
Forum Museum: ¡¡Reengánchate a Marvel!!

Una cosa que pasa con Panini, que a su vez es una continuación de lo que venía haciendo Planeta cuando tenía los derechos de los tebeos de Marvel, es que lo edita todo. Absolutamente todo. Una cantidad de cosas absurda, rocambolesca, de un completísmo que al mismo tiempo se agradece pero abruma. Mientras que en la Distinguida Competencia seguimos con etapas y épocas inéditas en castellano, o que no han pasado por las estanterías de una tienda en décadas, lo cierto es que Panini ha hecho un ímprobo esfuerzo por recopilar en distintos formatos, a cada cual más pesado, aparatoso, costoso o imprevisible, prácticamente toda la mitología marvelita. Y eso está bien. Pero no está tan bien a veces.
Por ejemplo, ahora Panini anuncia sus nuevos MARVEL ESSENTIALS que ellos mismos definen como “ una nueva línea de grandes éxitos en formato bolsillo”. Pero ves cuáles son esos grandes éxitos y cuesta un poco ilusionarse. ¿Vengadores Desunidos? Hace apenas dos años que salió en formato “Must Have” y antes de eso lo habíamos podido seguir en la serie regular o en el tomo Marvel Deluxe correspondiente. Cuatro ediciones en menos de 20 años. Pero qué me dices de Spiderman: Toda una vida, cuya naturaleza pensada para este tipo de recopilatorios ha hecho que en cuatro años este sea el tercer formato en el que se edita…sin contar con que el el formato 100% Marvel tiene dos ediciones, a precios diferentes.
¿Dinastía de M? Ya la hemos tenido en Marvel Deluxe, Marvel Must-Have (distintas ediciones, distintos precios) y el año pasado en Marvel Omnibus y el Marvel Multiverso. ¿Civil War? ¿El Viejo Logan? Podría seguir con esto un rato, pero el caso es que claramente la apuesta es interesante, pero los materiales corren el riesgo de convertirse en nuevas La Broma Asesina. Hace falta material nuevo, y desde esta desorganización quiero proponer a Panini que incluya una nueva línea de GENIALES! Éxitos en formato bolsillo”. Aquí algunas propuestas de material que, si bien no todo es inédito, sí que lleva mucho tiempo sin aparecer entre las novedades editoriales españolas:
Doom (2000)- Chuck Dixon & Leonardo Manco
Si hay algo que no se puede decir es que no sea apropiado ir calentando terreno editorial para Victor von Muerte, el acérrimo enemigo de los 4 Fantásticos y uno de los mejores personajes del Universo Marvel. En esta miniserie escrita con CHUCK! el dictador latveriano se encuentra en un universo postapocalíptico que presta homenaje a Mad Max y Blade Runner. Si bien el contenido puede parecer duro de vender, el dibujo de Leonardo Manco estila lo mejor de los 90 junto a los nuevos aires que comenzaban a soplar en Marvel. Si 4 números nos parece poco, tuvo una secuela en 2002 con el mismo equipo creativo: Doom: The Emperor Returns.
NYX (2003-2004) – Joe Quesada & Joshua Middleton & Rob Teranishi
Sinergia con los nuevos títulos mutantes, esta colección de tan solo 7 números comparte nombre con una de las cabeceras anunciadas por Marvel para el post-Krakoa, además de contar con la primera aparición de X-23, el personaje más adelante conocido en españa como Lobezna y que cuenta incluso con una aparición cinematográfica en imagen real en la película Logan. ¿Necesitamos más motivos? El guionista de NYX era nada más y nada menos que Joe Quesada, el que fuera el artífice del renacimiento Marvel a comienzos de siglo y uno de los editores de la colección entonces era… C.B.Cebuslki, el actual editor en jefe de la Casa de las Ideas.
