Cuando traduces de forma profesional tienes que tomar decisiones, y ello implica sacrificar en ocasiones la fidelidad al original para ofrecer un producto culturalmente más cercano a tu lector potencial. He aquí un ejemplo sacado de un álbum de Iznogud

Goscinny escribe en esta escena un chiste de peces relacionado con el rey franco Clodoveo. Ya me contarás tú para el lector de Planeta qué interés va a tener ese señor a estas alturas, especialmente en una historieta de humor. Así que la traductora, como parte de su labor, cambiará esa oscura referencia por una más local

¡Y ya está! ¡Los doscientos mil habitantes de la localidad de Móstoles saben perfectamente a qué fuente se refiere el Califa! ¡Otro éxito de la maquinaria editorial española!
Traducción domesticadilla, además con sumisión a Madrid como guinda, pero los traductores están de moda con su asociación y no se puede decir nada malo.
Creo que es ahora cuando agradezco que los Iznogoud no tengan una traducción mexicana oficial…
Como todo el mundo sabe, España == Madrid
Esos intelectuales de 1898…
Para gente que hemos leído a Spiderman decir «esto es mejor que Fofito y Milikito» o «te obligaré a tragarte varios episodios de crónicas de un pueblo», esto no llega ni a alterar el pulsómetro del Apple Watch.
The poison! It’s good, the poison!