Esto No es Serial. Con Jónatan Sark y Pablo Fluiters. El podcast legalmente obligatorio de dos señores de más de 30. Esto sigue sin ser un blog de noticias, pero los otros tampoco.

Lo siento, pero por principios no me verás a mi compartiendo enlaces de ADLO, que uno tiene su orgullo y esa gente, lo que es caerme, han hecho muchos méritos para caerme regulinchi.
David J. “Batto”, administrador de Ramen para Dos
Si quieres informarte de algo te vas a ADLO! que si bien no hacen investigaciones (ni falta que hace, es un blog satírico), al menos contrastan.
DNMRules, fanzinero en excedencia
Si los de adlo no escribieran como un preadolescente con cuatro monsters en el body sería una página excelente.
Sátiro introvertido, un señor que hay en Bluesky
Hacer un programa sobre un caso abierto tiene muchos riesgos. Uno de ellos, por supuesto, es hacerte demasiado popular. Convertirte en un personaje más de la trama. Influir en los resultados de una investigación puede hacer que todo el trabajo previo se vea empañado. Y es por eso, y no porque hayamos estado meses remoloneando, que en ADLO! hemos esperado tanto tiempo la resolución del caso antes de empezar a publicar nuestras pesquisas. Nuestras tres anteriores entregas han analizado muchos, aunque nunca todos, los recovecos de la compleja relación entre DC y El Catálogo del Cómic. Podríamos haber empezado antes. Podríamos haber profundizado menos. Y sobre todo, podríamos haberlo dejado ahí. En ese 31 de diciembre de 2024 en el que la cuenta oficial de ECC en Twitter informaba del envío de sus últimos cómics por crowdfunding.
Por supuesto, no nos íbamos a conformar con eso.
Cuatro días antes, durante las festivas jornadas navideñas, se publicaba en el Boletín Oficial del Estado una pequeña modificación en la estructura de El Catálogo del Cómic, que había permanecido desde 1995 sin alterar. Daniel Navaro pasaba de ser el administrador único para dar paso a una estructura con dos administradores solidarios: el propio Daniel y Benigno «Beni» Vázquez. De este modo quien había sido hasta ahora la cara visible del proyecto y su «CEO» pasaba a ser responsable legal, junto a Daniel del proyecto empresarial. ¿Y no son las navidades una época de compartir solidariamente?
¿Qué quiere decir esto? Solo podemos especular. Teóricamente un cambio así querría decir que en el futuro de lo que pudiera ocurrir ambos administradores serían, teóricamente, igualmente responsables. Respecto a la responsabilidad sobre lo ocurrido antes del 27 de diciembre de 2024 teóricamente Daniel Navarro seguiría siendo el único al que se podría, teóricamente, señalar legalmente. Y decimos teóricamente a expensas de la calificación legal sobre la participación de Beni Vázquez con anterioridad o podríamos decir «presuntamente». Que no somos abogados. Ni periodistas. Esto es solo un podcast de true crime. Rumorología aparte, las cosas en ECC siguieron siendo como habían sido durante el último mes. Es decir: muy silenciosas.
Pasada la fecha de Reyes, el 8 de enero, comienzan a aparecer los alegres compradores del crowdfunding de Batman y los Outsiders. Las habituales quejas y lamentos por la calidad del producto recibido tras cada crowdfunding de ECC hacen acto de presencia en redes, aunque la sensación general es más bien de alivio entre los mecenas de la campaña al constatar que no les han estafado (más de lo esperado), algo con lo que muchos de ellos ya no contaban. Los mecenas del último crowdfunding por salir, el de la segunda parte de los Titanes, respiran un poco. Pero solo un poco.
Y es que ese mismo día 8, SGEL manda un correo a librerías apremiando con las devoluciones de todo lo editado por ECC y Cascaborra. Un mes da a las librerías para rendir su stock, o quedárselo sin opción de devolverlo más adelante. ¿Pero quién son estos señores de SGEL? No se suponía que ECC distribuye sus cómics directamente, sin intermediarios? Está claro que alguien mentía. O, al menos, no se explicaba de todo.
