ADLO! : Con L de Lambert

Christopher Lambert es un género si mismo, como Sir Paco Martínez Soria.

Ya puedes meterle en una comedia, un drama, una de acción o un anuncio de compresas que se convertirá inmediatamente en «Una de Lambert«. Estas películas se caracterizan por polarizarse en torno a la brillante actuación de uno de los actores que mejor sabe interpretar a alguien vagamente misterioso y siempre dispuesto a ocultar sus verdaderos sentimientos.

Lambert es injustamente criticado por su forma de actuar por esos críticos que no se molestan en investigar un poco sobre las características de los actores. De lo contrario habrían averiguado que, aunque Niuyorquino de nacimiento la posición de su padre como Diplomático le hizo criarse en Suiza, concretamente en Ginebra.

Esto marcó definitivamente sus gustos y formas, tal fue su inmersión en Ginebra que durante un tiempo hizo cine Francés.

Por suerte saltó a Hollywood dónde supieron reconocer su talento interpretativo dándole un personaje cruce entre el mono y el hombre en Greystoke. Tras este éxito llegó pronto «Los Inmortales» en los que desarrollo toda su capacidad para poder salir en las siguientes partes.

Su vida estaba encauzada realizando grandes trabajos como el Ajedrecista de «Jaque al Asesino» para la que compuso a un tipo callado y silencioso, «Fortaleza Infernal» en la que hacía de un tipo taciturno y que sufría las penalidades interiorizándolas o «Gunmen» donde estaba magistralmente retratado como la mitad de una peculir pareja formada con Mario Van Peebles (él era el callado).

Su fama se expandía e incluso se rumoreaba que, con su buen gusto habitual, la princesa Estefanía de Mónaco había tenido una aventura con él. Obviamente, un periodo tan ríco emocionalmente para él tenía que dar a luz grandes colaboraciones como su actuación en la película de culto «Mortal Kombat» interpretando a Lord Radien, «La Estrella del Norte«, «Adrenalin» o «Nirvana«.

Pero aún estaba por llegar su Edad de Plata, apunto de comenzar el 2000 participó en varias películas, destacando entre ellas la mítica «Beowulf» y, sobre todo, su consagración como talento renacentista en «Resurrección» película que muestra unas claras inquietudes intelecturales y en cuyo guión colaboró.

Es lógico que este periodo acabara dando una Gran Obra como es «Druidas«. Una aproximación histórica a Vercingetorix el célebre caudillo galo silencioso e imperturbable. Nadie antes había imaginado que las peleas se resolvieran así, ni había tenido el acierto de permitir a Inés Sastre que actuara para al gran pantalla.

Aún sigue dando obras para nuestros ADLáteres ojos, demostrando que sabe interpretar un amplio registro de personajes y que su talento le permitiría actuar en cualquier tipo de película sin importar el género (ni el número) convirtiéndole en un actor tan GENIAL! que desde ADLO! no podemos más que defenderle.

Aviv Trëbmal!!!