Ayudas al Primer Mundo

En el capítulo de «Todo esto ha sucedido antes» de hoy tenemos: Revueltas ciudadanas en la ciudad de Los Angeles.

La razón de entonces fue la declaración de inocencia de cuatro policias que habían empleado fuerza excesiva en la detención del ciudadano Rodney King. El motivo de la indignación popular era el mismo por el que se le dio el alto al taxi que King conducía: era negro.

Esto sucedió en 1992, año que como los visitantes de este sitio debéis conocer, fue el año en que comenzó la anadadura de Image Comics de mano de sus Siete Padres Fundadores, ROB! entre ellos. Hasta su entrada en el juego, el mercado era cosa de dos editoriales. Sobre este asunto, DC no hizo ninguna referencia en sus cuadernos. Marvel, como editorial, tampoco se pronunció, y tan sólo uno de sus guionistas levantó la voz para al menos dejar constancia.

No se hace referencia al hecho racial, pero cuando más adelante se plasman los disturbios, queda claro. Esto pudo encontrarse en el número 8 de Nomad, de diciembre de 1992.

Escrito por Fabian Nicieza y dibujado por Pat Oliffe. Por un desliz editorial, ninguno de ellos estuvo acreditado en este número. El error fue subsanado en el correo del número 12. En la historia, Nomad combate con algunos manifestantes violentos y contribuye al rescate de víctimas de los daños.

Y ¿ya está? ¿en esto quedó la plasmación de un movimiento social tan importante en los comics de la época? pues como ya he dicho, Image acababa de nacer, pero no iba a quedarse parada. Y como el compromiso social no está reñido con la molonidad, la obra con la que pensaban recaudar fondos para la reparación de los daños tuvo el atractivo título de Operation: Urban Storm. Nombre poderoso y noventero como pocos.

Sí, la información está sacada del reverso de un cromo de Shadowhawk. Porque el que fuéramos analógicos no nos impedía ser transmedia. Y como queda atestiguado, ROB! fue el alma mater de la iniciativa.

Hubiera sido fenomenal poder mostraros imágenes de los incipientes personajes de Image armados hasta la trancas y tomando partido en la revuelta, pero sucedió que entre unas cosas y otras el proyecto no cuajó. Bastante tenían los autores por separado con incumplir las fechas de entrega de sus obras como para improvisar otra cosa juntos. Al menos no llegaron a anunciarlo en firme para pedidos a librerías.

Sin embargo, algunas páginas llegaron a realizarse y fueron publicadas en algún momento. Como fue el caso de una aventura de Shadowhawk, que vio la luz como uno de los extras en el recopilatorio de su primera serie limitada.

A tope estaba Jim Valentino con el tema. Gracias infinitas a Leanna Creel por haberle inspirado, consta en los créditos. A lo mejor os suena el nombre, es una de las dos hermanas de Joy Creel, a la que igual conocéis más por su apellido de casada.

Joy Liefeld. Sí, la mujer de ROB! tiene dos gemelas. Y para los sucios de mente, sabed también que Leanna en la actualidad está casada con una mujer. Superad eso.

En fin, que claro queda, pese a que no hubiera historieta que lo sustentara, el compromiso de ROB!, sus compañeros y su familia con un tema social que tan de cerca le afectaba. No en vano tanto Fullerton, la población que habita, como Calabasas, hogar entre otros saraos de Malibu Comics, la editora de Los Siete antes de que creasen sello propio, son sitas en California.

También vio la luz en el recopilatorio The Art of Homage Studios la historieta Stormwatch: Urban Storm. Que de haber aparecido a tiempo en su momento hubiera sido la primera aparición del grupo, previa a su serie del año siguiente. Y es del poco material de Stormwatch dibujado por Jim Lee.

Al menos así queda cumplido eso de sacar personajes con armamento e interviniendo en rescates, de cuando Jim Lee todavía molaba.

Cuatro páginas en las que Brandon Choi no empleó ni un solo acrónimo militar. Un hito. Una rareza.

