Desde aquí repartimos ideas y conceptos para la manipulación creativa y el abuso cultural. Somos el diario de lo genial, y el pensamiento de lo imposible
Desde hace cosa de un mes, mucha gente en este planeta tiene la sensación de estar viviendo una distopía. Y todo por causa de este hombre ¿o no habéis leído todavía el editorial de Clemente del número 12 de Marvel Age? ¡es gratis!
Algunos malpensados han querido ver en el diseño de la fotografía una pulla con las puntas de la M como si fueran cuernos o un capirote de burro. Yo lo que veo sin embargo son…
…orejitas ¿no es kawai?
Donald Trump lleva mucho tiempo en el ojo de la farándula, y desde luego no es nada ajeno a aparecer en cómics, aunque esto es algo que merece ser tratado en profundidad más adelante. En los últimos tiempos al estar más expuesto mediáticamente ha sido carne de bastantes parodias, algunas de las cuales las empresas editoras deben de estar comenzando a arrepentirse (al contrario que aquella Casa que tuvo la Idea de donar un milloncito de dólares en su campaña).
(lo que cambian las cosas en un año ¿no?)
Trump es un personaje de los que inspiran. Y la para algunos inesperada ascensión política ha servido de musa para un autor patrio. Nada más saberse la victoria del magnate, el inquieto Pablo Ríos (Azul y Pálido, Fútbol, El Portero…) tuvo a bien compartir con sus amigos en una conocida red social algunos bocetos que iba realizando en tiempo real.
Pablo Ríos, además de ingenioso autor y estudioso del medio, es seguidor demostrable de esta página desde sus lejanos inicios. De manera que justo es que nos hagamos eco de esta creación espontánea.
Lo que pasa es que cuando el torrente creativo se desborda y se convierte en un caudaloso río, la riada puede arrastrar todo a su paso.
De manera que estos bocetos han sido el embrión de una nueva criatura. Y quién ha conseguido canalizar toda esta energía hidraúlica ha sido la gente de Sapristi, que con gran sentido de la oportunidad van a publicar en un tiempo record lo que si hay justicia será uno de los superventas de estas Navidades.
¿Vas a encontrar un regalo de amigo invisible más acertado por menos?
¿o serás capaz de esperar a que Paul Rivers lo publique en USA, que se convierta en un superventas y comprar aquí meses después una versión traducida por el doble que ahora?
Quedan doce días para Navidad. Pídelo en tu librería. Uno, o varios, o los que te hagan falta. Os va a solucionar muchos compromisos. Si no lo regaláis vosotros, algún otro lo regalará y quedaréis fatal. Por lo que cuesta, no merece la pena dejarlo pasar de lado y arriesgarse a fracasar.
Queda poco. Estad preparados. Paz, Amor y Presidente Trump.
Esta es mi recomendación para Navidad. Luego ya llegará el Año Nuevo y nos meteremos en un nuevo terreno, Extremo y excitante.
Vaya, vaya, vaya… Así que habéis decidido acercaros por la cripta de los cómics en otro de estos días de Halloween. Qué valientes. Uno nunca sabe lo que puede encontarse por aquí… ni siquiera el resto del año. Así que imaginad mi sorpresa cuando os veo acercaros entre los libros polvorientos, los sospechosos restos pegajosos y las extrañas reliquias que componen el paisaje y paisanaje del mundillo para escuchar una historia en la que, ¿quién sabe?, quizá acabéis siendo los protagonistas.
NYA-HA-HA-HA-HA-HA!!!
¿Qué clase de historia de terror preferís escuchar hoy? ¿La del editor acusado de acoso al que mantenían en su puesto? ¿La de la creadora de una serie que tuvo una bronca por una portada? ¿O preferís que os enseñe cifras de ventas? JAJAJA. No, ni siquiera yo sería tan cruel como para mostraros cómo han caído los compradores de cómics en la última década. Tranquilos, aunque sea La Noche antes del Día de los Muertos hoy no vamos a hablar de El Jueves.