ECC había nacido con la idea de ahorrarse intermediarios. De ahí la venta en la web o las tiendas propias. De ahí también la ausencia de distribuidores… hasta que empezó a tenerlos. Ya dijimos en un episodio anterior que fue una de las sorpresas de 2023. Tras 12 años la editorial empezaba a utilizar una distribuidora. Pero, a la vez, seguía distribuyendo de forma directa para quien quisiera.
Así los que trabajaban con SGEL recibían los títulos más tarde y con menor margen de beneficio. Algo que a las librerías que no iban a trabajar con ECC directamente -librerías generalistas, quioscos, etc…- no les importaba demasiado. Mientras ECC mantenía a su clientela porque, claro, si realmente te importaban sus productos era más sencillo seguir con ellos.
Pero esto también creaba una doble ruta. SGEL es una empresa razonablemente seria, fundada en 1914 ligada a la Librería Francesa de Barcelona, desde hace años venía siendo propiedad del grupo Lagardère a través de Hachette. Sin embargo, a mediados de ese mismo 2023, SGEL sería adquirida por Logista Libros. Que es propiedad en un 50% del Grupo Planeta. Sí, ECC entró en una distribuidora por primera vez en su historia y a los pocos meses se encontró con que la compraba Planeta.

En cualquier caso la existencia de SGEL significaba que en todo este follón de gente que no habla había una empresa mandando comunicaciones, sin adornos ni añadidos, a sus clientes. Lo que debería de ser lo normal en el sector. Todo lo normal que es que esas comunicaciones las lance, en un 50%, una empresa de parte del megaconglomerado editorial de la competencia que además es tu ex. Y según algunos rumores ya entonces, candidata a robarte la pareja de baile de nuevo.
El secretismo es común en el mundo editorial español
La redacción de ECC, en comunicado publicado en 2013 (no disponible en su web)
En un sector como este no era posible afirmar con rotundidad si el mensaje de las devoluciones de SGEL significaba que ECC había decidido volver a ese momento pre-2023 y autodistribuirse o si era parte de la teórica caída de la editorial. Lo que sí que sabíamos es que SGEL no había causado los problemas que ECC estaba empezando a saberse que tenía con las tiendas con las que trabajaba directamente. De esos problemas hablaremos más adelante porque dominarían buena parte de las siguientes semanas.
Por cierto, si os preguntáis que cómo afrontaban los medios sobre tebeos este tema, dos días después del comunicado de SGEL sobre Cascaborra, algunos publicaban su comunicado de novedades como si no pasase nada. La esperanza es lo último que se pierde.
Al día siguiente del mensaje de la distribuidora que trabajaba con ECC otro agente más se suma al ruido y la confusión. En este caso es el servicio de libros rebajados Bibliostock, que comenta en redes sociales que va a tener grandes bajadas de precio en más de 1.000 títulos.
En los true-crime también son importantes las declaraciones. No solo lo que se dice, también cómo se dice. El tono. El estilo. Por ejemplo, el tono y el estilo de Bibliostock es el de Gila. Como Gila es parte de la cultura española todos entendíamos de qué iba la cosa: «Alguien va a saldar a alguien. Alguna editorial va a ser saldada. Alguien tiene muchos títulos que rebajar«. Porque es cierto que no son los únicos que saldan. Tú entras en su web y ves que hay todo tipo de gente: Norma, Penguin, Panini, Dolmen, El Jueves, Aleta, Glènat, Kraken… Como en España lo de los cómics está como está a veces te encuentras a, digamos, Invencible, y no sabes ni cuál de las editoriales que la ha publicado lo estaba saldando.
