El premio, la clave siempre está en el premio, claro. La gente cree que es un regalo, pero en realidad es un cebo. Un cebo para que conozcas a quien lo da, un cebo para que le entregues sus datos, un cebo para encontrarte y atarte en las tiniebl convencerte de que adquieras el producto que ellos desean.
El problema, por supuesto, es que el concepto de qué es un premio que merezca la pena ganar cambia con los años,y las sociedades.¿Qué le ofreces a un Milennial para que compre tus productos?
¿Un coche?

No, hay un estudio sesudo encargado por alguien que no debes preguntar que dice que:

¿Un apartamento en Torrevieja?

No. ¿Quien quiere un apartamento en la costa cuando puedes ir en vuelo barato al país donde ha emigrado tu primo?
¿Tecnología?

No amigos, las viejas reglas ya no valen en el nuevo mundo en el que nos movemos. Y aquel que quiera utilizar un premio como reclamo deberá ser atrevido, innovador y conocer a la perfección qué es lo que más quieren sus clientes.
Como es el caso de Dolmen Editorial, quienes han comprendido que vivimos en la era de la hiperconexión y que por lo tanto lo que más motiva a los jóvenes de hoy es en día es obtener….¡¡¡INFORMASIÓN!!

…perdón, quería decir: INFORMASIÓN….

A ver si a la tercera: IN-FOR-MA-SIÓN

Bueno, para el caso es lo mismo. El caso es que en Dolmen han decidido regalar este premio:

Y nosotros ante esto no podemos más que levantarnos y aplaudir fuerte, al menos hasta que el archivo se desclasifique en el blog de Vicente dentro de dos años, porque nos gusta la gente que ha entendido que vivimos en la sociedad de la INFORMASIÓN

Mejor lo dejamos aquí…
¡Y vosotros ¡dejadme en paz!! ¡¡Yo no soy un número, soy un hombre libre!!

¿Qué libro sobre el Spectrum? ¿Ése en dos tomos o el del dibujante aquél? Tanta perífrasis o circunloquio no hace sino aumentar el suspense; ríase usted del TPB misterioso que saca Marvel este año.
Per4o, venga, necesitamos más información; ¿quién ganó?
Próximo premio: ¡una apasionante caja de cartón!