Green Goblin (1995)- Tom DeFalco & Scott McDaniel
Desde lo insólito del lore arácnido de los 90 Phil Urich se convierte en el cuarto Duende Verde, un antihéroe de moral gris. Años después Phil fue rescatado por Dan Slott como una parte central en sus tramas sobre duendes. Un tebeo arácnido al que Panini todavía no ha sacado el jugo y en un formato autoconclusivo puramente noventero con el ilustre DeFalco a los guiones.
Ghost Riders: Heaven’s on Fire (2009-2010) – Jason Aaron & Roland Boschi
El Espíritu de la Venganza no es el personaje al que Panini le esté sacando más partido, por lo que hay donde elegir. Pero siguiendo con los principios editoriales de Marvel Essentials, nos quedamos con esta miniserie de 6 números que Panini lleva sin editar desde el 100% Marvel de 2011 que correspondía a la etapa de Aaron al frente del Motorista Fantasma.
Daredevil: Fall From Grace (1993) – D.G. Chichester & Scott McDaniel
La imprescindible etapa noventera de Daredevil, que por fin está obteniendo justicia y siendo reivindicada, permanece fuera del alcance de los cliente de Panini en España. Es el momento de remediar eso abriendo boca con este GENIAL! arco narrativo lleno de invitados de excepción: Marta Plateada, Venom, Morbius y, por supuesto, Elektra. A quien le preocupe que esta etapa desconocida no cuente con el beneplácito hipster solo hay que ponerle la portada del Prólogo de McDaniel.
Gambit (1997) – Howard Mackie & Klaus Janson
Vuelven los X-Men noventeros, vuelve la ilusión, y qué mejor personaje para aprovechar la ola que Gambito, el mutante cajún en una de sus aventuras en solitario como ladrón de objetos sagrados, luchando contra órdenes religiosas y seduciendo a una rubia desconocida. El renombre de los artistas que llevaron a cabo estos cuatro números debería hacer el resto.
Aquí hay material inédito, o al menos descatalogado, para aguantar por lo menos hasta septiembre. Para después del verano ya habrá dado tiempo a subir los precios, y entonces ya veremos.
[Viñeta de Wolverine 36 (2023)]
Entre los tiempos del hundimiento de Goldkey y el surgimiento de los hijos de Image existió una era inimaginable. Y en ella apareció Marvel Comic Presents, destinado a publicar el origen de Lobezno en una narración problemática. Sólo nosotros, adláteres, podemos narrar tal saga. ¡Dejame que os hable de aquellos días de MOLONIDAD!
Como bien relata el teórico Alan Moore en las apéndices de From Hell un siglo viene predeterminado por los sucesos de la última década del anterior. Así que no resulta extraño que la MOLONIDAD! y la GENIALIDAD! que reinarían imbatibles en los años 90 aparecieran por primera vez a finales de los 80. Aceptad la palabra de uno que sabe cuando os digo que en septiembre de 1988 algunos sabíamos que estábamos ante un evento especial.
Marvel apostaba por un formato semanal híbrido entre el tradicional comic book y la revista europea (¡claro que ya entonces se discutia apasionadamente de formatos, criaturas!) con cada número conteniendo tres historias cortas serializadas y una autoconclusiva. Y lo inauguraba con una segunda aventura en solitario de nuestro mutante feral canadiense preferido tras su primera miniserie que finalmente sirvió como preambulo a su propia serie regular. Sí, UNA sóla serie regular, que eran los locos LOCOS ochenta.
Porque si las historias cortas y complementos eran el tradicional medio de testear la valia de nuevos artistas, eso para lo que hoy existen los contratos basura y los becarios, MCP servía para probar nuevos conceptos y personajes en una versión ultracompacta de lo que habían sido las series limitadas del principio de la década. Y desde luego los más variopintos personajes desfilaron por sus páginas.
Por ejemplo Havok, al que aquí vemos en el episodio en que Lobezno aparece como estrella invitada.
O Spider-Man, a quien aquí vemos en el episodio en que Lobezno aparece como estrella invitada.
