ADLO! Novelti Librari

Una vez más se pone a prueba nuestra capacidad para hacer frente a la adversidad y, remando todos juntos en una misma dirección, reconducir el rumbo de la nave en la que todos los Españoles viajamol.

La amenaza llega una vez más de una multinacional editorial, pues viciados por otras costumbres creen que en el territorio Español vale todo, y mire usted, esto no es así. Porque Españoles somos Todos, y Todos tenemos los mismos derechos. Y lo que no es admisible es que una editorial que opera en nuestro país decida publicar un material y éste no llegue en castellano a todos los puntos de nuestro territorio, independientemente de las peregrinas ideas políticas de los asalariados que circunstancialmente tomen las decisiones. No es admisible, esto es algo en lo que la Gente de Bien estamos de acuerdo. Y estamos también de acuerdo en que debemos hacer algo al respecto. Pero es que además esta vez vamos a hacer algo al respecto.

No se trata de que el material sea mejor o peor, ni que las tiras…sí, tiras ¿o no estamos hablando de lo mismo?

¿Cómo? ¿que si este comunicado iba a tratar sobre la decisión de Glénat de editar Kimagure Orange Road en catalán cuatro semanas antes de hacerlo en castellano? pues no ¿acaso eso interesa? allá se lo guisen ellos solitos y que pierdan dinero si quieren editando en vernáculo esos mangas del demonio que se leen al revés. Y si se creen muy listos por sacar la edición en castellano unos céntimos más cara restreguémosles de dónde nos llega el dinero con el que luego les pagamos. Lo que Juan Navarro conseguirá con esto es crear una generación de disléxicos y catalanoparlantes, valga la redundancia.

No, esto es algo mucho peor. Se trata de una especie casi peor que los catalanes. Estamos hablando de los chilenos.

No son gente de fiar, los chilenos, un pueblo violento que con sus bárbaras movilizaciones impidió que su Caudillo pudiera prolongarse plácidamente en el poder hasta la fecha de reunión con el Hacedor. Un triste 11 de Marzo abandonó el poder, como 11 de Marzo fue también la fecha en la que en esta República su último presidente socialista consiguió el hito de paridad que nuestro pueril Zapatero no conseguirá jamás: que una mujer sea Presidente del Gobierno. O a lo mejor sí que lo consigue, que las sorpresas están a la orden del día.

Pues resulta que hay un historietista chileno, un tal Alberto Montt, de aspecto más que sospechoso. Los chilenos son así, gente que se abriga en pleno Agosto…

                …con juegos de palabras…

                                    …una visión personal de escenas (snif) cotidianas…

                                                                                        …o sobre las situaciones de pareja…

En definitiva, una voz que nos habla de lo divino…

Pero hete aquí que el pasado viernes 8 de Agosto, Ediciones B lanzó al mercado una recopilación de esta obra de Alberto Montt.

148 páginas en papel de buena calidad, con un prólogo dibujado por Liniers, para poder llevarnos la Monttmanía con nosotros en estas fechas estivales sin depender de encontrar ese wireless seguro y gratuíto que nunca existe en la localidad vacacional. O para regalar a los seres queridos en cualquier ocasión. Bodas, santos, cumpleaños, Navidades, incluso divorcios. Siempre hay un Montt para cada situación.

Porque no van a encontrar el En Dosis Diarias 1.1 de Alberto Montt en su librería.

Porque Ediciones B ha decidido en principio publicarlo únicamente en territorio chileno.

Así que, españoles, para seguir disfrutando de la obra de Alberto Montt vamos a seguir dependiendo de un incómodo monitor, mientras otros podrán llevarla consigo dónde quieran.

Y cuando Montt alcance la fama global y sus primera ediciones sean buscadísimas piezas de coleccionista nosotros podremos decir «sí, yo le conocí y estuve ahí…pero Ediciones B no quiso publicar su obra en mi país«. Y ese día seremos por eso un poco menos felices.

¿Queremos eso?

¿Vamos a dejar que sólo unos pocos disfruten de lo que muchos quieren?

Digámoslo bien fuerte: ¡NO!

La discriminación territorial de las ediciones pone en peligro la unidad de España. Queremos una sola edición, lo más grande posible, y si no puede ser gratuita, la menos lo más ajustada posible.

Ediciones B tiene la obligación de editar En Dosis Diarias 1.1 de Alberto Montt en España. Se debe a su público, y su público somos todos. No debe marginar al grueso de la población en virtud de una mera distinción territorial, ni siquiera aunque haya un océano por medio.

Por todo eso, Españoles, debemos hacernos oír.

Y en virtud de todo esto, el propio autor de la obra sugirió en su sitio que todo aquel interesado en que En Dosis Diarias 1.1 sea publicado en su territorio envíe un mensaje a Gabriela Pretch, de Ediciones B en Chile, para que ella redirija las peticiones a los cargos pertinentes. Y desde Adlo!, en nuestro papel de servicio público, vulgo urinario, nos hacemos eco del llamado y ponemos a disposición de nuestro amigos, simpatizantes, o simplemente visitantes un formulario dirigido a Gabriela Pretch con una petición ya redactada, de manera que el interesado sólo debe firmar, editar el texto si cree conveniente, y enviarla.

SI estás interesado, envialo. Mucha gente será feliz gracias a este sencillo gesto. Te sentirás mejor contigo mismo y con otdos los que te rodean.

Si no te decides, si no quieres hacer felices a los demás ni a ti mismo, apelamos a tu orgullo de Español ¿vas a permitir que los chilenos disfruten de esta obra y que los Españoles no tengamos acceso? ¿vas a consentir esto? ¡por supuesto que no!

Todos tenemos pues, un motivo para pedir la publicación de En Dosis Diarias 1.1 de Alberto Montt en España. Y cuanto antes lo hagamos antes se hará realidad.

Ah, por un fallo del sistema que no hemos podido resolver, el texto es editable, de manera que puede servir también para los interesados de los demás territorios en los que Ediciones B opera, como Argentina, Colombia, México, Uruguay y Venezuela. Siéntanse libres los lectores de aprovecharse de esta falla.

SI creen que Montt y España lo merecen, hagan circular el enlace al formulario a todos sus seres queridos, aquellos que sepan que disfrutaran de estas dosis de Alberto Montt. Posiblemente lo mejor que nos llegará de Chile desde Manuel Pellegrini.
     
Y sí, sabemos que la selección que mostramos aquí no es perfecta, y que los que ya conocen las dosis tendrán otros favoritos. Todo eso y mucho más es posible que podamos verlo poblicado por aquí. Depende de nosotros.