Otra de las preguntas que tienes que hacerte cuando escuchas un podcast es: ¿Y esta persona por qué está hablando? A veces es porque una vecina de la víctima ha decidido que es su oportunidad para los diez minutos de fama. A veces es peor porque se trata de alguien que demuestra una notable antipatía hacia la persona en cuestión. Así que no puedes dejar de preguntarte si le ceden espacio porque rellena el silencio o porque te están señalando a un posible sospechoso.
A los que necesitéis info para denunciar, emprender acciones legales, reclamar, lo que sea, y me pedís datos sobre Jaime, Beni, Dani: hace años, muchos, que ya no hablo con ellos. No tengo su contacto. Dejamos de ser amigos.
Cels Piñol, en un tuit del 11 de enero de 2025 que después borró. Suponemos que porque no le gusta ir a los juzgados.
Y es que a lo largo de nuestro repaso a la vida y milagros de El Catálogo del Cómic ya hemos visto que si hay una cosa que se gana editando tebeos en el cómic no son amigos. Ni dinero. Y contactos solo si consigues que una distribuidora te lleve a pasear en camello o un ministerio a lamer bota en Francia. Los muchachos de ECC desde luego iban a recibir unos cuantos recados en los siguientes días, incluyendo editores ajenos bromeando sobre su situación financiera o comparándolos con un asediado III Reich.
Una vez se abre una vía de agua es muy difícil volver a cerrarla. Cuando el torrente comienza a brotar va agrietando toda la presa y su presión se vuelve prácticamente incontenible. Alcanzado cierto nivel de daño estructural, todo empieza a desmoronarse. El 13 de enero alguien publica en redes sociales que los servidores de ECC cierran esa semana. El tuit se borra, pero el tiempo le daría la razón. Antiguos colaboradores, empresas asociadas, empleados, libreros, amigos… todos iban a empezar a contar su versión de los hechos. La discreción con la que ECC quisiera llevar el asunto no iba a ser suficiente. Seguíamos sin encontrar el cuerpo pero hasta los más optimistas ya hablaban de un cadáver.
Un día después, 14 de enero, la editorial envía a través de sus comerciales una escueta carta. ECC dejará de enviar pedidos “hasta nuevo aviso”. Desaparece el botón que permite la compra de cómics desde su web. Y pocas horas después los libreros comprueban que ya no pueden acceder al portal de pedidos de ECC. Es entonces cuando para algunos se confirman sus peores sospechas: la editorial de DC en España al final era como Fórum… pero como el Fórum Filatélico.
¿Recordáis lo que hablábamos de que se podía trabajar con SGEL o con ECC? Pues ocurre que la mayoría de tiendas de cómics seguían trabajando directamente con la editorial, como parecía más razonable. Incluso cuando, como contaban poco después desde Alcalá Cómics, la relación con sus comerciales llevase tiempo sin ser la mejor. De modo que cuando SGEL avisó de que había un plazo para hacer las devoluciones esto se refería a aquellas tiendas que trabajasen a través del intermediario. Según lo que cuentan algunos de los que habían continuado trabajando directamente con El Catálogo del Cómic los dos meses previos habían consistido en darse de cabezazos contra la pared a cuenta de dinero de devoluciones que no aparecían.
Akira Cómics dejó de trabajar tanto las novedades como los atrasados de la editorial ECC el pasado mes de Noviembre debido a GRAVES desacuerdos de contabilidad con ellos[…]
El Gremio de Libreros de Madrid al que pertenecemos fue informado en ese mes de Noviembre […] y decidió enviar una nota informativa a las librerías asociadas de Madrid para que revisaran sus respectivas contabilidades.
Librería Akira Comics, en comunicado oficial del 14 de enero de 2025
Y es que el malestar que habían dejado no era pequeño. Incluyendo el cobro de materiales no entregados en diciembre, enero y febrero que parecía confirmarse que nunca se recibirían. Aunque siempre hay alguien dispuesto a salir a defender que ha oído hablar estupendamente de tu Atención al Cliente. Porque en este país de nostálgicos y abogados del Diablo siempre habrá quien se ponga de tu parte. Aunque solo sea por dar la nota.
