Desde aquí repartimos ideas y conceptos para la manipulación creativa y el abuso cultural. Somos el diario de lo genial, y el pensamiento de lo imposible
El miércoles 15 de marzo se publicó el segundo número de «Bishop: War College», una miniserie de cinco episodios firmada por J. Holtham y Sean Damien Hill. En él podemos encontrar una nueva versión de la Patrulla-X
Vamos, una más entre las cientos de versiones alternativas del grupo, destinada al olvido o, como mucho, a una nueva línea de Funkos y después al olvido, en ese orden
Pero cabe la posibilidad de que alguien dentro de Disney la haya identificado como un globo sonda del sector woke de la compañía, un campo de pruebas para medir las reacciones del público y trasladar esa alineación al reparto que nos encontremos en las pantallas del UCM cuando toque recastear a los Hombres-X. Y también puede que ese alguien dentro de Disney no haya querido arriesgarse a que se dé ni un paso más en esa dirección y haya mandado un mensaje a los partidarios de la diversidad. Y el viernes 17 de marzo…
Vivimos en la era dorada de los muñequiFIGURAS DE ACCIÓN. Nunca como ahora se ha visto una oferta tan vasta en cantidad y calidad.
Lejos han quedado los remotos tiempos en que un niño tenía que jugar con un piloto de Bespin de Kenner haciendo de Cíclope de los X-Men porque desde los Mego nadie había vuelto a hacer juguetes de superheroes. Hoy en dia existe un amplio abanico de C´íclopes de todas las épocas y continuidades imaginables…
…con un igualmente amplio abanico de públicos objetivos, del jovial e inocente chavalín que juega con muñequitos al maduro y responsable padre de familia que juega con muCOLECCIONA FIGURAS DE ACCIÓN.
Cómo no iba a ser una era dorada si se origina tanto en el auge noventero de Toy Biz en el primer mercado y de McFarlane Toys en el segundo siendo en ambos éxitos directamente rastreable la influencia…
…de YA-SABEIS-QUIÉN!.
(¿podeis creeros que todavía no tiene su propia mini de Heroclix?)
Tan descomunal es la oferta que incluye diseños alternativos específicos del muñequiFIGURA DE ACCIÓN concreto, como la nueva serie de Vengadores que saca el mencionado McFarlane. Que qué quereis que os diga, yo no tengo ningún problema con los diseños alternativos. ¡Si algunos de mis mejores amigos son diseños alternativos! Pero estos tienen sus pros y sus contras.
El Ojo de Halcon chuleta con tatuajes, gafas de sol y gorra del revés molaría si ´no fuera porque por algún extraño motivo le han cambiado el color morado. Si ha sido un problema de la mezcla de pinturas en la factoria eso explicaría que la RHULKA! con espadón de Mismamente Miedo tenga ese tono de piel como diluido con agua. El Hulk peludo puede ser un comentario irónico sobre la depilación o un guiño a Ralph König. Llamadme purista pero lo de encasquetarle una capa con capucha a lo Assassins Creed a la Viuda Negra me parece una pifia por plegarse a una moda pasajera. Y que al Capitán América le hayan cambiado tanto el traje que no tenga ni escudo no lo remedia ni esa águila obvia referencia al Capi de ROB!
En los últimos meses he visto a bastantes personas quejarse de que el debate sobre el estatus de Spiderman dentro de los cómics Marvel siempre retrotrae hasta el Mefistazo y One More Day. Incluso yo mismo he caído en ello. Sin embargo, cuantas más vueltas le doy, más lógico me parece. A pesar de que se trata de un cambio en el personaje que ya tiene 15 años, la realidad es que desde entonces no ha habido mucho más que decir. Lo que Spiderman ha estado haciendo en los cómics desde entonces ha causado tan poco revuelo y dejado tan escasa impronta, que es inevitable regresar una y otra vez a hablar de las cosas que hicieron algo por el personaje, bueno o malo.