En su lugar parece que este año se nos ha quedado bueno para hablar un poco de personajes. Personajes para los disfraces de esas fiestas a los que la juventud de ahora acude, no como éramos jóvenes los demás y acudíamos a… no sé… ¿Ver Bahía de Sangre? ¿Llevar buñuelos a los cementerios? Al final es difícil decidir quién debe aprovechar mejor nuestro medio capitalista. Pero pensemos en esos pobres que estarán sufriendo con sus vestidos. Seguro que están pensando en usar alguna película de inspiración. En algo que infunda terror pero sea divertido en… Creo que ya sé qué libro puedo abrir para contaros una historia. Permitidme un momento… Sí… Aquí está…
El universo terrorífico de Marvel está ahí. No hay más que recordar el éxito de Blade como película y obviar el de Blade como serie de televisión. Si Ryan Reynolds puede elegir qué películas de superhéroes en las que aparece se le recuerdan nosotros no vamos a ser menos. Así que la tercera de Blade tampoco vamos a mencionarla. Pero sí que el Blade de los cómics salió de unos tebeos de Drácula que quizá no conozcáis porque en España no se han publicado suficientes veces en distintos formatos. O que ese mismo personaje formaría parte de los Nightstalkers, no confundir con los Darkstalkers ni con los Stalkers en general. El caso es que tuvieron incluso serie propia en los locos años noventa.
Ya, nunca hubierais adivinado que la serie era noventera. Lo sé. Es como intentar descubrir en qué década se rodó la película de Doctor Extraño. (De la que, por cierto, ya hemos hablado). Más difícil de lo que parece.
Por supuesto esto obedecía a que en los noventa los vampiros habían regresado por la puerta grande. Una frase que suele poder decirse al menos una vez cada dos décadas. Así que igual que la última vez el éxito de los vampiros se notó en Lobo en esta ocasión Marvel había hecho su enésimo intento de reconstruir un teórico universo sobrenatural terrorífico. Seguro que habéis notado el papiro con los números arriba. Es porque ese primer número era parte de un megacrossover de lanzamiento de varias colecciones. Sí, en serio.
La historia comenzaba en el Motorista Fantasma #28 y terminaba en el #31. No, ni el 29 ni el 30 formaban parte del crossover, ¿por qué lo preguntáis? Pero, vaya, a partir de ahí iban lanzando número uno como el que habéis visto antes o la nueva serie que le habían abierto a Motorista Fantasma, Ghost Rider & Blaze: Spirits of Vengance.
Sí, suena un poco al Mortadelo y Filemón, Agencia de Informaciónde la Marvel, pero es que estaban improvisando un poco. Por supuesto también había un vampiro.
Sí, el otro de siempre. Pero seguro que notáis que falta una parte. Ya habéis visto que eran seis y sabéis dónde empieza y termina así que está claro que tenían intención de sacar cuatro números uno y sólo tenemos tres. ¿Quién nos falta? Pues ese es el asunto. Que no es un quién. Es un qué. La cuarta serie estaba dedicada a un libro. Sí. En serio. Un libro.
¿Os suena el Darkhold?
Darkhold, Darhold, Darkhold, Darkhold, He rides across the nation The thoroughbred of sin He got the application That you just sent in It needs evaluation So let the games begin A heinous crime, a show of force A murder would be nice of course, Darkhold, Darhold, Darkhold, Darkhold…
Me desvío. El caso es que este libro, Chthon y el resto de la panda irían apareciendo y desapareciendo por las páginas a principios de los noventa. Incluso cuando empezaran a cancelar títulos y se intentara sacar una suerte de antología llamada Midnight Sons.
Sí, en los noventa aún. Por supuesto luego llegaría Marvel Edge como sello escoba, pero mientras tanto tuvimos a estos dando vueltas. Pero si os estáis pensando si hay alguna cosa que sellos que no lleguen a los dos años de existencia creo que es el momento de que pasemos a nuestros invitados especiales. Porque hubo gente que no llegó ni a eso, quizá porque fueron creados a finales de los ochenta en lugar de a principios de los noventa. Ya ha llegado el momento de hablaros de la Night Shift.
