La relación de los tebeos de superhéroes con la música siempre ha sido… complicada. Y sin embargo, es una historia que se remonta muy atrás en el tiempo, una relación que ha ido evolucionando y moviéndose. En algunos casos, con conocidos éxitos, como es el caso de Dazzler durante la fiebre disco de los 70
Una relación que con el paso de los años se ha visto obligada a evolucionar, y si en los 70 se llevaba el estilo escotado y de brillo metálico a lo ABBA, en 2018 al parecer los señores de Marvel pensaban que se llevaba el estilo Avril Lavigne… una década después de que hasta Avril Lavigne dejara de llevar esas pintas.
Más atinados iban en aquel momento los muchachos de la Distinguida Competencia, que decidieron darle a Canario Negro una banda de rock duro y una estética al estilo Taylor Momsen.
Y es que esta búsqueda en la música alternativa de respuestas estéticas de cara a la modernización del mundo de los superhéroes nunca ha parado. A veces con más aciertos, y otras veces con más fallos. En Marvel lo han seguido intentando con el rollito punk.
O con su hermano triste, el rollito emo.
Aunque debo decir que Marvel también llega tarde a esta, porque en DC ya lo habían tanteado. Y no, no hablo de Sandman.
Pero es cierto que lo que a DC siempre le ha molado es el rollo metalero a saco.
Y por eso no es raro que Greg Capullo, que en su momento le hizo portadas a Korn…
…traiga ahora a DC el único género musical más hortera, aburrido, rancio y grimoso que el metal chandalero de los de Bakersfield. El Death Metal.
Lo de DC Metal y el multiverso oscuro es que no tiene ni píes ni cabeza…
Y además mataron a tu perro.
¿Que Snyder y Capullo son muy fans de la música metalera y DC les deja manga ancha en todo (sobre todo a Snyder)? Supongo…
O ya solo con que Capullo lo sea, a Snyder ya le vale. Recuerdo que Capullo defendía que en su etapa de Batman con Snyder él también era responsable de ideas para escenas y tal.
Doomsday, ésos sí que tocaban bien. De morirse.