También Hulk, a quien aquí vemos en el episodio en que Lobezno aparece como estrella invitada ¿con acaso un metalinguístico texto de portada?
Sin embargo lo maravilloso de la fórmula del MCP era que su variedad anulaba toda posibilidad de aburrimiento. Si el actual serial principal de Lobezno no te gustaba…
…sólo había que tener un poco de paciencia porque en tres, a lo mucho seis números se iba a terminar…
…y seguro que el nuevo serial principal de Lobezno que comenzaba en el siguiente sí que te iba a gustar.
Pero si alguien se está llevando la impresión de que Lobezno era el único protagonista de MCP que sepa que nada más lejos de la realidad. De hecho su serial más recordado, el que más veces ha sido reeditado, no lo protagoniza Lobezno…
…sino Arma-X.
Y además no todo era Lobezno y amiguetes mutantes. No señor. Sus páginas fueron visitadas con asiduidad por el Motorista Fantasma.
Al que aquí vemos cuando sólo era un brillo en el ojo de Lobezno. Tan fijo se hizo el Espíritu de la Venganza que llegó a protagonizar portadas en las que NO aparecía Lobezno.
Y este un buen momento para abordar una maliciosa leyenda urbana, sin duda pergreñada por deceitas sediciosos, que dice que a estas alturas MCP tenía dos portadas para poder dedicar la otra al serial de Lobezno que tocaba sí o sí.
Y confirmar que no sólo es completamente cierta sino que en ocasiones hasta servía para homenajear a los dos míticos montajes de la original King Kong vs Godzilla. El oriental en que ganaba el reptil…
…y el occidental en que triunfaba el primate.
Pero tampoco hay que dejarse llevar por las apariencias…
…y pensar que tras su primer centenar de episodios el MCP había pasado de ser una serie dominada por Lobezno…
…a una dominada por Lobezno y el Motorista Fantasma. ¡En absoluto!
Eran más bien como una pareja liberal que podían tener aventuras ocasionales con otros personajes.
MUY liberal y nada partidaria de conceptos casposos y caducos como la exclusividad de terceros, todo sea dicho.
Llegados a este punto sería fácil concluir que MCP no era más que un rápido sacacuartos. Un producto de consumo intrascendente que recurría al renombre de dos personajes famosos para hacer pasar por caja a los aficionados completistas. Y no, amigos, no. Sus rutilantes nombres eran el cebo que los astutos editores ponien frente al incauto lector para que picara y comprara el cómic. Porque su verdadero objetivo era, como ya había hecho con Lobezno en sus primeros números, lanzar la carrera en solitario de prometedores personajes nacidos como secundarios en otras colecciones y listos para protagonizar sus propias aventuras. Y, como el mutante responsable de que Hugh Jackman tenga la hipoteca pagada, muchos son los heroes que dieron sus primeros pasos hacia el éxito, la fama y la inmortalidad en las páginas del MCP. Nombres que ahora nos cuesta creer que un día fueran prácticamente desconocidos como Slag de la Manada de Lobos…
…Osa Mayor…
…Cold Blood…
…Leir el Señor del Trueno (celta)
…Le Peregrine…
…y por último pero no menos importante, Wormwood.
Ahm… ¿Wormgod…? ¿Goodwood…? ¿¿¿Woodwood??? Bueno, el sátiro ese
Pero, ay, nada dura para siempre. Llegó un día en que Danny Ketch, nuestro bienamado Motorista Fantasma noventero, nos dejó. Pero bien dicen los Emprendedores™ que en chino el mismo ideograma que significa «crisis» también quiere decir «oportunidad» y su ausencia nos permitió descubrir a un nuevo personajes que exploraba innovadores conceptos y rompedoras narrativas.
Venganza.
