Una de esas cosas de las que uno no debería estar orgulloso es de haberse leído prácticamente cualquier tebeo con el nombre de Spiderman en la portada publicado en 60 años de (irregular es poco) historia editorial del personaje. Por eso, cuando de pronto aparece algo de material que no conocía, siempre estoy abierto a caminar más aún en esa senda maldita que es leerte todo lo que hay de tu personaje preferido para constatar que… bueno, que igual no hay TANTAS cosas interesantes que decir con él. El otro día mi querido @ximicomix me advertía en Twitter de la existencia de dos números especiales, un crossover único entre el trepamuros y… Backlash.
Creado del genio creativo de Jim Lee y Brett Booth, Blacklash es uno de los personajes fundacionales del universo Wildstorm. Mitad atlante, mitad alienígena, ninja, mutante, espía, veterano de la II Guerra Mundial, el personaje lo tenía todo para triunfar, igual que todos los demás personajes de la prometedora editorial. Además de todo esto, tenía el poder de tejer redes psíquicas que le permitían atrapar enemigos y balancearse por los tejados, por lo que en algún momento de 1996 alguien decidió que era el candidato perfecto para cruzarse en el camino de Spider-man.
En aquel momento, casualmente, Spiderman estaba pasando por unas horas complicadas. Peter Parker era padre y el manto lo había tomado Ben Reilly, que todavía en aquel entonces creía que era el Spiderman original, mientras que el Peter retirado era el clon. De modo que aunque Spiderman tuviera muchos años de historia editorial, el personaje estaba casi nuevo, estrenando uniforme, sin personalidad ni carisma como para eclipsar a un recién llegado. Si hubo una situación perfecta para que editoriales jóvenes cruzasen a sus personajes con Spiderman sin miedo a que este les robase el protagonismo, no hubo un momento como 1996.
El trabajo de escribir esta obra magna quedó en manos de Brett Booth, dibujante y co-guionista habitual de la colección del propio Backlash. Aunque ninguno de sus alumnos llegó a los niveles de genialidad del maestro JIM!, debo admitir que el trabajo de Booth a los lápices es bastante GENIAL.
Aquí los tenéis, luchando contra los dos enemigos designados para este crossover. Al de la izquierda ya lo conocemos, era inevitable que en aquellos años apareciera Veneno, haciendo muchas menciones al tema de los simbiontes y a Matanza, su vástago asesino. A la derecha, al villano de Wildstorm escogido. ¿Qué? ¿Que os suena de algo? Por supuesto, es Pike, de Wildstorm.
¿Cómo? ¿Que se parece a otro personaje? No sé de qué me estáis hablando. No tiene nada que ver con ningún otro mercenario creado en los 90. Y la prueba está en que Pike…
…tiene pies.
Para completar este elenco de lujo tenemos a Taboo, una pelirroja poseída por un simbionte vampírico que lanza descargas de energía y es la exnovia de Pike. Y Veneno cree que es un nuevo producto de la reproducción alienígena de su propio simbionte. Y, bueno, se pasa toda la pelea final sin dar señas de vida. No se la podría intercambiar por una lámpara sexy con un simbionte vampírico porque el concepto de lámpara sexy y Kelly Sue DeConnick, igual que el resto de mujeres que hacen tebeos de superhéroes, aún no se habían inventado en 1996.
¿Qué os puedo decir sobre este tebeo? Puro 1996. ¿He comentado ya lo GENIAL que es Brett Booth?
Pues dado que dibujar todas estas páginas es indudablemente un esfuerzo ingrato, el bueno de Brett contó con apoyo para los guiones. El guionista Sean Ruffner se encargaría de apoyar la prosa que debía dar forma al carismático encuentro entre estos personajes. Si no os suena el nombre de Ruffner, os confieso que a mí tampoco. Buscando en Google apenas me aparecen sus trabajos en Image, tanto en Backlash como en la breve cabecera The Kindred, donde junto con otros cuatro guionistas escribiría 4 trepidantes números antes de su cancelación.
¡Ahí está en la portada del primer número, compartiendo créditos con el mismísimo Jim Lee! Como véis, en esta también sale Backlash. El otro no es Pike, no. Es otro personaje de Widlstorm totalmente original y CREADO POR LOS AUTORES llamado Grifter.
Volviendo a Ruffner, se trata de un autor tan desconocido que no pude resisitirme, y tras acabar este crossover fuí a leer la única pieza de Marvel que encontré acreditada a él aparte de estos dos números de Backlash/Spiderman.
¡Team X 2000! ¿Dónde has estado todo este tiempo? Además dibujado por Kevin Lau, al que seguro que los más avezados recuerdan por su estilo amerimanga en su brevísima etapa de Puño de Hierro en 2004.
Sin embargo, el pesado velo de Quesada y los 2000 empañaron en esta obra el talento natural para la GENIALIDAD de KEVIN! mostrado en Team X 2000 en toda su gloria.
En fin, un número único que en pleno 1999 nos daba todo lo que el ávido lector de los 90 deseaba y ansiaba de un buen tebeo mutante.
¡Cable! ¡Songbird! ¡Bishop! ¡Lobezno Ciborg del futuro! ¡El Doctor Muerte! Los 90 más puros y duros de todos los tiempos. No se puede negar la influencia de los maestros a través de estas páginas. De modo que doy gracias por haberte encontrado, Kevin Lau. Y a ti, Sean Ruffner. Y por supuesto, a ti Brett Booth. ¡Gracias a todos por hacer los tebeos que sí que vale la pena leer!
Aquel cruce del arácnido lo publicó acá la extinta editorial VID, de una manera tan descuidada que la tirada completa (de verdad; LA TIRADA COMPLETA) salió con unas 16 páginas invertidas y en desorden… Aquello fue tan desastroso que tuvo que hacer una impresión nueva para reponer los ejemplares (que tenías que enviarles por correo con porte pagado para que te regresaran el ejemplar en buen estado).
La verdad es que aquello era tanta molestia que yo preferí quedarme con mi ejemplar defectuoso.
A mí me tocaron algunos cómics con páginas que fueron impresas con colores invertidos.