Y es que la realidad es sencilla: Spiderman ha sido un personaje con una marcada evolución y cada vez que parecía estancarse, alguien venía para ponerlo todo patas arriba. Algunos de los momentos fundamentales era más discretos (como la graduación de Peter Parker en el instituto y su llegada a la universidad) y otros más llamativos (por ejemplo, la muerte de Gwen Stacy). Unos años después, ya fuera de las dinámicas estudiantiles, Peter evolucionó a nuevas historias, se desligó de MJ, la otra novia de juventud, para entrar en la vida adulta y el sexo fuera de plano con la Gata Negra en 1979. A partir de entonces comienza un Peter más adulto con nuevas preocupaciones: un traje alienígena del espacio, una novia criminal, las guerras de mafias de Nueva York o, al final de todo aquello, el matrimonio con Mary Jane en 1987.
A partir de aquí comenzaría un nuevo capítulo en la vida de Peter. Un capítulo extremo que incluyó la muerte de su Tía May, la dramática conclusión de su rivalidad con su amigo Harry Osborn, el nacimiento de nuevas némesis como Veneno y Matanza o la llegada de la paternidad. Llegados a este punto en Marvel decidieron pensar que Peter no podría cambiar mucho más. Y que Spidey no podía simplemente asentarse y convertirse en un adulto rutinario más. Por lo que decidieron optar por el reemplazo. Craso error. Lo que los lectores queríamos era acompañar a Peter en esa nueva vida, con su hija en camino, con sus viejos amigos y enemigos. Seguir creciendo con él. Y hubo que matar a Ben Reilly. Una traición en toda regla, porque nada hubiera animado más la colección que tener al viejo hermano, a Ben, junto a Peter. Pasar de Spiderman a Spidermen. Pero las traiciones no acabaron ahí, también la hija prometida desapareció.
Llegaban entonces los años 2000 y con ellos vendrían nuevos cambios en la vida de Peter. Tras una breve pero intensa separación, MJ y Peter volverían a vivir juntos, y la vida del alter ego de Spiderman se centraría. Cambiaría su precario trabajo de periodista por una carrera docente en el instituto que le vió crecer. Cambió su círculo social y también su entorno. Spiderman se iba a implicar en estos años en ambientes ajenos para él hasta ahora: los supergrupos como los Vengadores o la magia. También sus villanos cambiaron, con el temible Norman Osborn a la cabeza que ya no aspiraba a matar novias o a financiar clones sino a destruir superhéroes desde oficinas gubernamentales o matar inocentes de forma secreta.
Y entonces llegó el Mefistazo. Un reinicio en la vida de Peter que lo devolvió varios pasos atrás en esta historia, a algún momento silencioso entre los 70 y los 80. Una realidad paralela, un clasicismo que no existía. No solo volvió Peter, también volvió su viejo círculo de relaciones, con Harry revivido para más inri. MJ volvió a irse pero no para ser sustituida, como a comienzos de los 80, por una nueva relación que trajera nuevos escenarios sino para protagonizar un tira y afloja donde otras parejas entraban y salían como en una picadora de carne. La némesis principal de Peter volvía a ser, demasiado a menudo, un Norman Osborn que tras los sucesos de Reinado Oscuro volvía a sus fechorías de siempre, ahora pasadas de moda y mundanas. Dan Slott propuso muchas posibilidades pero fue descartando casi todas y no es de extrañar que la más desarrollada, Superior Spiderman, sea la más recordada y mejor considerada de ellas. Incluso estuvo a punto de dejar a Peter con un nuevo futuro como director de Industrias Parker, pero también ese cambio de paradigma se truncó sin llegar a nada.
Después llego Nick Spencer, pero él tenía otros planes que no incluían revitalizar el personaje con un gran cambio. De nuevo, el eje eran Norman, Harry, Peter y MJ. Las otras posibilidades, como un equipo de Spidersonas (mayoritariamente femenino) dirigido por una Madame Web se quedaron en el aire hasta que el autor, quemado por completo, dejó la colección. Llegó entonces Spiderman Beyond, y de nuevo Ben Reilly venía a tomar el manto de Peter. Pero Marvel quería dejarnos bien claro que aquello no era como eso de los noventa. Esto era temporal. No era para siempre. Tanto es así que toda la etapa estuvo más hablando de su temporalidad que de otra cosa.