Y así llegamos al MCP 155, que es un número histórico por dos motivos fundamentales. Estamos a mediados de 1994 y tras decenas y decenas de portadas y salvo por el paréntesis del crossover Asedio de Tinieblas…
…tenemos una no protagonizada por Lobezno… Y por si esto fuera poco… ¿estais sentados? Por si esto fuera poco ES EL ÚLTIMO MCP EN EL QUE APARECE LOBEZNO…
Sabia que no me ibais a creer así que aquí teneis las siguientes portadas.
¿Lo veis?
Tristemente sin Lobezno ni el Motorista Fantasma como puntales de carpa el MCP ya no tenia razón de ser. Duró dos decenas de titubeantes episodios antes de cerrar en el 175 apenas alcanzando la mitad de la década de los 90. Cualquier otra colección habría aprovechado para traerlos de vuelta una última vez a modo de despedida nostálgica pero el MCP, genio y figura, fiel a sus principios fundadores, concluyó su recorrido editorial tal y como había vivido…
…apostando por presentar personajes de prometedor futuro…
Una despedida agridulce del Marvel Comic Presents, lo más cerca que hemos llegado a estar…
…de esa serie del Capitán Ultra que no nos merecemos pero sí necesitamos…
Estos tiempos de facilidades para todo han desembocado en una generación que no conoce el concepto del esfuerzo. Es lo que tiene que os lo hayan puesto todo a huevo, que no teneis voluntad. En realidad no es culpa vuestra no haber podido crecer como nosotros, trabajando de limpiadores de chimeneas en la fábrica de asbestos (pero sólo hasta los 12 años, que mas mayores ya no cabíamos) y jugando a juegos de 8 bits en los que NO SE PODÍAN SALVAR LAS PARTIDAS. Sin ir más lejos habeis abandonado en masa Agentes de E.S.C.U.D.O. y echando pestes encima. Aparentemente la introducción del nuevo Motorista Fantasma no ha sido de vuestro agrado. Básicamente porque no es el Motorista detodalavida sino el nuevo-nuevo-nuevo Motorista y claro, no es lo mismo.
Primero sabed que sois una panda de racistas machistas homófobos raciales. Ojo que no lo digo yo, que lo dice Julian Clemente ¿eh? Unos intolerantes blancos heteronormativos a los que os manmolesta que se altere la uniformidad aria de vuestro mundo de fantasía. Aunque yo sospecho que a algunos lo que en realidad os pica que hayan adaptado al nuevo-nuevo-nuevo Motorista en lugar de a la nueva-nueva Motorista.
Que era una latina sexy escotada.
(Era la época en que por edicto superior toda mujer con mono de cuero debía llevar la cremallera bajada hasta el ombligo, Viuda Negra incluida. Esto sería impensable en la Marvel de ahora, claro, que está superconcienciada, pero era habitual en la de hace muchos, muchísimos años. Cinco, concretamente.)
El caso es que además estais cometiendo un error de principiante porque el N-N-N-MF de Agentes de E.S.C.U.D.O. …
NO es el mismo N-N-N-MF de los tebeos.
Si, vale, se llaman igual, tienen el mismo aspecto, los mismos poderes, el mismo origen y hasta la misma familia pero los separa una diferencia CRUCIAL. El N-N-N-MF que adorna vuestras estanterias debe su transformación a la perversa y (obviamente) fantasmal influencia del malvado poseedor anterior del coche.
Y en realidad ese personaje ya ha sido adaptado antes al cine.
Pero en fín, fué en aquella aciaga época anterior al Iron Man de Favreau en que en las películas los superheroes ni volaban ni hacían superhazañas y en lugar de vestir uniformes hacían chistes sobre spandex amarillo.
Pero la influencia infernal del N-N-N-MF de esta gloriosa Era Marvel de las Películas Basadas en Tebeos™ tiene un origen completamente distinto. Es el Motorista Fantasma.
El original.
No hombre, digo el original GENIAL!