Creados por Mark Gruenwald (Bueno, y Tom Morgan y Sal DeLaRosa) en su etapa de Capitán América, estamos ante un grupo realmente… peculiar.
Pero tampoco creo que necesitéis saber más que algunas cosas de ellos. Por ejemplo: Shroud no es The Hood y nadie podrá demostrar que Bendis se inspiró siquiera ligeramente, Dansen Macabre es otro ejemplo de striper barra supervillano, Gypsy Moth no tienen nada que ver con el Doctor Doom, Tick Tock no era ningún político, de hecho varios son repescas de cuando Spider-Woman, y luego Werewolf by Night estaba por allí por el pedigrí. Un grupo peculiar que lo mismo salía por esos títulos como se enfrentaba a Los Vengadores (Costa Este)
O al Caballero Luna.
En realidad no eran villanos sino un grupo de villanos a los que Shroud manipulaba para que hicieran buenas acciones. Un truco estupendo, ojalá lo hubieran repetido alguna vez. Por supuesto, con tantos personajes parecía obvio que la pregunta sería, ¿cuándo les darían serie nueva?
La respuesta es más esperable de lo que uno creería: Nunca. En serio, si buscas una serie con Night en su título podemos ofrecerte otras con mayor suerte incluso en su paso a lo audiovisual…
Pero a estos pobres no les tocaría un buen momento y aunque aparecieron en alguna historia más, incluso cambiando sus integrantes y apareciendo en mitad de un lío con el Darkhold y Sattanish en una historia que aprovechaba a otro personaje de esos que habían dado tantos tumbos que incluso había salido en los magazines de Curtis.
Ah, cierto. Curtis era un subsello de Marvel para sacar magazines en blanco y negro sin poner Marvel. Cosas suyas. El caso es que los sacaron de nuevo contra Los Vengadores (Costa Este)
En una historia con demonios, guiños en el título y el libro de marras. Pero ni por esas. Los pobres se quedaron sin serie, con muchos líos de quién estaba dentro y quién fuera -porque, claro, necesitaban a su Hombre Lobo en otro lado que en Marvel parece que no tuvieran suficientes nunca- y aunque este macro-arco se publicara en 1991 al año siguiente no les tocó reintegro. En serio, prefirieron darle un título al libro antes que a ellos. ¿Se puede ser más triste que eso? Quiero decir, teniendo en cuenta que luego se olvidarían y sólo volverían a sacarlos para matarlos como si fueran secundarios del pasado que usar para un truco fácil.
Más triste aún resulta cuando pensamos en la evolución de otos personajes que andaban por allí esos años. En MalibúNight Man -mira, otro Night con serie propia- no solo sería capaz de tener su propia cabecera
como parte fundamental del Ultraverso… y más allá…
también tendría los crossovers más esperables
y más noventeros
e incluso acabaría logrando una serie de televisión.
Mientras que en Epic estaría la Shadowline Saga, que tiene también mucho mérito no ya por los números que salieran…
como por lograr tirar de historias de Chichester para acabar dándoles su propia serie. Sí, porque por loco que os parezca ese personaje de ahí, que en aquel momento se llamaba Shreck y era un tipo de aspecto villanesco y verdoso que luchaba contra St. George. En realidad cuando menos os recuerde de Epic sospecho que más felices seréis. La cosa es que Marvel pensó que le podían cambiar el nombre y darle serie propia porque eso es lo que hacían con todos los personajes que no fueran Night Shift. Así que en 1992 -ya, seguro que notáis un patrón- se estrenó Terror Inc.
Una serie tan de su época que tuvo incluso la inevitable aparición invitada del de siempre.
No duraría mucho pero, por supuesto, llevaría a que lo recuperaran en 2007 para la línea MAX
y luego en 2009 para un especial
Hasta llegar a la actualidad, como uno de los mercenarios reunidos por MuertoPiscinas
A los que hacía vestirse como él.