Y sin embargo, quizá esta vez era el momento de sustituir a Peter. Frente al Peter de los 90 que tenía todo un mundo de posibilidades y nuevas situaciones de frente, tenemos ahora un Peter Parker atascado en las mismas dinámicas desde hace más de una década. Donde antes teníamos una rica y prometedora galería de secundarios ahora nos encontramos ante la nada absoluta, agotados la mayoría de los comparsas más relevantes de los últimos años y sin previsión de aportar ninguno nuevo de calidad. Quizá el cambio en Norman Osborn que había ofrecido Spencer podría haber sido la base para algo más, pero en el fondo no era suficiente y se parecía demasiado a lo ya apuntado en otros momentos con Iron Man o la propia Industrias Parker.
Pero la Marvel de ahora es mucho más cobarde que la Marvel de 1995. No se atrevieron a dejar a Ben como hermano, no se atrevieron a recoger el testigo de otros personajes arácnidos, no fueron capaces de aprovechar a un personaje con una pequeña pero suculenta galería de secundarios y nuevas relaciones por delante. Volvieron a hacer como Slott. Volvieron atrás. Retrocedieron a lo de siempre.
Revitalizar un personaje no es fácil. Con un supergrupo puedes mover unos cuantos componentes y crear dinámicas nuevas. Con un personaje como Spidey eso es más complicado. Demasiados elementos asentados durante demasiado tiempo y en demasiadas adaptaciones como para competir, parecen pensar los guionistas y los jefazos de Marvel. Un pensamiento conservador y cobarde que nunca logra dejar su impronta en la Historia. La Gloria solo está al alcance de los audaces y hoy más que nunca Marvel necesita la audacia, mejor o peor orientada, que ha sido bandera del personaje durante toda su historia. No necesitamos un buen guionista, necesitamos un guionista valiente con libertad para darle a Spiderman una nueva oportunidad.
Mientras tanto seguiremos teniendo lo mismo de siempre y poco a poco añoraremos más aquellos tiempos, locos y salvajes, en los que no solo lo parecía sino que estaban pasando cosas.
Hoy tocaba una entrada llamada Lo que estorba del cómic en la que iba a exponer el hecho incontestable de que a los divulgadores, editores, medios y en general la mayor parte del mundo del cómic le estorban los autores.
En parte tenía intención de señalar el triunfalismo que ha habido con el Día del Cómic* -influida probablemente porque por fin han trincado pasta ministerial en forma de subvenciones, carguitos o charlitas- desde los titulares a las formas de contarlo y explicarlo, sacando en titulares datos como Jamás se habían publicado tantos cómics en España y obviando cosas como
«más del 86% de lo que circula por nuestro mercado es traducción de obra producida fuera de España»
«La edición propia, la española, ha descendido pese al incremento total de lanzamientos, y más la de primera edición, que ya no llega al 10% del total.»
Lo que pone al cómic de autoría español en el contexto de esta explosión de júbilo y cátedras. Ni siquiera es un asunto de que los autores tengan que sindicarse -que deberían de sindicarse- porque es que a las editoriales les viene mejor no publicar autores españoles. Como mucho, traducirlos.
Esas eran mis intenciones cuando se me ocurrió acercarme a uno de los saraos que se montaron para la ocasión, un asunto vergonzoso como de costumbre que incluía una exposición de cómic que hubiera dado vergüenza en Expofriki, cuatro mesas con autores pero no con público, y un cartel.
Este cartel:
Que es una cosa vergonzosa, pero que también ha servido para demostrar aquello de que ‘si está en Internet es grátis’. Perdón, ‘si está en Mastodón es gratis‘. Así que no voy ni a examinar lo que sale en los QRs o sus problemas asociados, que es lo que habría que hacer pero que claramente sería preocuparme en exceso pudiendo no hacerlo, porque parece que como ya he hecho mi buena acción de la semana en realidad no hace falta que escriba más.
*y el Tebeo, pero que no se note que hay una palabra en español, por favor. ¿Qué somos? ¿El servicio?
El primer número de la revista TBO apareció el 11 de Marzo de 1917. Es por esta efeméride que se decidió que la conmemoración de un día dedicado específicamente a la narrativa dibujada podría ser durante ese mes del año. Aunque el día 11 mejor no hacer fiestas, pues coincide con el Día Europeo de las Víctimas del Terrorismo y el Día de la Fontanería.
