Acuerdos sobre el programa de actuación y saneamiento editorial

Falta menos. Para Abril el clásico logo de DC volverá a aparecer de forma regular por nuestras librerías dejando atrás un periodo de incertidumbre en cuanto a títulos, periodicidades y precios. Sin embargo, toda transición requiere de sacrificios, y aunque siempre se intenta que la mayoría de la ciudadanía quede satisfecha, es imposible evitar que ciertas minorías queden agraviadas. Va por ellos.

Aunque se puede alegar desconocimiento o inocencia en muchos casos, admitamos también que en otros, el acto de compra representaba también un cierto posicionamiento con tendencia al cachondeo. Es decir ¿la primera entrega de una serie de doce números en Noviembre de 2024? eso es tener Fe.

La nueva criptomoneda ¡comprenla, carajo!

Si algo bueno tiene la DC de estos tiempos es que sus eventos y renumeraciones permiten establecer puntos claros de entrada al lectorado que permiten a las ediciones extranjeras marcar sus lineas de salida. En el caso que nos ocupa, el punto de inicio es All-In, al tiempo que se inicia la linea Absolute.

La andadura editorial anterior se quedó en los estertores finales de la etapa previa, la del Amanecer de DC. De manera que para paliar al mayor número de damnificados y que puedan retomar las líneas truncadas, Panini también irá recuperando esas aventuras en forma de tomos.

Estrategia que en algunos casos permitirá completar alguna maxiserie que otra sin graves desperfectos más allá de cómo queden los lomos en las estanterías.

(en estos dos casos concretos, basados en -snif- hechos reales, los lectores con don de lenguas tendrán prontamente a su alcance los recopilatorios finales en su idioma original)

Pero el cómo se integrarán esos futuros tomos en donde se haya quedado cada uno en las grapas de Batman o Nightwing será otro cantar. Alguno habrá al final que hasta le agradezca a su librería que le hubiese cancelado unilateralmente la suscripción en el momento adecuado.

Y luego hay casos dificilillos.

Primer tomo de dos. Veintiseis euros y medio en origen. Doscientas cuarenta páginas conteniendo The New Golden Age núm. 1, Justice Society of America núms. 1-5, Stargirl – The Lost Children núms. 1-3 USA. Un especial y la mitad de dos series limitadas diferentes.

En una realidad alternativa, el regreso de Geoff Johns a la serie que le otorgó los favores del público y aliado con un notable dibujante patrio como Mikel Janín hubiera sido todo un bombazo que hubiera merecido más atención y cariño (aunque debe decirse también que la errática periodicidad de la serie en origen tampoco jugó a su favor para promocionarla en una grapa mensual). En una realidad, el tomo que cierra ambas series llegó al mercado la semana pasada. Pero esa realidad no es la nuestra.

El tiempo dirá como veremos estas conclusiones, pues queda claro que no hubo un traspaso de poderes acordado entre las dos editoriales.

Eran sus costumbres y hay que respetarlas.