para hacernos todo la experiencia lectora más digerible. Por eso es importante que un Editor conozca el material con el que trabaja. Y no estoy diciendo que los Editores deban a su vez ser páginaviejas, todo lo contrario. Una persona con la energía e ilusión de la juventud, bien preparada, puede desempeñar este cargo a las mil maravillas. Me viene a la cabeza el caso de Ellie Pyle, que al poco de aterrizar en Daredevil la hicieron ponerse al frente de los fastos del 50 Aniversario del personaje, incluyendo tebeo conmemorativo y texto laudatorio.

Pues te lo preparas, te lo estudias y haces frente con profesionalidad. Y dando datos curiosos de paso, para que vean que conoces el terreno que pisas.

Sí, señora, para quitarse el sombrero. O la gorra, mejor dicho.
Por eso siempre que puedo me acomodo en personajes conocidos y sin demasiado vaivenes editoriales. Como la mini que sale ahora en América de los Nuevos Mutantes, que a Marvel le ha pasado como a Panini, que se creyeron lo de que ahora salía una película y prepararon cosas.

Y esto lo podré leer con la tranquilidad de que…esperad ¿ese es Fortachón? ¿pero no se había quedado en el Infierno para recuperar su alma cuando le derrotaron los Thunderbolts de Trueno Ross? ¿explican cómo ha llegado aquí?
Es curioso cómo funciona esto de la visibilización. Uno piensa -o uno pensaría- que los argumentos típicos de ¿Qué necesidad hay de un X? o ¿Para qué quieren OTRO si ya tienen uno? se irían cuando la gente se diera cuenta de que ellos mismos querían otras película del mismo estilo, o les molestaba que se insinuara que había demasiadas de aquello que les gusta.
Pero uno nunca deja de sorprenderse. Igual que decíamos hace unas semanas que de la nada te puedes encontrar con una década entera sin películas de superhéroes de origen africano y, de improviso, que se lance una y sea un superéxito. (De hecho, tanto éxito que uno no puede más que pensar que quizá en su momento también la del cazavampiros… pero ese es otro tema, sin duda). Lo más curioso es que uno puede no darse cuenta de cómo se reproducen esas mismas ideas en distintos momentos. O cómo lo han hecho desde el pasado. Tanto en los equipos creativos como en las apariciones en cómics.
Es decir, ¿todo eso sobre las mujeres, los afroamericanos, los asiáticos, el GSD, ableismos, religiones y -yo qué sé- lo que sea que te puedas imaginar que alguna vez se haya señalado? Se haya, incluso, dado un artículo sobre el tema o felicitado por que existan…
Hoy vamos a hacer un breve repaso a una categoría muy especial:
Los españoles.
Porque uno se descuida y se acaba encontrando con un tomo en las tiendas llamado Maestros Españoles del Arte del Cómic que, más allá de que el título parezca traducido por un bloguero, se centra en los creadores españoles que trabajaron para la Warren. Que, por un lado, no dudamos de que habrá creadores más que interesantes dentro. Y, por el otro, ¿saldría si no fueran españoles?
Cierto es que estamos acostumbrados a estas cosas. Son muchos años de señalar que Sergio Aragonés nació en Castellón y Carlos Ezquerra en Zaragoza -y la leyenda urbana de que Disney era andaluz- o hablar de nuestro José Luis García-López. ¿Habéis oído alguna vez que Mortadelo y Filemón son Muy populares en Alemania? Quizá sea la primera noticia. Clever & Smart los llaman, que lo mismo tampoco lo habíais oído nunca.
Si me dieran un céntimo por cada artículo sobre el desembarco de dibujantes españoles en USA -o su paso previo por UK- podría comprarme… quizá hasta una grapa actual, que están los precios últimamente como están, porque ya no sé la cantidad de variaciones que se le pueden dar al tema. Hasta parece que se vendan en pack de españolidad. Como cuando salían referencias a alguna cosa española y la gente asentía alegre como: Sí, eso es nuestro. Español y universal. Daba igual que fuera La Santa Inquisición.
Oh, mira, viajan a Barcelona. Que bien.
Pero, claro, luego llegan las quejas por la forma poco realista en la que se pinta a los españoles. Ya sabéis, las quejas por el uso de tópicos como Toros y Flamenco, las quejas por la forma de mezclar ideas o porque en el arroz con cosas han usado chorizo. Eh, es que lo de Misión Imposible 2 era una juerga, no porque fuera en España. Que va. Como lo de Resident Evil o lo de Magneto de Borbón, si hubieran sido en otras partes el bombo no hubiera variado. Que va.
Quiero decir, no es como si se hicieran periódicamente artículos en los que dentro de un tema general se fijaran en los españoles. ¿Los españoles que son candidatos o ganadores de los Eisner? Rídiculo. Todo el mundo sabe que sería Los españoles ganadores de los Óscar del Cómic. ¿Que a Paco Roca le han sacado una edición de una de sus obras en Tegucigalpa? Eso no va a ser noticia en la prensa porque todos sabemos que hay que decir Honduras o hablar del Distrito Central que forma con Comayagüela, y como eso es un lío pues no se haría. En Japón quizá, en Tegucigalpa ni de coña. ¿Y qué decir de Los 4F? No, digo lo de tener a un guionista español, además de dibujante. Que podría haber hablado de El Brujo -o de El Águila o del Capitán España, por poder- pero estas cosas, como El Matador, seguro que os pillan más que de sorpresa.Yo qué sé, los centros de poder de la cosa del cómic son los que son y parece que si no mencionas que alguien ha logrado publicar su lo-que-sea en USA estás haciéndole de menos.
Y sí, ya sé que Albert Monteys o Pasqual Ferry o David Baldeón merecen todos nuestros elogios no sólo por el hecho de ser españoles.
Pero la cosa es precisamente esa, ¿realmente alguien podría llegar a pensar que qué necesidad hay o que si era necesario…?
Pues entonces, seamos conscientes también de lo que los demás ven y de por qué consideran que es necesario. Sobre todo cuando no pueden invocar la distancia geográfica para no incluir más. -El famoso asunto con los hispanos del que ya hablaremos otro día-.
Al fin y al cabo si no hubiera artistas españoles trabajando para USA lo mismo no hubiera habido serie de Domino y eso hubiera impedido que hiciera una portada alternativa el mismo ROB!