Esperamos que la situación actual no llegue a la intensidad de la pasada, y que por tanto no sean necesarias colectas mediante ediciones especiales. Poco proclives a contribuir en causas así imaginamos a las grandes editoriales actuales, propiedad fluctuante de megacorporaciones con múltiples intereses, no todos claros. Aunque sí imaginamos a ROB! sacando a subasta ediciones con portadas especiales de lo que sea, si es necesario. Siempre por una buena causa, por supuesto.

Por cierto, que buscando sobre la «Rebuild L.A. Foundation» a la que hubiera ido la recaudación de Operation: Urban Storm, los únicos resultados son los que hablan sobre el comic. Bueno, como el proyecto no llego a salir, tampoco es tan importante que la fundación no existiera, supongo.

Por cierto, que ya que decía lo de «ediciones con portadas especiales», sabed que ya está abierta la subasta cuyos fondos irán destinados a una de las ONG que atendió a víctimas de la DANA del pasado 29 de Octubre, nuestra particular Tormenta Urbana, promovida por, entre otros, Ferran Delgado. La ONG, World Central Kitchen, existe.

Seré tu amante vampiro

Si me encuentro esta viñeta en un tebeo de 1995, este es buen momento en la Historia para hacerlo notar y ver qué otros mensajes pueden traernos sus páginas. Los taquiones deben ser poderosos en el mismo, y no es lo único que emana poder.

Mark Texeira nunca defrauda, la portada tiene prácticamente todos los ticks marcados: dientes, nocturnidad, luz de luna, murciélagos, pose, jamona, ausencia de pies… Una lástima pues que su contribución se limitase a la cubierta, y que la mitad de los que acompañaban a Jim Valentino en este cruce pareciesen seudónimos ¿pero acaso leon014 no parece precisamente nombre de bot, no es acaso esto otro motivo para reforzar nuestra fe en los taquiones de la obra?

Es decir, pocos nombres para un entintador me resultan tan molones como Chance Wolf; imaginad mi sorpresa cuando compruebo que, efectivamente, existe, e incluso que su último trabajo en historieta ha sido entintar precisamente a ROB! en su despedida del mercenario bocazas, en Deadpool Team-up (título que no traduzco porque la editorial encargada de publicarlo en castellano nos lo está escamoteando de momento, esta más ocupada sacando Aves de Presa). Lo mismo podría decirse del dibujante de fondos, del rotulista, y sobre todo de la editora. Al principio, viendo la contundencia de la portada noventera, lo de Meloney Crawford parecía creado acorde, pero luego me he dado cuenta de que se le debe añadir el apellido Chadwick de la linea siguiente y que no es un nombre inventado, que sigue escribiendo cosas (junto con, de todos los apellidos posibles, Michael Sweeny ¡Meloneys al poder!).

Para poder hablar de esta aventura, convendrá hacer una mínima introducción al personaje de Shadowhawk, ya que poco o nada se ha visto del mismo en nuestra piel de toro. Creado por Jim Valentino; justiciero con SIDA. Mínimo, ya lo dije. El caso es que su condición sanitaria se vio revertida en el número anterior de esta miniserie de dos episodios (¡un crossover con consecuencias!¿cesarán los prodigios?), uno que aunque la portada era de Joe Jusko, no podía competir en molonidad con la del segundo libro.

Allí ambos personajes se encuentran, y como en todo buen cruce el primer contacto es violento.

Y aunque parece en un primer momento que la confrontación terminará con Shadowhawk haciendo strike con una maniobra similar a la del final de la actuación de nuestra representante en Eurovisión,….

…sucede lo inesperado.

No me refiero a que la draculona le muerda, está en su naturaleza, sino más bien a que la mordedura consigue eliminar su enfermedad ¡la cura del SIDA! aunque con un pequeño efecto secundario, eso sí.

Ya estamos pues en disposición para entrar en materia en el segundo libro, en el que podréis comprender…

…que fue de justicia hacer constar en letras gordas en los créditos al dibujante de los fondos.

No cesan los mensajes tal vez proféticos para el lector avisado, pues asistimos a escenas de excesos policiales…

…en un aeropuerto con nombre de expresidente.

Entretanto, Shadowhawk comienza su habitual ronda justiciera nocturna, los casos típicos.

