El que el artista que tomó el relevo en Flash a Francis Manapul no fuera otro que Brett Booth era algo de lo que teníamos que terminar hablando aquí, era cuestión de que se presentase el momento adecuado. Y el momento adecuado es ahora.
Y ese momento es ahora por la impopular tendencia a cargar de tintes sexistas lo que debería ser igualdad y libertad, a hipererotizar la imagen femenina en las historietas; a, en definitiva, lo que en lenguaje técnico anglosajon viene a llamarse cosification.
La cosification en el mainstream comenzó con Marc Silvestri.
Recuerdo perfectamente aquella tarde en un bar abriendo el tebeo de la Patrulla-X, y los que sabían de aquello definiendo de manera perfecta el sensual arqueo de la espalda de Pícara.
«Postura frijol«.
Curvada como una judía, pecho p’alante y hombros hacia atrás, sutil y sugerente sin llegar a escandalizar. Aunque Silvestri coló más frijoles en aquel episodio; pensándolo bien, no es extraño que esa historia, la que pelean contra Juggernaut en Edimburgo y hay un tren a punto de descarrilar, sea todavía mi escena favorita de toda la serie. No hay que fiarse de la aparente inocencia de un frijol.
La historia siguiente es bien conocida, con los frijoles en boga y los artistas hot haciendo su agosto con ellos, hasta que el bueno de ROB! llevó la postura más allá de lo posible, hasta donde ninguna espalda se había arqueado jamás. Cautivo y desarmado el ejercito frijolero, el combate de la hipersexualización había terminado. Siguió habiendo cosification, desde luego, pero nada volvió nunca a ser lo mismo.
Siglo XXI. Ya no hay bares, han sido todos reemplazados por panaderías-bollerías donde también sirven cafés cortados y medios bocadillos vegetales con pavo. Tampoco llevamos tebeos a esos sitios. Y la cosification está mal vista. Ahora la tendencia se ha invertido y heroinas con uniformes más discretos y evidentes reducciones pectorales copan las atenciones de las editoriales grandes, deseosas no tanto de remontar ventas sino de tener buena prensa, de ser mediáticas. Hoy día la idea de un grupo de héroes comandados por la Chica Ardilla, un concepto que años atrás era el perfecto objeto para hacer una chanza de inocentada…
…hoy suena perfectamente plausible.
Bienvenidos a la era de la decosification.
Y un evento que terminarán reconociendo los Libros de esta época será la contribución de Brett Booth.
Artista que sin haber despuntado en ninguno de los muchos títulos en los que ha colaborado para Image, DC, Wildstorm y Marvel, sí es poseedor de un estilo característico e inconfundible. Y siendo fiel al mismo, supo decodificar los patrones de las nuevas tendencias y destiló la imagen que derrumbó el mito fálico del macho empoderado…
…dibujando al primer tipo con postura frijol. Porque en eso, en eso consiste la verdadera igualdad en los comics, en la cosification mutua.