Que es un motivo más que de sobra para ser noticiable. Por ser obra de ROB!, claro. Pero al final más vale que veamos todas esas pequeñas conexionas cuando opinemos sobre las representaciones de los demás. Al fin y al cabo su afinidad por España está más que demostrada.

En 1996 DC Online tenía un aspecto mucho mejor que en 1995. Y atentos al ofertón…

¡Diez horas de navegación totalmente gratuita! ¡Con eso te da tiempo a leerte internet entera!
-Buenos dias, señor Berlanti
-Ah hola. Tú eres el chico nuevo ¿no? El que se está encargando de los efectos especiales del episodio de esta semana de Leyendas de Mañana De Ce.
-El mismo que viste y calza.
-Me han comentado que fuiste dibujante de tebeos.
-Sí pero tuve que abandonar ese mundo. No podía soportar más la presión, las críticas, el acoso… La gente es muy cruel en internet. Había un small spanish forum [en español en el original] que… que…
-Tranquilo, chico. En el medio televisivo esas cosas NO pasan. ¿Ya está listo el efecto del fantasma?
-Listo y terminado. Vea, vea.

-Excelente. ¿Y la siguiente escena, la de la multitud de fantasmas?
-Está renderizándose mientras hablamos.
-Según habíamos comentado, con el magro presupuesto con el que contamos no había tiempo para crear modelos distintos. Supongo que habrás cambiado algún detalle para que se diferencien. El mapa de transaparencia de los harapos, por ejemplo. La distribución de los agujeros en la tela es fácilmente reconocible a simple vista y basta con dibujar cuatro o cinco imágenes en blanco y negro que sirvan de máscara.
-¡Pero por supuesto, señor Berlanti! ¿Por quién me ha tomado? ¿Por uno de esos «artistas» vagos de remate que se limitan a copypastear cosas para ahorrarse trabajo?
-No no, claro que no… Por cierto, no he oido tu nombre.
-Me llamo Arlem…