Sí, amigos. El inimitable Nicholas Cage Fantasma. Siento haberos espoileado la shockeante revelación final de temporada pero vuestra carencia de fe me ha obligado a ello.
Y es que han pasado muchos años desde que el cinematográfico Johhny Blaze corría en llamas por las autopistas del medio este americano. Y, como se revelará en próximos episodios, le han pasado muchas cosas. Perdió sus poderes.
Pero a cambio ganó una escopeta de fuego infernal.
Ahhh, los 90, esos locos-locos años. Cualquier día los yanquis se lían, eligen a otro loco sociópata de presidente y vuelven otra vez.
Bueno, el caso es que durante esos años en que Blaze no era miembro activo de la Iglesia de Satán sino de la Asociación Nacional del Rifle seguía teniendo que desplazarse de un lado a otro. Y a falta de dos ruedas infernales que invocar, para desesperación de los fanes de los Satanases del Infierno recurrió a cuatro. Y ahí reside el nudo gordiano del estremecedor final de temporada de Agentes de E.S.C.U.D.O., en el momento en que Reyes se topa con un cabreadísimo Blaze…
…que viene a recuperar su coche.
Y es que los Dodge Charger infernales no crecen en los árboles ¿sabeis?
¡Y esperad que el Coche Infernal se encuentre con el Coche Bruja Transformada (con erótico resultado)!
Vaya, vaya, vaya… Así que habéis decidido acercaros por la cripta de los cómics en otro de estos días de Halloween. Qué valientes. Uno nunca sabe lo que puede encontarse por aquí… ni siquiera el resto del año. Así que imaginad mi sorpresa cuando os veo acercaros entre los libros polvorientos, los sospechosos restos pegajosos y las extrañas reliquias que componen el paisaje y paisanaje del mundillo para escuchar una historia en la que, ¿quién sabe?, quizá acabéis siendo los protagonistas.
NYA-HA-HA-HA-HA-HA!!!
¿Qué clase de historia de terror preferís escuchar hoy? ¿La del editor acusado de acoso al que mantenían en su puesto? ¿La de la creadora de una serie que tuvo una bronca por una portada? ¿O preferís que os enseñe cifras de ventas? JAJAJA. No, ni siquiera yo sería tan cruel como para mostraros cómo han caído los compradores de cómics en la última década. Tranquilos, aunque sea La Noche antes del Día de los Muertos hoy no vamos a hablar de El Jueves.
En su lugar parece que este año se nos ha quedado bueno para hablar un poco de personajes. Personajes para los disfraces de esas fiestas a los que la juventud de ahora acude, no como éramos jóvenes los demás y acudíamos a… no sé… ¿Ver Bahía de Sangre? ¿Llevar buñuelos a los cementerios? Al final es difícil decidir quién debe aprovechar mejor nuestro medio capitalista. Pero pensemos en esos pobres que estarán sufriendo con sus vestidos. Seguro que están pensando en usar alguna película de inspiración. En algo que infunda terror pero sea divertido en… Creo que ya sé qué libro puedo abrir para contaros una historia. Permitidme un momento… Sí… Aquí está…
El universo terrorífico de Marvel está ahí. No hay más que recordar el éxito de Blade como película y obviar el de Blade como serie de televisión. Si Ryan Reynolds puede elegir qué películas de superhéroes en las que aparece se le recuerdan nosotros no vamos a ser menos. Así que la tercera de Blade tampoco vamos a mencionarla. Pero sí que el Blade de los cómics salió de unos tebeos de Drácula que quizá no conozcáis porque en España no se han publicado suficientes veces en distintos formatos. O que ese mismo personaje formaría parte de los Nightstalkers, no confundir con los Darkstalkers ni con los Stalkers en general. El caso es que tuvieron incluso serie propia en los locos años noventa.
Ya, nunca hubierais adivinado que la serie era noventera. Lo sé. Es como intentar descubrir en qué década se rodó la película de Doctor Extraño. (De la que, por cierto, ya hemos hablado). Más difícil de lo que parece.