Pero ese día resulta que se celebra también el Día de la Abstinencia Digital, y puede quedar paradójico querer fomentar a la chavalada el consumo de cultura en el mismo día en que le incitas a dejarse las pantallitas, siendo estas su principal punto de contacto con la vida exterior.
De manera que hubo que buscar otro día, y finalmente se decidió en Consejo de Ministros que el día escogido fuera el 17 de Marzo, que estaba bastante libre y poca cosa le podría quitar protagonismo. Así que ahora sí.
Feliz Día del Cómic.
Y si por lo que fuera hubiera que volver a buscarle otra fecha, desde esta desorganización proponemos la del 22 de Abril.
Una cosa en la que puedo confiar es que si en algún momento quiero hablar de un marrón, hay dos opciones. O Sark ya ha escrito sobre ello o Sark ya me ha dejado el recadito de que lo haga yo. En este caso, por suerte, se trata del primer supuesto. De modo que por resumir mucho digamos que Scott Adams, el señor que creó Dilbert en aquella época en la que los webcómics eran un medio privilegiado lleno de oportunidades e internet iba a liberar las mentes de los ciudadanos del mundo, se ha hecho facha. Muy facha. O al menos, se ha destapado como tal. Cosas de divorciarse dos veces, de fliparse con Trump, de que Elon Musk te recomiende. Cosas que pasan cuando llevas años ganando dinero haciendo siempre lo mismo: acabas siendo un rancio. Como Alaska y Mario. Vamos, que probablemente era facha de antes.
El caso es que en lugar de seguir dándole bolo a sus cosas de facha, muchos autores han decidido reapropiarse un icono del noveno arte y del mundo digital como Dilbert y resignificarlo bajo una nueva dirección.
Sin embargo, la opción más habitual ha sido especular sobre nuevas posibles tiras de Dilbert bajo la nueva dirección que Adams, cada vez más enloquecido en su proceso de víctima de la cancelación, está tomando.
Es posible que a estas alturas ya hayáis notado cierta tendencia. Como un tropo visual bastante habitual. Esto es porque las tiras de prensa son cómic solo muy flojito y por tanto, no son un campo tan vibrante y creativo como el cómic de superhéroes.
Bueno, vais pillando la idea. En realidad esto es solo una muestra, claro. Hay más, ¡algunos incluso no incluyen referencias al KKK!
Por supuesto, toda este post viene a cumplir dos funciones en este blog. Por un lado, entendiendo ADLO! como el mayor repositorio de la Historia del Cómic en castellano de los últimos… bastantes años, es necesario preservar todos estos documentos para cuando Twitter fenezca y deje de funcionar. Por otro lado, al tratarse de una organización centrada en la DEFENSA! de los autores, uno podría pensar que desde aquí tenemos una postura completa. ¿Debemos considerar a Scott Adams un autor que necesita ser defendido?
Esta pregunta solo puede venir de una mente distraída que no haya hecho caso al punto esencial de este post. Y es que las tiras de prensa (y ya que estamos, los webcómics) no son cómics de verdad.
Amigos, adláteres, el Día del Cómic está cada vez más cerca y este año hay que celebrarlo como se merece. Y del casi inabarcable programa de actividades que están proponiendo las variadas asociaciones de nuestro pais permitidme hacer terruño y destacar el de una entidad canaria.
No, «canaria».
Donde las islas.
No, eso es Mallorca. Digo en África.
No *suspir*, eso es CEUTA.
Sí, exacto, «donde Tito Berni» *dobl suspir*
Una entidad canaria que no es una entidad cualquiera…
Entre las veinte actividades online y presenciales que ha ido celebrando anticipadamente la FCC+C me permitiria destacar dos. Una es la exposición «Medio siglo de Historieta» en La Habana. Presencial porque si no es en persona cómo vas a poder disfrutar a tope de las… ahm… propuestas culturales que ofrece Cuba e inebriarte hasta caer redondo con… estooo… los Logros del Socialismo™.
Y porque Cuba tiene un importante papel en la historia del cómic.
