Rage Against the Bisbal

Recién eran Navidades cuando comenzaban las Bibliotecas Marvel y en menos de medio año ya estamos por 1964, es un no parar.

Que como se editan clásicos en tantísimos formatos, algo había que hacer para potenciar este, y la estrategia no ha sido otra que hacerlos asequibles…en comparación con todo lo demás que publican. Estrategia en la que ECC acaba de apoyarles.

La cuestión es que por primera vez en nuestro país estamos asistiendo a la publicación en paralelo y en condiciones de todo el cogollo del universo compartido. En color, en buen tamaño, con un número de páginas manejable y saliendo los títulos de manera escalonada y coordinada. Quien los descubra ahora así se lo estará pasando bomba con Kirby, Ditko, Wood…y se relamerá sabiendo que están por llegar Colan, Romita, Buscema… Cada uno en su momento y en su lugar, lo que nos permite saborear cada época teniendo el cuenta el contexto en el que aparecían aquellas obras.

Y luego está el Hombre Máquina.

Un título clásico que comenzó siendo realizado por Jack Kirby y que en su segunda mitad contó con el arte de Steve Ditko. Aquello tuvo que ser lo más y venderse como churros ¿no?

Pues las verdad, no. No mucho.

De hecho, por regla general, tened por seguro que si algo sale en lo de la Super Distribuidora Limited Edition, comercial lo que se dice comercial no debe ser demasiado, aunque siga encontrando un nicho de mercado que lo vaya comprando. Si es más comercial lo saca directamente Panini, así que haceos una idea:

¿Cómo es que no triunfó el Hombre Máquina, por qué no llegó a las cotas de los 4F o Spiderman? pues porque se trata de material que comenzó a salir en 1978-1979.

Sí, que normalmente les vemos y pensamos en señores con sombrero y en años sesenta. Y ya sabemos todos que el arte de Kirby es intemporal y eterno, y que la dinámica de Ditko es imbatible, y que…pero es que la serie tuvo un cruce con la de la Masa, y entonces uno se da cuenta de que Kirby estaba dibujando esto al mismo tiempo que Sal Buscema se estaba saliendo con el bruto esmeralda.

Contemporaneos. Pueden disfrutarse de manera aislada, pero cuando te publican lo de alrededor es imposible no fijarse.

Tuvo que llegar Herb Trimpe para hacerlo molón y ochentero.

Cuando ya en los ochenta había una mínima coordinación entre los títulos, tampoco demasiada, ya nos chirriaba Speedball.

Pues algo parecido puede ocurrir, y está bien avisarlo ahora. En tiempos de Vertice coexistian los sesenta y los setenta en las diferentes publicaciones, aparte de que siempre era una lotería qué ejemplares de qué y de cuándo podías encontrar en el quiosco, pero el publico era conocedor de aquello y metía cada cosa en su compartimento mental estanco sin relacionarlo con lo demás. Pero ahora te lo coordinan todo y puede llegar haber algún que otro choque. Avisados quedais, que a este ritmo los setenta no está tan lejos.

Por cierto que este mes también sale esto:

Que a veces no sé lo último que llegará, una película con Indy o una miniserie con Claremont. Y del título no digáis nada, que os conozco.

Trinos de noviembre, segundo mes de la Era Musk

Piando en agosto

Viñetas cuadradas recortadas

Un total de cero unidades de copias de prensa fueron empleadas para hacer estos instagrameos

Lecturas y relecturas con filtros de Instagram

Si estás leyendo esto es que, una vez más, los alegres muchachos de ADLO! no han podido entregar nada legible en fecha y os toca tragaros un posteo de relleno aleatorio. ¡Es imposible llegar a dieciocho años de actualización diaria sin usar uno o dos trucos sucios!

Instagrameos de primavera

Hoy estoy liao, así que ¡reposiciones!

No es el fin del mundo, solo son los 90

En ADLO! se lleva anunciando un nuevo advenimiento de los 90 casi desde antes de que se hubieran terminado los susodichos. Esta mentalidad pionera que ha definido a esta (des)organización ya ha demostrado su solvencia en la previsión de las tendencias, como cuando hablaba de una normalización que es ya una realidad tan tangible que ni siquiera hace falta hablar de ella. Y, por supuesto, los 90 han vuelto para quedarse. Para quedarse una temporada.

Hay quien puede achacar esto a la tendencia natural de la vida cíclica de la cultura pop, mientras que otros presentarán este regreso como una suerte de síntoma fatal de la enfermedad terminal que va a destruir el cómic de superhéroes. La realidad es, por supuesto, más compleja, rica e interesante. No se puede negar que atravesamos un momento de pobreza de ideas que, especialmente Marvel, se resuelve con nostalgia y miradas al pasado. DC, siempre a rebufo en estas cuestiones, está todavía agotando los últimos estertores de los eventos sin sentido y las muertes de personajes que a nadie le importan. No obstante, la situación raquítica de las ideas originales no es nueva, y lleva acosando a la industria de los señores en pijama desde, por lo menos, veinte años, sin que nadie se dé por enterado.

Por otra parte, aunque todo esto ha pasado y por supuesto, volverá a pasar, los 90 no son una década cualquiera, sino una etapa particularmente central, taquiónica y singular en la historia del medio, y su regreso también es atípico y especial. Sí, habrá quien piense que no tiene mucho mérito que haya vuelto DeMatteis a Spiderman a recuperar ideas de su época con Ben Reilly si en los 90 ya tuvimos a Conway reciclando ideas y propuestas de los 70.