Por supuesto todo esto demuestra que lo peor que puedes esperar es que un librero no hable. También que para que lleguen las confirmaciones no hay más que esperar a un libero hable. Por ejemplo, ese correo de un gremio de libreros ya no tiene sentido debatir si se puede enlazar o no -teniendo en cuenta que está accesible pero hay que saber dónde mirar- porque ya ha llegado un librero a decir que fue cosa suya y cuál fue ese contenido.
Teniendo en cuenta que los juicios son una lotería y que no somos estrictamente hablando un medio…
Un miembro del consejo editorial de ADLO! el 13 de enero de 2025
Quizá creáis que la información de los medios y las redes sociales ha llegado hasta las librerías. En realidad ha sido al revés. De ahí que cada vez que te descuidas alguien escriba un artículo y aparezcan libreros hablando. Los libreros hablan. A veces incluso hablan entre si. La inmediatez de la información permite que las redes sociales lleguen antes. Pero otros medios, o este podcast que (recordemos) no es un medio, han tenido tiempo de sopesar la información. Otra cosa es que veamos en medios que no hay. Ni información sopesada, ni información en general. Y cuando lo hay… ¡madre mía cuando la hay! Mejor esperad a informaros cuando esto lo cuente en plan «histórico» algún ADLater en columnas en la Dolmen.
Como los medios ya están hablando de ello (y este podcast ya había revelado sus tres primeras entregas) podemos presentar a otro de nuestros personajes: los ‘detectives de internete’, esa gente que siempre aporta informaciones maravillosas. Como el rumor de que no habían abierto las tiendas de ECC y que era fake. No es que no hubieran estado hasta ahora, pero se vuelven mucho más relevantes. Al fin y al cabo, el día 16 de enero hasta ElDiario saca una pieza sobre el tema.

No sabían que ECC era una editorial y no una distribuidora, pero sacaban una pieza.
Lo que pudimos encontrar dentro fue, por supuesto, a más libreros hablando. Es lo que tiene la falta de certezas y fuentes. Igual que podemos afirmar que no hubo contraste con lo que se puso y por eso hemos podido leer mentiras como que las editoriales tienen que quemar los libros cuando pierden los derechos. Pero bueno, es en ElDiario que aún no ha rectificado todos los errores -casi ni media docena de ellos- del artículo de Mónica Zas de agosto de 2016-así que tampoco es como si esperáramos que fueran a hacer su trabajo o a corregirlo. Aunque sí que han hecho algo que demuestra que es un medio de comunicación español. Ponerlo detrás de un muro de pago. Eh, si algo ha demostrado el consumo de tebeos es que la gente está dispuesta a pagar por cosas que son mentira.
Llegados a este punto no hay librería que no quiera sacar comunicados, declaraciones o simplemente cagarse en todo. De esta forma los medios no tienen que reconocer que nos habían copiado. No os preocupéis, en ADLO! sabemos que han sido los taquiones, que lo enturbian todo. La aparición de las noticias llevó a ECC a reaccionar. Y lo hizo como uno esperaría, hablando de otro tema. Como si se hubieran tirado un pedo en el ascensor. El 18 de enero ponen un tuit sobre crowdfundings.
Y ese mismo día, por si alguien se pregunta si volveríamos a leer sobre él…
Lo que viene va a ser GRANDE y requerirá de toda mi atención.
Cels Piñol en un tuit del 18 de enero.
Armados con sus peores metáforas sobre superhéroes, los periodistas de la prensa seria salen corriendo a hablar del tema. El 19 de enero, sale en El Periódico y en el ABC. Pero lo gordo llega cuando el 21 de enero aparece una noticia en RAC1:
Panini compra els drets de DC Comics a Espanya:
L’editorial ha confirmat a ‘El món a RAC1’ que agafarà el relleu d’ECC per distribuir els còmics de personatges tan estimats com Batman o Superman
Martí Esteban, para RAC1
Por supuesto sigue sin ser oficial, nos pongamos como nos pongamos. Que nosotros no estamos contando esto porque ‘es que los de ADLO! cuentan lo que nadie se atreve’, qué tontería. Los de ADLO! contamos lo que nadie que quiera sacar unos cuartos del mundillo del cómic se atreve. Que es algo muy diferente.