Ni que todo esto ya lo predijeran Los Simpsons. Y no es baladí mentar la animación, pues la cubana nos ha regalado grandes clásicos como Vampiros en la Habana y muchos otros como… a ver… si hombre… si por aquí tenia apun¡MAFALDA!
Cómo olvidar la entrañable adaptación de las tiras de Quino protagonizadas por Mafalda.
Bueno, de casi todas las tiras de Quino protagonizadas por Mafalda.
La otra actividad tiene lugar en ese sitio tan maravilloso cuando se usa bien y terrible cuando se usa mal que son Las Redes Sociales™, en las que su cuenta oficial propone usar el hashtag #DiaDelComic para recomendar tebeos que hayais leido y os hayan gustado.
Efectivamente.
Propone que useis vuestras cuentas de Twitter para recomendar tebeos.
Es una idea tan revolucionaria y al mismo tiempo evidente que seguro que, como yo, os estais preguntando cómo no se le había ocurrido a nadie antes. Y es por cosas así por las que os digo que todo el dinero de nuestros impuestos que se esté destinando a financiar la FCC+C e instalaciones adyacentes me parece poco.
La mala noticia es que el plazo para hacerlo termina mañana. Sólo teneis 24 horas para poder recomendar un tebeo en Twitter. Si lo haceis una vez acabado el plazo puede provocar consecuencias horrendas como que se te aparezca detrás tuyo Elon Musk la próxima vez que te mires al espejo.
La buena es que aunque 24 horas son insuficientes recomendar todo lo que merecería ser recomendado…
En 1964 el traductor que trabajaba en la edición de La Prensa de la serie El Sorprendente Hombre Araña se topó con un nuevo superhéroe en la colección. Pero eso de «Daredevil» no era nada fácil de traducir a algo cortito que cupiera en las viñetas, así que, inspirándose en la D del uniforme, improvisó. Total, no es que ese personaje fuera a tener mucho más recorrido
En 1966 la colección del Hombre Araña estaba teniendo tanto éxito que La Prensa abrió otras colecciones a su sombra para aprovechar el tirón. Total, los vecinos del norte producían historias pijameras de sobra, de modo que nunca se iba a dar la situación hipotética de que tuviera que dibujar las aventuras de Peter Parker desde México, ¿verdad? Y entre las colecciones elegidas para la siguiente tanda de lanzamientos estaría la de nuestro querido Dynamo… pero esta vez cuidando un poquito más la traducción
(¿Cómo? ¿Dan Defensor? ¿Quién es Dan Defensor, y por qué debería hablar de él?)
Siempre que se cuenta una historia se dejan otras de lado, a veces interesantes pero adyacentes y otras veces, simplemente, por mantener un mínimo de foco en la principial.
Y no, no estoy intentando justificar poner a dos señores de comisarios de una exposición sobre feminismo y cómic, sería tan ridículo como intentar justificar que una web para autoras de cómic llevara un juego de palabras con ‘útero’ a estas alturas de siglo.
Me refiero, por supuesto, a que cuando el otro día hablé de Scott Adams hubo cosas que me dejé fuera. Pero una de ellas me parece especialmente interesante de mencionar por algo que ha pasado también durante la semana (¿esta semana?, ¿la anterior?, ¿quién las distingue?)
Y por eso hoy vamos a hablar de Heart of the City. Por culpa de las Tortugas Ninja.
Ah, que quizá os falte información entre medias. Será más fácil empezar por el final. Van a hacer una nueva película animada de Las Tortugas Ninja.
Y esta es April.
Por lo que sea, imposible saber el qué, hay fanses quejándose de que no se parece a la original. Algo que nos puede parecer más o menos estúpido pero que es indudablemente cierto. Al fin y al cabo todos conocemos el aspecto de la April original de los cómics:
Igual que sabemos la historia detrás. Que Peter Laird quería que fuera una mujer asiática pero que Kevin Eastman decidió dibujarla a partir de su (entonces) mujer April. Se pueden encontrar fotos de April con cierta facilidad, por ejemplo en:
Por supuesto el señalar esto, o algunas de sus apariciones en esos primeros cómics de Mirage, como
No es nuevo, al fin y al cabo en la anterior versión animada de Las Tortugas Ninja ya teníamos a April.
Y la discusión fue la misma porque los racistas existen siempre.