Sin embargo, la nueva condición del personaje lo torna más violento incluso. La confrontación deviene en una orgía se sangre y cajas de texto.

La familia, eso sí, sobrevive. Esto llama la atención de Vampirella, pero esta vez no se enfrenta a un enemigo, como en el episodio anterior, sino con otro como ella, con un aliado ¿y que hace ella pues? aliarse.

Ilustraciones a toda página con texto a un lado, como un Neil Gaiman de 1995. Gusto. Sensibilidad. Finezza. Mestizaje de logos. Poesía pura.

Pero vamos a lo importante: la visita del Papa y el gentío haciéndose oír (la referencia al grupo ultracatólico es obvia ¿cuándo fue la última vez que visteis un sonotone en primer plano en una viñeta? nada se dibuja por casualidad)

Ya, es imposible disimular los ominosos personajes con chaqueta, sombrero y oscuridad. Así que, aunque la seguridad del Sumo Pontífice parece suficiente…

…la violencia se abre camino.

Nuestros héroes se dirigen prestos al lugar.

En el momento de impedir la hecatombe.

(de todas formas, por si acaso, creyentes de los Taquiones, su nombre será Kaul. RecordAdlo!)

A la resolución le falta un punto de epicidad, aunque esto es lo que pasa cuando por contrato tienes apalabrado un número de páginas y luego te tiras varias haciendo poesía con texto al lado, que al final hay que ir rápido.

Finalmente, los personajes se despiden, cada uno para su serie.

Y, como decíamos, este cruce tuvo consecuencias, y es que Shadowhawk tenía un nuevo propósito…

…ya que ahora era capaz de curar el SIDA.

Desgraciadamente la cosa no tuvo mucho futuro, pues Valentino se deshizo de este personaje con tanto potencial y poco después sacó un nuevo volumen de la serie (The New Shadowhawk), con un nuevo personaje portando la armadura del protagonista. Siete números duró. Y aunque ha pasado por varias encarnaciones, hay algo que se mantiene.

Pues sigue gustando de la confrontación.

Las Bad Girls, un género en si mismo. Las hay que muerden, las hay que chupan, la perdición de todo Sombralcón. No se apellida Valentino por casualidad tampoco.

Y la historia llegó a su fin ¿qué hacemos con los taquiones? no sé vosotros, yo tendré el posteo guardado para cuando la agenda de visitas del Santo Padre le llevé a su país de origen. Entonces cotejaremos. Mucho cuidado ahí afuera entretanto.

Swipe que me estás matando (ochenta y seis)

ROB! Liefeld. Shadowhawk #0 (1994)

Milo Manara. Spider-woman #1 (2015)

Swipe que me estás matando (ochenta y seis). Para mi que va a ser:

 
pollcode.com free polls

(Sacado del Extreme Group de ROB! en el Facebook ¿quién dijo que en las redes sociales sólo habían tontás?)

The New40 (6)

shadowhawk0.jpg

(por J Calduch)

Shadowhawk. Un personaje de Jim Valentino.

¿Le conocíais? ¿y a Shadowhawk?

No se puede negar el poder de los números, y en términos cabalísticos el siete es una cifra con mucha atracción. Es así como algunos explican que los artistas hot que conformaron el nucleo inicial de Image contasen con Jim Valentino en sus filas. Para ser siete.

Porque artísticamente no puede decirse que Los Guardianes de la Galaxia en los que Valentino trabajó duante 26 números  (no sólo dibujando, también haciendo ¡guiones!…otra cosa que los apartaba de sus supuestos compañeros) fuesen el colmo de la molonidad.

ggalax.jpg
Y en lo personal, Valentino no pertenecía a la misma generación que los jóvenes molones e impetuosos que escaparon de Marvel. En aquel decisivo 1992 los otros eran ilusionados veinteañeros, mientras que Valentino acababa de soplar 40 velazas de su tarta de cumpleaños. También en esto le costaba integrarse con los demás.
ImageFounders1992.jpg
Aunque no puede negarse que lo intentaba, podemos decir que a Valentino le faltaba el glamour artístico y personal que los demás autores rebosaban. Pero aún así le dejaron estar. Y fueron siete.