…RENATO ARLEM…

Los cómics de DC de enero de 1995 vendían al público las bondades del nuevo servicio que la editorial ofrecía a sus lectores: DC Universe Online (a través del por entonces todopoderoso AOL, claro) donde podías hablar con el personal de la casa. Eso sí, aunque te prometían la llegada inminente de Mark Waid, Garth Ennis o Denny O’Neil de momento te tendrías que conformar con Kevin Dooley o Scott Peterson

Y para moverse mejor en este nuevo medio, el compi Dooley te ofrece una guía de la jerga que se marca la basca para estar al loro

Y lo que de verdad da ternurica es cómo se imaginaba la gente de DC que sería comunicarse con los lectores en tiempo real. ¡Todo parecido entre esto y Twitter es pura coincidencia!

La DC de 2010-2011 contiene mucho material digno de estudio adliano por tratarse de una época fronteriza entre el final del Universo DC tradicional (desde su reseteo anterior) y el inicio de los Nuevos 52. Los personajes dejarían de ser los mismos y en la editorial había prisa por tanto sacar toda suerte de proyectos que ya estuvieran en marcha, pues en pocos meses estarían caducados y ya no tendrían validez. Incluso los Elseworlds. Es posiblemente por esto que una miniserie planificada para seis episodios terminase saliendo en tres de extensión doble, que en nuestro país se engalanó como tomo único. Renato Arlem no merece menos.

Aunque aquí el papel estelar lo tiene Cary Bates, veterano escritor que escribía The Flash y algunos títulos de Superman antes de la Primera Gran Crisis, y que tras ella asumió principalmente la escritura del Capitán Atom. Bates era consciente de que la continuidad que él había contribuido a crear iba a desaparecer y quiso dar su particular visión sobre cierto aspecto del legado kryptoniano sobre el que se había pasado muchas veces por alto. Y como buen fabulista utilizo una historia imaginaria como hilo conductor (aquí tratándose de Superman debería citar su frase sobre las historias imaginarias, pero tengo sobredosis de serendipias con Moore, pues el Oscar a La Forma del Agua me pilló leyendo su Neonomicon).
El punto de partida: ¿y si la familia de Superman hubiera sobrevivido a la destrucción de su planeta natal?

¿Y si llegasen juntos a la Tierra?

Pues seguramente mientras el pequeño Kal-El está siendo criado, el rol de superbenefactor para el planeta lo asumiría su padre Jor-El.

Asistido desde la retaguardia en la parte técnica por su esposa, claro está.

Si bien es posible que este papel secundario no sea suficiente para ella y termine dando un paso al frente.

De forma que, ante la obsesión de su marido con la destrucción de Krypton…

…le induce a dedicar sus atenciones a otros asuntos.

No en vano ellos son los últimos supervivientes de su raza y a ellos les corresponde la pesada responsabilidad de la tarea de la repoblación.

Es este el esperanzador inicio de un nuevo capítulo en la saga kryptoniana con un feliz padre que contempla orgulloso a sus nuevos retoños que serán bien criados y amamantados hasta completar su desarrollo. Una nueva oportunidad. La vida gana.

Y es gracias a Cary Bates que, más de setenta años después de la creación del mito, caemos en la cuenta de un aspecto de la biografía del personaje en el que no nos habíamos fijado antes. Si cuando faltando una pregunta para ganar el bote del concurso nos planteasen una sobre Superman respiraríamos tranquilos. Y si nos preguntan el nombre del padre de Kal-El, contestaríamos en centésimas. Ahora bien, si nos preguntan por la madre, como mucho nos saldría el nombre, Lara, y perderíamos el premio con los compañeros asesinándonos con la mirada. Y este es el mérito de Bates, visibilizar (con la inestimable ayuda de Renato Arlem) a Lara Lor-Van. La sutil narrativa maridada con el trazo del brasileño la rescatan del rol secundario y apartado que siempre se le otorgó y hace que la tengamos en cuenta. Quien lo lee no la olvida. Visibilidad, matriarcado, feminismo. Diría que es la última gran historia de esta mujer, pero a lo mejor era también la primera.
AVIV SETÄB!