Hay incluso gente que dice que no puede ser de color porque se apellida O’Neil, y que estoy esperando a ver su sorpresa cuando descubran la existencia de Shaquille O’Neal. Especialmente si es en Steel.
(Aunque hay una variedad de quejas sobre hacerla más infantil en lugar de una señora pechugona que, por un lado, mal, pero por el otro lado… bueno, al menos a estos no les ponen las niñas. Yo qué sé.)
El asunto es que salieron todo tipo de conspiranóicos a explicar que en realidad no era así porque el pelo era una permanente (?) o porque Eastman se había tomado libertades al crear al personaje (?) y no sabía lo que decía (?) porque el que sí lo sabía era Laird que cuando le preguntas ahora dice que lo de asiática de las notas no lo recuerda -el truco Stan Lee– y que será cosa de Eastman, igual que lo era lo de que fuera birracial, que para él valía blanca. Y por eso no había tenido problema con Lo que pasó.
Lo que pasó fue que decidieron ‘blanquear’ a April, según a quién le preguntes fue idea de la editorial o idea de la editorial tras ver los diseños para la serie.
(También hay gente que decide que estos cambios muestran un odio hacia las personas pelirrojas, pero yo diría que April es pelirroja en las versiones nuevas)
Por lo visto en aquel entonces había menos problema con modificar la apariencia de personajes. Yo qué sé, la integridad artística es un follón.
Lo que nos lleva de nuevo a Heart of the City.
Que es la serie que muchos periódicos eligieron para sustituir Dilbert.
Y que ya había sido mencionado antes en ADLO!, aunque con otro aspecto.
Que es, efectivamente, algo distinto al que tiene aquí:
En realidad la historia es moderadamente sencilla de explicar. Heart of the City llevaba siendo una tira cómica de cierto éxito desde su creación en 1998. Detrás estaba Mark Tatulli, que quizá os suene porque en 2008 -15 años de nada hace- le dedicamos un posteo a su ‘nueva’ creación: Liō.
Una tira que tuvo mucho más éxito. Tanto que en 2020 Tatulli -que llevaba varios años liado en una adaptación audiovisual- decidió que iba a dejar de ocuparse de Heart of the City.
Lo que pasa es que a Andrews McMeel no le parecía bien.
Aclararé que Andrews McMeel no es una persona de verdad. Ni siquiera es un niño de madera. En realidad en una empresa de la que también podríamos contar bastante, formada por los apellidos de los dos socios que la formaron y que ha ido comiéndose el negocio de la sindicación de cómics, además son de Kansas City, en Missouri, así que si alguna vez te has preguntado qué hay en Kansas ya sabes que es el epicentro de las tiras cómicas. Como decía, es una empresa y una de sus ramas principales es Andrews McMeel Syndication. Responsable de una cantidad enorme de tiras -podéis echar un ojo en otra de las ramas, GoComics – y a los que Heart of the City les seguía dando beneficios.
Así que propusieron un cambio de autor.
Que es algo que pasa con las tiras cómicas como con tantas otras cosas. Hay tiras que terminan porque los creadores lo deciden, hay otras que se continúan, también porque los creadores lo deciden. Así que Tatulli aceptó que la tira siguiera.
Y así pasamos de:
A esto otro:
Sí, la decisión fue ponerle color porque la importancia como webcómic iba a ser mayor que como periódico (aunque siempre podrían imprimirlo en Glorioso B/N). La idea parecía clara: Coges una tira que lleva funcionando 22 años, subes un poco (pero no mucho) la edad de la protagonista hasta la middle school y lo lanzas al mercado de los cómics infantiles/juveniles que está a tope.
La elección de responsable tampoco fue descuidada, acabaron eligiendo a Steenz, une autore afroamericane bi que había trabajado previamente como editore, dibujante y guionista. Lo suficientemente vocal como para quejarse de que Oni Press , para quienes había co-creado Archival Quality, había dejado de pagar los royalties a sus autores a mediados del pasado año.
Que los periódicos decidieran sustituir Dilbert con Heart of the City no parece, por tanto, una decisión tomada a la ligera. Y es que hay cosas que cambian para seguir igual, pero también hay cosas que evolucionan.