Así que al final acabamos encontrándonos con que incluso los personajes, por terroríficos que sean, y por series que hayan protagonizado -o vayan a protagonizar, que al ritmo que va Marvel seguro que en unos meses está anunciándole también serie a este- puedes acabar en mitad de un marasmo de cosplay…
No ya porque parezca una época en la que es más fácil ser youtuber o cosplayer que autor (dibujante, guionista) en un evento comiquero, sino porque uno al final nunca sabe cuándo le va a tocar ir disfrazado de Lo Mismo que el Resto. Y, quien sabe, quizá si decides hacer un pequeño examen para ver si la persona está poniéndoselo con carnet o lo hace solo por diversión puedes encontrarte tras la máscara a un monstruo verde gigantesco. Así que mejor guárdate las ganas. O puede que acabes tan olvidado como Night Shift.
Y es que al final todo el mundo parece tener un lado oscuro. Todo. El. Mundo.
Así que ya sabéis, para esta noche diversión, respeto y cómics. Si no queréis acabar olvidados o… peor aún… ¡Parte de un Universo Televisivo! NYA-HA-HA-HA!!!
Qué atrevida es la ignorancia. Los chicos de Progressive Boink, sin duda adolescentes que sufren esa lacra estudiantil conocida como déficit de atención (aunque eso no les impide hacer una página web… ¡Cuánto daño ha hecho Internet!) cargan contra la bellísima imagen que tienen justo abajo y, ya de paso, arremeten contra la historieta que la cobija, la fantástica presentación de Bloodwulf en el primer número de ese incunable que es Darker Image (donde sólo los excesos de Sam Kieth lastran un valiente tebeo) y acaban por formular una guía de creación de personajes Image llena de maldad, achacando a la revolucionaria editorial algo que, en realidad, forma parte sustancial de toda la cultura popular desde que ésta existe, es decir, desde que el hombre se reunía alrededor del fuego para contar historias. Vayamos, pues, por partes.
1 – La Viñeta
De entrada, los chicos de Progressive Boink la cagan bien cagada cuando dicen que esta viñeta es el gran final de la historieta. Falso. Sucede en la página cuatro de las nueve que componen la historieta. Ven lo que les decía de la ignorancia y la falta de atención. Está claro que no saben de lo que hablan y que carecen del rigor exigible a todo estudioso de la historieta. Para acabar de rematar, aducen sin vergüenza que es imposible que un disparo a bocajarro haga que una cabeza decapitada gire sobre sí misma. Aceptaría esta crítica si no fuera porque…
A/ como persona interesada en la Revolución Francesa sé que la decapitación sigue siendo una muerte traumática cargada de misterios. ¿Cuánto rato permanece viva la consciencia? Todos sabemos que una cabeza recién cortada sigue consciente durante bastantes segundos (que a su propietario sin duda le parecen eternos, he ahí un ejemplo de la relatividad del tiempo), e incluso es capaz de soltar algun improperio (normalmente, en el contexto revolucinario, consistía en un aristocrático “Je me chien toi putain mère”, vulgo Me cago en Tu Puta Madre). A partir de aquí, me parece muy arriesgado considerar que una cabeza recién decapitada se comporte como una vulgar masa inerme, y más teniendo en cuenta que ni siquiera es una esfera perfecta. Si tenemos en cuenta que ya la cagaron de inicio, su credibilidad está por los suelos. O bién se trata de sociópatas que se entretienen en el sótano de su casa disparando contra personas inocentes.
B/ ¿Quién coño pide realismo en una escena de violencia gratuita? Fácil: un demente ansioso de sangre. Una persona enferma y, sin duda, peligrosa. La ultraviolencia de ficción nunca es gratuita, pero tampoco realista, es sencillamente una divertida forma de catársis con humor. Un no tomarse en serio a nosotros mismos. Reclamar ánimo y detalle naturalista en este tipo de secuencias es no conocer los mecanismos de la ficción popular que nunca, repito, nunca, recreará estas escenas con realismo sencillamente porque no es divertido. Lo bueno, lo que nos gusta, es que la decapitación sea honestamente falsa y sublimante de humor splastick. De El Regador Regado (Hnos. Lumiere, 1895) a la cabeza decapitada que desafía las leyes de la física (Liefeld, 1993) hay escasísima distancia, y no saber ver eso es ser un aburrido y un triste, además de un sádico que requiere tratamiento médico.