Así que un artículo con una fuente que no da su nombre pero que dice lo que todo el mundo esperaba resulta creíble no porque haya confirmación oficial sino porque estamos decididos a creerlo. A partir de ahí el resto puede repetirlo, no porque sea cierto o porque haya nada oficial, sino porque otro medio lo ha dicho y puedes cargarle la culpa a ellos. Es algo muy importante, como demuestra que los medios sean capaces de citar a la competencia.
Salvo Dolmen. En la revista de Enero de Dolmen dicen que los derechos se los va a llevar Planeta. Lo cual aumenta las posibilidades de que lo de Panini sea verdad. Porque vamos a seguir hablando de posibilidades. Aquí nadie sabe nada y si lo sabe nosotros vamos a negarlo.
Y si estáis pensando en filtraciones y demás… ¿qué más dará? Si estamos en un momento en el que hasta los rumores tienen rumores. ¿Va a cerrar ECC? ¡Todo el mundo lo sabe! ¿Se hará con los derechos de DC Panini? ¡Todo el mundo lo sabe! ¿Quién filtró esto? ¡Todo el mundo lo sabe! Luego ya hay días en los que resulta que son verdad y otros en los que no. Y hablando de personas no relacionadas con esto…
No soy el nuevo editor de nada. Quien haya lanzado ese rumor, va totalmente equivocado, en serio.
Cels Piñol en un tuit del 21 de enero. La gente ya estaba dispuesta a creer cualquier cosa.
Pese a su memorable gestión en World Cómics o Laberinto. -¡Deberíamos haber hecho primero el podcast de Laberinto!- Pero eso habría hecho que este podcast se nos fuera de las manos. ¡Si ya se nos ha ido! Y eso que no hemos dejado que Sark cuente lo de Bibliostock. Eso habrá que dejarlo para nuestra próxima entrega. Porque la habrá. Seguimos sin encontrar el cuerpo, la lista de sospechosos con móvil no para de crecer y, para colmo… ¡la prensa ha empezado a citarnos!

Esto sí que es una crisis de los medios, por mucho que el periodista fuera un New Adlater.
Esto No es Serial. Con Jónatan Sark y Pablo Fluiters. El podcast legalmente obligatorio de dos señores de más de 30. Una producción de ADLO Novelti Librari.
Medios generalistas que citan a ADLO … Vale, eso no estaba en mi quiniela para este año.
Yo creo que DNMRules por fin se merece el ADLOSprite que siempre le negábais, ¿no?
Y acabo de descubrir que SGEL publicó en su día una novela llamada… La hermandad de los libreros muertos. HIPERCRISIS!
No me hagas hablar de cuando SGEL decidió publicar libros -más allá de sus colecciones de ELE (Español como Lengua Extranjera)- porque VAYA TELA.
Caerle «regulinchi» a Batto debería ser motivo de alegría, ya que es menos que nadie. Es como si mi vecina del sexto dijera «qué majos los de ADLO», una opinión que no vale nada porque solo la conocemos cuatro gatos.
«Por eso hemos podido leer mentiras como que las editoriales tienen que quemar los libros cuando pierden los derechos».
Qué buena idea, hay que comentarle a Elon que se la apunte para su ejército de comunicadores: Hitler, el comunista, no quemaba libros, los descatalogaba.
Por cierto, en Zona Negativa también os han citado en estos días, por aquello del sueldo Panini Concretamente, en su resumen de las mejores películas de 2024.
Bueno, en realidad no os nombraban así, con todas las letras, pero se les entendía todo.
No, hombre, no, ¿cómo van a escribir sobre nosotros con lo ocupados que están escribiendo sobre ECC? Que cosas tienes.