Cómo hacer de un buen tebeo un superventas

Nos encontramos en un momento extraño para el mercado, ya que para las editoriales se hace difícil encontrar el material y el formato que conjuguen comercialidad con reconocimiento. Antes de la normalización estaba claro: había que publicar grapas de superhéroes, cuantas más mejor. La situación sin embargo ha cambiado, el lector casual que se acerca de vez en cuando al tebeo se ha convertido en un segmento muy importante del mercado, y a este le tiran más las novelas gráficas, sea lo que sea eso, lo que abre el abanico de posibilidades a las editoriales avispadas que mejor envuelvan su producto. Así, a caballo entre Sant Jordi y el Saló, hasta los superhéroes más graperos visten sus mejores tapas duras de cara al público normalizado. Dos especiales de Lobezno se reconvierten en un tebeo de autor, con una de esas portadas difíciles de olvidar. Lo que quiera el gran público.

El que parece un valor seguro, con varios Premios Nacionales avalándolo, es el compromiso social y el drama humano: Arrugas, El Arte de Volar, el imperecedero Maus, Persepolis, las cosas de Joe Sacco…El que compra, luce y lee una novela gráfica quiere tener la sensación de estar haciendo algo trascendente. Y es por esto por lo que el tebeo de siempre debe reconvertirse en algo ligero pero en apariencia muy seriote para ser consumido por las masas. Tampoco estamos inventando la pólvora contando esto, mirad lo bien que le va a Dan Brown.

Y estando en esta situación nos encontramos con este tebeo, que para lo vendidos que solemos ser todavía lo hemos publicitado poco:

Y eso que contiene algún que otro mensaje con el que en esta nuestra/vuestra desorganización no comulgamos:

El Velo.  Precedido por éxito de crítica en los EEUU. Uno de los pocos tebeos reseñados el pasado 2009 por la gafapástica publicación The New Yorker. Tapa dura. Editorial Dibbuks. En teoría todo un caballo ganador para ese lector de paso con ganas de presumir de Novela Gráfica ¿no? pues tiene un problema. Se trata de un tebeo de miedo. De terror, una obra de género.  No se trata de Alta Cultura, sino de entretenimiento, algo que puede que a ese público casual con ganas de compromiso y trascendencia no le termine de convencer (de puertas para fuera, por supuesto, que todos sabemos lo que la gente va luciendo por ahí y lo que luego de verdad lee cuando llega a casa ¿verdaad?). Es posible que con el público habitual de las librerías, ese que ha hecho que alguien como Steve Niles sea un nombre rentable, la obra se venda bien (aunque entonces puede darse la paradoja de que una reseña en el New Yorker sea menos importante que en la Dolmen), pero eso para alguien como el editor Ricardo Esteban no basta. Si le bastase con eso publicaría con Planeta. O  Interfaces costaría la mitad. Lo que se busca ante todo es reconocimiento, llegar a esa otra gente que habitualmente no se fija en el tebeo, que se aplauda el arrojo de tocar un tema sensible. Tenemos pues que emplatar nuestro producto para hacerlo parecer más apetitoso. Pero la tirada ya está impresa y salvo inmenso error (y a veces ni siquiera con eso) no se va a repetir ¿qué podemos hacer entonces? pues añadirle una solapa.

Junto a la pegatina en portada, la solapa es el comodín que sirve para destacar aspectos de la obra de manera que entre por los ojos, para actualizar el listado de Premios que el título va ganando, alguna reseña mediática reciente…todo lo que pueda ayudar. Y miren si cambia la cosa, miren, como de un simple tebeo popular…
 

…conseguimos hacer una Novela Gráfica trascendente gracias a una oportuna solapa bien colocada:

 

Ni punto de comparación. Ahora se pueden oler las hordas de comprometidos compradores dispuestos a gastarse los dineros en un tema de actualidad (y es que el terror nunca pasa de moda). Puede tener tanto éxito que les puede pasar como a los pobrecitos de Planeta, que no han tenido otro remedio que comunicar que

lo que significa que despedíos de encontrar estas obras en el stand del Saló de Planeta ¿no? ¿¿no?? ¿¿¿no??? vaya, después de racionar los pocos que tienen con las librerías no debe quedarles para ellos ¿ no ?

Y eso que se hicieron los pedidos con antelación. Señal de que es posible morir de éxito. Hasta sin solapas ni temas de actualidad.