2 – Bloodwulf
Los chicos de Progressive Boink (que como más lo pienso más infames me parecen) echan en cara a Liefeld que su personaje Bloodwulf no es más que una copia sin gracia de Lobo. Aquí, en adlo, no estamos para engañar a nadie. Es evidente que Bloodwulf se inspira en Lobo, pero… ¿Desde cuando eso es sinónimo de mala calidad? ¿Es mala Watchmen por inspirarse en los personajes de la Charlton? ¿Es Rorscharch un mal personaje por se una copia del Question de Ditko? ¿Es El Quijote despreciable por tomar como punto de partida las novelas de caballería? A ver, a eso se le llama tener prejuicios. El argumento de la copia no me vale porque sirve para unos y no para otros al antojo subjetivo del opinador desinformante. La copia forma parte intrínseca de la ficción popular desde su génesis, y atacar con ella una obra de ficción modesta, un tebeo de consumo, es atacar toda la cultura de ficción que ha creado el ser humano a lo largo de la historia. La Guía para crear personajes image con la que estos chicos despreciables terminan su texto es realmente vergonzosa. ¿Acaso no hacían lo mismo la Marvel? ¿O la DC?Díganme un solo personaje que no hunda sus raices en uno anterior, ya sea hijo de la novela, la tradición oral o la leyenda histórica. ¿Es un mal personaje La Masa por inspirarse en Mr. Hide? Por eso les digo que arremeter contra Bloodwulf porque se parece a Lobo es una memez. Lo que hay que hacer es acercarse a la historieta de Liefeld desprovisto de prejuicios y se descubrirá entonces una grandiosa y a la vez modesta historieta de entretenimiento.
El Bloodwulf de Liefeld hunde sus raices no sólo en el tebeo de superhéroes sino también en las historietas que poblaban cabeceras hoy legendarias como Metal Hurlant o Heavy Metal. La presentación de Bloodwulf no hubiera desentonado nada rodeada de historias realizadas por Druillet, Caza, Moebius, Corben o Bernie Wrighston. Fíjense, por ejemplo, en el nada sutil emparejamiento visual entre moto espacial y pistola.
El entintado no es habitual en un comicbook de superhéroes sino que rinde tributo a los grandes nombres arriba citados. Pero incluso diré más: Liefeld hace gala de una honestidad brutal. No hace un chiste moto-pistolón. No. Es que la moto es REALMENTE una pistola. ¿Quién puede criticar tamaña sinceridad gráfica?
La escena continua en una excepcional secuencia de tres paneles horizontales en la que el protagonista mira al lector y rie.
Puro metalenguaje de altura. Liefeld domina los más complejos recursos del lenguaje narrativo. Y cuando Bloodwulf ríe, lo hace el lector. Tremenda e inmediata identificación en sólo dos viñetas. Yo me quito el sombrero. Pasemos a una nueva viñeta seleccionada.
Habrá quien piense, o incluso se atreva a decir en voz alta… “¡qué malo es Liefeld, fíjate como hace caminar al personaje!” Valiente imbécil, debemos responderle. Esta forma de caminar obedece a un efectivo uso del expresionismo gráfico. Bloodwulf es un ser violento, una máquina de matar, una mole ultraviolenta, un Terminator asesino. ¿Cómo podemos simbolizar todas esas virtudes en una única imagen? Pues haciéndole caminar como una imposible y pesada máquina. Liefeld sacrifica el realismo en pos de la eficiencia narrativa, y pardiez que lo consigue. Por no hablar de las flechas de colores, azul y rojo, que indican direcciones hacia donde caminar. Una bellísima parábola social sobre la sociedad occidental, especialmente la estadounidense. Y ya para acabar.
Aquí tienen tres viñetas en las que Bloodwulf se aleja del planeta y lo destroza a traición y de espaldas. Una pedorreta atómica. Una ventosidad apocalíptica. Yo siempre he defendido la escatología como una forma de humor tan válida como sana. Pero creo que es mejor dejarme de monsergas justificativas. Es un panel de viñetas divertido. Muy divertido. Pues ya está. A callar la boca, putos.