Qué mejor dia que este, el de los trabajadores, para recordar que tras más de CINCUENTA AÑOS tranquilizándonos con el mantra de que la robotización iba a servir para librar al ser humano de los trabajos mecánicos y repetitivos y permitirle dedicarse plenamente a la creatividad…

…en la actualidad los humanos están condenados a trabajos mecánicos y repetitivos…

…mientras que los robots se han quedado con los creativos.
¿Quién habría podido vérselo venir? Ciertamente no nuestros políticos, ni nuestros emprendedores, mucho menos los ciudadanos que les votan y apoyan con sus compras.

No es como si la rebelión de las máquinas fuera un tema clásico en la ciencia ficción.

O un argumento recurrente al que se vuelve una y otra vez.

Vamos, ni que LITERALMENTE en la obra en que se inventa la palabra «robot» lo primero que hicieran fuera rebelarse contra sus amos humanos NI NADA PARECIDO, HOYGAN.
No. Nada podría habernos sugerido que la llegada de la inteligencia artificial pudiera suponer algún tipo de amenaza para los derechos y libertades de la humanidad. Qué mejor evidencia de ello que una mente privilegiada como la de Elon MUSK haya apostado tan fuertemente por su desarrollo.

¿Quién podria haber mirado el logotipo de su empresa desarrolladora…

…y ver algo que NO fuera una imagen del prometedor futuro que nos auguraba?

Es por eso que cuando Musk, como figura clave del avance tecnológico de nuestros dias, construyó COLOSSUS, un complejísimo superordenador proyectado para hacer avanzar como nunca antes la inteligencia artificial, a todos nos pareció una noticia excelente.

Cuán distinto hubiera sido la historia de haber existido una película en la que Forbin, figura clave del avance tecnológico de nuestros dias, hubiera construido COLOSSUS, un complejísimo superordenador proyectado para hacer avanzar como nunca antes la inteligencia artificial.

Con erótico resultado.

A lo mejor si Musk lo hubiera llamado W.O.P.R. …

Musk nunca ha construido nada, es un drogadicto con un IQ por debajo de la media. Simplemente tiene dinero para ordenar a otras personas que lo hagan.
«Mientras que los robots se han quedado con los creativos».
Para mí que el Arquitecto cayó en que los trabajos creativos eran los mejor remunerados, mientras que los mecánicos y repetitivos se pagaban al peso. Y teniendo en cuenta que los robots no cotizan, el cambio de estrategia estaba cantado.
Por otra parte, no sé hasta qué punto se le puede llamar creatividad a plagIAr como un gorrino.
Donde esté El engendro mecánico, que se quiten los Oroks ésos.