Damas y caballeros… aficionados… AMIGOS… Qué mejor marco que este, el incomparable de la Comic Con de San Diego, para anunciar al próximo responsable de la división DC de Warner Bros Discovery.

Mientras espera a ser anunciado desde las bambalinas un estrecho hueco del atrezzo permite al Hombre del Norte vislumbrar al público. Un accidental ventanuco que muestra un mar de asistentes. Un aleatorio muestreo de rostros silenciosos y espectantes, pendientes de cada palabra que sale de la boca de un Zaslav que intenta parecer cercano y amigable. Un fan más.
Y fracasa espectacularmente.
Ha sido una larga búsqueda. Tenía que serlo. No cualquiera es dignQUIERO DECIR apto de llevar las riendas del primer universo superheroico de la historia. El primero, le pese a quien le pese.
Larga en verdad, piensa el Hombre del Norte sin poder contener una sonrisa. Mucho más que lo que cualquiera de los presentes puede imaginar. Una singladura que le ha llevado décadas.
Como escribió el Bardo, muchos fueron los llamados pero pocos los elegidos. Sólo buscando exhaustivamente hemos podido encontrar al candidato perfecto para llevar al DCEU a las cotas de excelencia que se merece. Hemos considerado a creadores y ejecutivos de talento excepcional, pero necesitábamos a uno de talento irrepetible. Permitidme que aproveche la ocasión para desmentir esos absurdos, ABSURDOS rumores de que le ofrecieramos el cargo a Ezra Miller. ¿Quién podría creerse algo tan ESTÚPIDO? JA JA JA ja ja j… j…
Durante un instante vacuo pero interminable como un arco argumental de Hickman el silencio de la audiencia cambia de tono de espectante a incomodo. Tiempo suficiente para que el Hombre del Norte recuerde el principio.
Fue la época más dificil. Tuvo que semirretirarse de la vida profesional para planificar y llevar a cabo su estrategia, pero no tanto como para ser olvidado. Su fórum fué crucial. Sin la existencia de internet no habría podido llegar hasta aquí. Le permitió vender dibujos comisionados a una escala inconcebible en los tiempos en que las convenciones de cómics eran el único mercado posible. Y obtener el dinero necesario para ir comprando acciones de la Warner. Las justas para no llamar la atención pero poder influir en decisiones cruciales que desviaran los acontecimientos en su provecho. Colocar al guionista adecuado, al director necesario, al actor requerido. Décadas de paciente manipulación ferroviaria activando cambios de via inofensivos en sí mismos pero que en conjunto, a largo plaz,o habían logrado hacer descarrilar catastróficamente el aparentemente imparable tren del DCEU.
No todo le había salido bien, claro. Sigue recordando con el amargo sabor del fracaso el no haber logrado encargar la dirección de las películas de Wonder Woman a Olivia Wilde pero el resultado final no fué del todo insatisfactorio gracias en parte a uno de sus mejores peones involuntarios: Snyder. César no podría recordar su conquista de las Galias con el orgullo con que el Hombre del Norte recuerda cómo lanzó a correr la imparable bola de nieve del #ReleaseTheSnyderCut. Otro movimiento que hubiera sido imposible sin su foro y sus sucesivos círculos de poder internos.
Y ya sin más dilación voy a presentaros al elegido. No, no me refiero a Neo, JA JA Ja ja j…
Lustros que han parecido eones moviendo los hilos desde las sombras. Como de la que está a punto de salir para gozar por fin de la luz del escenario. Largos e interminables años de soportar en silencio el desprecio de su antiguamente adorador público. Criticando sus desproporcionados dibujos. Sus resoluciones gráficas necesariamente tramposas dado que tenía que repartir su tiempo entre ganar dinero y sacar adelante sus planes.
El máximo responsable del DCEU a partir de hoy.
Para llegar hasta aquí. Para poder llevar a cabo su VENGANZA contra quienes le traicionaron e hirieron en el mundillo.
Que fueron TODOS.
Amigos, con vosotros…
Con montecrístico placer, pudiendo ya saborear las crueles y refinadas maneras en que va a hacer pagar a sus enemigos todas y cada una de sus ofensas, el Hombre del Norte finalmente sale la la luz.
…JOHN BYRNE.

Un silencio todavía más intenso se apodera la sala de actividades como una espesa y opresiva inundación de melaza. Es tan absoluto e impenetrable como la oscuridad del fondo de los oceanos. Tan imponderable que el Hombre del Norte tarda unos segundos en darse cuenta de que no se debe a la sorpresa ni al anonadamiento.
Y lo hace apenas un instante antes de que un joven de Wyoming cosplayeado de Cyborg logre alzar su temblorosa voz lo justo como para decir…
-¿John QUIÉN…?