Habrá quien no encuentre tanta diferencia entre que Michelinie vuelva a hacerse cargo de una cabecera de Veneno, Protector Letal si ya a comienzos de siglo tuvimos a Claremont volviendo a los mutantes durante varios años en cabeceras como X-Treme X-Men o Excalibur.

Sin embargo, aquí la diferencia es que mientras aquellas experiencias se basaban en la renovación apoyada la solvencia de autores reputados y bien considerados, aquí hablamos de cómics que apelan directamente a una vuelva a las esencias, siendo además unas esencias que no gozan de la misma buena fama con la que contaban aquellas otras. Se está recuperando un modelo, una imagen e incluso un envoltorio que no solo no goza del prestigio unánime, sino que además ha sido injustamente vilipendiado durante dos décadas por parte del propio establishment de la editorial.

Más cosas que son nuevas pero son viejas, una editorial de superhéroes lanzando una cabecera basada en una popular adaptación audiovisual de sus personajes, pero ya caduca y fuera de la actualidad. No, no hablo de X-Men 92, sino de Batman 66.

¿Quieren decir estas diferencias que estamos, efectivamente, ante una crisis sin precedentes para el medio? Bueno, ya sabemos que en neoliberal crisis también significa oportunidad, e igual que los 90, con sus bancarrotas, supusieron una revolución en el mundo del cómic mainstream cuyas consecuencias positivas todavía podemos disfrutar, esta nueva crisis quizá nos traiga nuevas maravillas que ahora no podemos apenas intuir. Y siempre podemos pensar, con tranquilidad, sosiego y (¿por qué no?) una pizca de malicia, que en años venideros, y por pura inercia, llegará la nostalgia de los tiempos de Joe Quesada. Si Jason Aaron ha dejado algún evento sin remake.

Fe de errores: al publicar el post decía que la serie de Batman ’66 la había escrito Kevin Smith, pero el comité de garantías de ADLO! informa de que no es correcto. Smith escribía la serie de Green Hornet, y sí que guionizó el cruce entre ambas colecciones. The Moore You Know.

Los directos del agente Macho

Una de las cosas que más le gusta a David Macho es ir de salones. Pero como por algún extraño motivo estos últimos meses se los han ido cancelando todos ha tenido que buscarse una afición alternativa, y ahora se dedica a ir tirando de agenda y dar la chapa un par de horas cada tarde a uno o dos amigotes

Uno de los primeros a los que llamó fue a un amigo suyo llamado Dan, que por circunstancias laborales de pronto se encontraba con bastante tiempo libre entre las manos

Jimmy y Amanda son un matrimonio encantador. La bandera de los Estados Unidos que tienen detrás viene con sorpresa

Cuando llamas a alguien que no domina del todo la tecnología como el abuelo Chris te arriesgas a pasarte dos horas hablando con los pelos de su nariz

Mark es un viejo zorro, y usa el truco de «llámame dentro de un rato, digo que eres el señor Netflix y así puedo cortar el Youtube sin quedar mal»

En la videollamada de Brian Michael escucharéis cómo los diálogos se repiten, se repiten, se repiten…

Este día David llamó a David y a David, con confusos aunque cómicos resultados

¿Qué pasa si juntas a dos adláteres de la vieja escuela con un ganador de un merecidísimo premio ADLO!? Que consigues un vídeo hipnótico que no podrás dejar de mirar

Y si todas estas horas de vídeo os han parecido pocas, metéos directamente al canal de Youtube donde tenéis un porrón de charlas más. Seguramente las encontreis menos interesantes que las de mi selección pero los pobres Marv Wolfman, Mark Waid, Bill Sienkiewicz, Kurt Busiek, Jim Starlin, Dave Gibbons o Garth Ennis también se merecen un poquito de atención aunque ya estén mayores y solo cuenten batallitas

Quien Benemérita te Hará Llorar

Amigos, vivimos tiempos complicados. Nuestros derechos, nuestras libertades ¡nuestras misma PATRIA! se ven amenazados por una élite que se aferra a un poder obtenido por un mero capricho matmático. Que a fin de retenerlo es capaz de aliarse con criminales, nada extraño si se considera que algunos de sus más destacados miembros son hijos de terroristas asesinos.

Que presumen de ser una nueva generación que no tiene nada que ver con las viejas castas pero día a día demuestran los mismos tics autoritarios de siempre.

Que pretenden tener conocimientos y habilidades superiores gracias a la excelente educación que dicen haber recibido y cuyos títulos exhiben orgullosos pero todo su tinglado educativo apesta a mafia endogámica.

Que afirman querer salvarnos y luchar por nuestro bien pero sus intervenciones no traen más que destrucción y pobreza.

Compañeros, españoles, sé que la situación parece desesperada. Sobre todo cuando hordas de inconscientes jóvenes les vitorean y les aupan. Ciegos por pura necedad o quizá directamente por antiespañola maldad, a su nefanda malevolencia. Parece que la única e inevitable salida sea un lamentable confilcto civil que ninguno queremos y cuarenta años de paz que no deseamos.

Pero hay un atisbo de luz salvadora. Una rayo de esperanza cuyo color, nada causalmente, es el verde.

Nuestra querida y nunca lo suficientemente ponderada Guardia Civil. Ese benemérito cuerpo y fuerza de seguridad del estado. Esos ángeles guardianes que vuelan en parejas en sempiterna vigilancia siempre dispuestos a darlo TODO POR LA PATRIA.

Si, queridos compatriotas, en estos dias de zozobra y peligro podemos confiar en la Guardia Civil…

…para pararle los pies de una vez por todas a esos malnacidos mutantes.

Tuiteos de diciembre

Buf, 2019… ¿os acordáis de 2019? ¡Qué nostalgia!