Y fue llegado a Image cuando Jim Valentino creó Shadowhawk. Es posible que no lo conozcas, claro, pues es el único título insignia de uno de los siete autores de Image que no ha tenido edición en castellano. Curioso ¿verdad?

shadowhawk-1.jpg
Un héroe olvidado (excepto por quien alguna vez lo ha guionizado, claro) creado por el autor arrinconado.

Pero ROB! es magnánimo, y no quiso que personaje y autor quedasen en el olvido. De manera que inmortalizó a Shadowhawk en la ilustración que hoy muestro para supuestamente defenderla. Y como tantas veces debo volver a preguntar ¿para defenderla de qué?

Una suerte de héroe enmascarado con traje tecnológico y plateado, con sus bolsitas, sus cartuchos y pegado a la pared con sus botas especiales y sus guantes de garras. Porque un personaje con un nombre palabra compuesta con Hawk/Halcón debe llevar garras necesariamente. A menos que necesite manos finas para tirar con arco, claro, eso es otro cantar.

Tenemos pues un personaje que para hacerlo algo más popular Liefeld lo dibujó en una portada y lo clavó. Poco más hay que decir. Y años más tarde unos niñatos lo desentierran y se ríen no se sabe bien de qué. Los autores de Image tenían que ser siete. Y las imágenes de Progressive Boink tenían que ser cuarenta. Por eso se colaron ciertas cosas.

Por cierto, que el legado de Shadowhawk continúa en nuestros días, no en vano los noventa han vuelto para quedarse. Pues hay que decir que bajo el casco de Shadowhawk habitaba un personaje de raza negra. Y precisamente esta semana se ha anunciado el nuevo cambio revolucionario para el título pobre de la molona línea de Batman, Batwing, el batman africano ¿Cuántos títulos conforman dicha línea, tal vez siete?

2455.jpg
 
¿Taquiones, homenaje, coincidencia o…Bob Harras?

Shadowhawk seguirá vivo mientras lo recordemos, y si todavía lo recordamos es por un dibujo de ROB!

Más revivals. Más evolución.

Parece que el ejemplo de Rob! con su miniserie de X-Force ha cundido y ya tenemos el retorno del niño feo de la generación Image.
Vuelve ShadowHawk, el personaje que tuvo su primera intervención en las páginas del Youngblood Nº2. (Y pensar que este es uno de los que le dieron con la puerta en las narices a Liefeld en Image…)
Vuelve Jim Valentino que firma el guión, el dibujo y el entintado de este «The Return of ShadowHawk One Shot» que lo mires por donde lo mires no tiene desperdicio.

Y Valentino es de los que también «evolucionan». Si sigue por este camino se va a cubrir de gloria.
Ahí van unas muestras para gente con el estómago a prueba de sensaciones fuertes.

Primera página. Así, sin avisar. ¡¡¡PLAFF!! Homenaje a Promethea que te crió.

Le añadimos un villano (¡Ah! ¡No! Que no es un villano. Es una villana. Lo dicen en el texto) con un diseño innovador.

Seguimos con unos primeros planos realistas que nos ayudan a entender la motivación de los personajes.

Y acabamos con un guión para gente rápida y despierta que las caza al vuelo del que la viñeta anterior es el máximo exponente.

Una voz misteriosa (que nunca puede faltar) habla sobre un escudo y el protagonista dice algo del escudo y el dibujante dibuja un escudo.
Pero aún hay más. En la misma viñeta la voz nos habla de una espada y ShadowHawk se refiere a esa espada y Jim dibuja una espada.
¿Para qué se puede contar algo una vez si se puede contar tres?
¿Para qué se puede contar algo una vez si se puede contar tres?
¿Para qué se puede contar algo una vez si se puede contar tres?

Rob! empezó. Abrió la caja de Pandora. A partir de ahora a disfrutar y esperar que muchos más artistas vuelvan de sus retiros y sigan evolucionando en su arte. Si este año que empieza aparece algo dibujado por Milgrom y coloreado por la santa esposa de Miller se rompe la baraja, se cierra el chiringuito y hasta aquí hemos llegado.