Por supuesto esto obedecía a que en los noventa los vampiros habían regresado por la puerta grande. Una frase que suele poder decirse al menos una vez cada dos décadas. Así que igual que la última vez el éxito de los vampiros se notó en Lobo en esta ocasión Marvel había hecho su enésimo intento de reconstruir un teórico universo sobrenatural terrorífico. Seguro que habéis notado el papiro con los números arriba. Es porque ese primer número era parte de un megacrossover de lanzamiento de varias colecciones. Sí, en serio.
La historia comenzaba en el Motorista Fantasma #28 y terminaba en el #31. No, ni el 29 ni el 30 formaban parte del crossover, ¿por qué lo preguntáis? Pero, vaya, a partir de ahí iban lanzando número uno como el que habéis visto antes o la nueva serie que le habían abierto a Motorista Fantasma, Ghost Rider & Blaze: Spirits of Vengance.
Sí, suena un poco al Mortadelo y Filemón, Agencia de Información de la Marvel, pero es que estaban improvisando un poco. Por supuesto también había un vampiro.
Sí, el otro de siempre. Pero seguro que notáis que falta una parte. Ya habéis visto que eran seis y sabéis dónde empieza y termina así que está claro que tenían intención de sacar cuatro números uno y sólo tenemos tres. ¿Quién nos falta? Pues ese es el asunto. Que no es un quién. Es un qué. La cuarta serie estaba dedicada a un libro. Sí. En serio. Un libro.
¿Os suena el Darkhold?
Darkhold, Darhold, Darkhold, Darkhold, He rides across the nation The thoroughbred of sin He got the application That you just sent in It needs evaluation So let the games begin A heinous crime, a show of force A murder would be nice of course, Darkhold, Darhold, Darkhold, Darkhold…
Me desvío. El caso es que este libro, Chthon y el resto de la panda irían apareciendo y desapareciendo por las páginas a principios de los noventa. Incluso cuando empezaran a cancelar títulos y se intentara sacar una suerte de antología llamada Midnight Sons.
Sí, en los noventa aún. Por supuesto luego llegaría Marvel Edge como sello escoba, pero mientras tanto tuvimos a estos dando vueltas. Pero si os estáis pensando si hay alguna cosa que sellos que no lleguen a los dos años de existencia creo que es el momento de que pasemos a nuestros invitados especiales. Porque hubo gente que no llegó ni a eso, quizá porque fueron creados a finales de los ochenta en lugar de a principios de los noventa. Ya ha llegado el momento de hablaros de la Night Shift.
Creados por Mark Gruenwald (Bueno, y Tom Morgan y Sal DeLaRosa) en su etapa de Capitán América, estamos ante un grupo realmente… peculiar.
Variopinto, incluso. Por supuesto lo más sencillo sería poneros por aquí sus fichas para que le echéis un ojo a los componentes. Que son unos cuantos.
Pero tampoco creo que necesitéis saber más que algunas cosas de ellos. Por ejemplo: Shroud no es The Hood y nadie podrá demostrar que Bendis se inspiró siquiera ligeramente, Dansen Macabre es otro ejemplo de striper barra supervillano, Gypsy Moth no tienen nada que ver con el Doctor Doom, Tick Tock no era ningún político, de hecho varios son repescas de cuando Spider-Woman, y luego Werewolf by Night estaba por allí por el pedigrí. Un grupo peculiar que lo mismo salía por esos títulos como se enfrentaba a Los Vengadores (Costa Este)
O al Caballero Luna.
En realidad no eran villanos sino un grupo de villanos a los que Shroud manipulaba para que hicieran buenas acciones. Un truco estupendo, ojalá lo hubieran repetido alguna vez. Por supuesto, con tantos personajes parecía obvio que la pregunta sería, ¿cuándo les darían serie nueva?
