Desde aquí repartimos ideas y conceptos para la manipulación creativa y el abuso cultural. Somos el diario de lo genial, y el pensamiento de lo imposible
Piensa que cuando se publicaron estos números Madureira todavía estaba dibujando historias de ocho páginas en el Marvel Comics Presents. Ni de coña hubiera merecido una portada de la Wizard, y ni de coña el pequeño Joe se hubiera atrevido a pasarse el día jugando a videojuegos en vez de dibujar. Esperate cinco años (o un par de semanas en tiempo-post) a que lleguemos a su etapa Cliffhanger, que es cuando tocan las risas con él
A esa última portada sólo le falta algo de Madureira para ser la imagen icónica de la impuntualidad y los plazos distendidos…
Piensa que cuando se publicaron estos números Madureira todavía estaba dibujando historias de ocho páginas en el Marvel Comics Presents. Ni de coña hubiera merecido una portada de la Wizard, y ni de coña el pequeño Joe se hubiera atrevido a pasarse el día jugando a videojuegos en vez de dibujar. Esperate cinco años (o un par de semanas en tiempo-post) a que lleguemos a su etapa Cliffhanger, que es cuando tocan las risas con él