La respuesta es más esperable de lo que uno creería: Nunca. En serio, si buscas una serie con Night en su título podemos ofrecerte otras con mayor suerte incluso en su paso a lo audiovisual…
Pero a estos pobres no les tocaría un buen momento y aunque aparecieron en alguna historia más, incluso cambiando sus integrantes y apareciendo en mitad de un lío con el Darkhold y Sattanish en una historia que aprovechaba a otro personaje de esos que habían dado tantos tumbos que incluso había salido en los magazines de Curtis.
Ah, cierto. Curtis era un subsello de Marvel para sacar magazines en blanco y negro sin poner Marvel. Cosas suyas. El caso es que los sacaron de nuevo contra Los Vengadores (Costa Este)
En una historia con demonios, guiños en el título y el libro de marras. Pero ni por esas. Los pobres se quedaron sin serie, con muchos líos de quién estaba dentro y quién fuera -porque, claro, necesitaban a su Hombre Lobo en otro lado que en Marvel parece que no tuvieran suficientes nunca- y aunque este macro-arco se publicara en 1991 al año siguiente no les tocó reintegro. En serio, prefirieron darle un título al libro antes que a ellos. ¿Se puede ser más triste que eso? Quiero decir, teniendo en cuenta que luego se olvidarían y sólo volverían a sacarlos para matarlos como si fueran secundarios del pasado que usar para un truco fácil.
Más triste aún resulta cuando pensamos en la evolución de otos personajes que andaban por allí esos años. En Malibú Night Man -mira, otro Night con serie propia- no solo sería capaz de tener su propia cabecera
como parte fundamental del Ultraverso… y más allá…
también tendría los crossovers más esperables
y más noventeros
e incluso acabaría logrando una serie de televisión.
Mientras que en Epic estaría la Shadowline Saga, que tiene también mucho mérito no ya por los números que salieran…
como por lograr tirar de historias de Chichester para acabar dándoles su propia serie. Sí, porque por loco que os parezca ese personaje de ahí, que en aquel momento se llamaba Shreck y era un tipo de aspecto villanesco y verdoso que luchaba contra St. George. En realidad cuando menos os recuerde de Epic sospecho que más felices seréis. La cosa es que Marvel pensó que le podían cambiar el nombre y darle serie propia porque eso es lo que hacían con todos los personajes que no fueran Night Shift. Así que en 1992 -ya, seguro que notáis un patrón- se estrenó Terror Inc.
Una serie tan de su época que tuvo incluso la inevitable aparición invitada del de siempre.
No duraría mucho pero, por supuesto, llevaría a que lo recuperaran en 2007 para la línea MAX
y luego en 2009 para un especial
Hasta llegar a la actualidad, como uno de los mercenarios reunidos por MuertoPiscinas
A los que hacía vestirse como él.
Así que al final acabamos encontrándonos con que incluso los personajes, por terroríficos que sean, y por series que hayan protagonizado -o vayan a protagonizar, que al ritmo que va Marvel seguro que en unos meses está anunciándole también serie a este- puedes acabar en mitad de un marasmo de cosplay…
No ya porque parezca una época en la que es más fácil ser youtuber o cosplayer que autor (dibujante, guionista) en un evento comiquero, sino porque uno al final nunca sabe cuándo le va a tocar ir disfrazado de Lo Mismo que el Resto. Y, quien sabe, quizá si decides hacer un pequeño examen para ver si la persona está poniéndoselo con carnet o lo hace solo por diversión puedes encontrarte tras la máscara a un monstruo verde gigantesco. Así que mejor guárdate las ganas. O puede que acabes tan olvidado como Night Shift.
Y es que al final todo el mundo parece tener un lado oscuro. Todo. El. Mundo.
Así que ya sabéis, para esta noche diversión, respeto y cómics. Si no queréis acabar olvidados o… peor aún… ¡Parte de un Universo Televisivo! NYA-HA-HA-HA!!!
AVIV NEEWÖLLAH!!!