¡Un mes más, una letra menos! Listos para ver, de nuevo, todo lo que nos ha ofrecido el Universo DC. Quizá esperabais que la H fuera una letra tranquila. En ese caso os pasaría como a mí y luego recordaríais todos los personajes que empiezan por H. Y eso sin contar a los que no recordaba. Vamos, lo único que me sorprende es que no haya encontrado ninguna cosa rara de Hellblazer que meter aquí. Porque Lady Constantine irá a la L, claro. Pero, vaya, que os puedo aseguraros que si pensabais que la H sería una letra tranquila es que no conocéis cómo se las gastan en DC…
01) The Hacker Files (1992 – 1993)

La primera en la frente. Es difícil hablar de esta serie porque estoy seguro de que hay una historia detrás -o varias, la verdad- sobre lo que estaba sucediendo aquí. Con Sarge Steel como secundario para que veamos que está en el universo DC, nos encontramos a Jack Marshall, hacker extraordinaire, reconocible por una camiseta con una A dentro de un círculo, todo rojo. En los cuatro primeros números le vemos ejerciendo en una trama sobre un virus informático que era capaz de generar todo tipo de maldades como, por ejemplo…

Vídeos falsos que se pueden usar para mover una desinformación lesiva. ¡Ah, el futurismo!
Pero para la quinta meten un par de números a Oráculo para pasear por allá un rato, y luego ya se dedican a mil cosas distintas, desde los malvados comunistas chinos -que son una muestra de un malvado sistema corrupto- a los malvados capitalistas estadounidenses -que son una muestra de que siempre hay alguna manzana podrida por bueno que sea el sistema- pero, sobre todo, procuran integrarlo más en el universo. De ahí que salga en Justice League Quarterly, en un número guionizado por Mark Waid en el que Guy Gardner le baja los pantalones a un menor, lo esperable a principios de los noventa, vaya. Y, por supuesto, la Liga aparece también en la serie regular:

No sé qué más os puedo contar.
Bueno, sí, que el futurismo es importante, no tenéis más que echar un ojo a los momentos que -para los últimos números de la colección- transcurren en una suerte de universo virtual.


Tecnología punta, vaya. De esa en la que rápidamente están hablando de temas que, por supuesto, están muy lejanos. Como cuando el capitalista corrupto se da cuenta de que…

…meter la IA en todo quizá no haya sido la mejor idea.
Pero bueno, eso con dejar pasar una semana y sacar un croufundin se arregla.
Vamos, que yo diría que es una posibilidad para recuperar en una edición a la altura, pero si sacar Batman es ya un riesgo para sus finanzas no os quiero contar una serie sobre hackers en la que no aparece ningún furro.
02) Hammerlocke (1992 – 1993)

Pues aquí estamos, con un intento de lanzar unos nuevos superhéroes… que se quedó en el intento. Y mira que parecía complicado porque lo que tenemos es, por un lado, a un grupo de luchadores ecologistas decididos a todo y, en el otro, a una empresa que está monopolizando toda una serie de tecnologías que incluyen la explotación del universo, mientras hace y deshace con su personal de seguridad.
Por supuesto los malos son los ecologistas. Solo faltaría.

Lo más sorprendente es que con esa portada, entre He-Man y Warhammer, al final sea una obra de ciencia ficción en la que claramente pusieron superhéroes a ver si vendía más. Creo que la respuesta es autoevidente.
03) Hardcore Station (1998)

Aquí estamos con Starlin y sus cosas. Un poco lo de siempre, un malvado malvadísimo. Muy malo y muy poderoso. Pero vamos, muy malo. ¿Que cómo de malo?

Imagina.
Y luego ya un héroe galáctico, una serie de idas y venidas y la decisión de meter a un grupo conocido para el final:

Además de apretar el puño y decidir que volverán a aparecer los dos personajes principales. Que es cierto. El protagonista, Chief Justice Max, y el villano, Synnar -ya os hemos dicho que era Stalin, no esperaríais sutileza por su parte a estas alturas- reaparecerían, el primero en 2006-2007 en Mystery in Space y los dos, en distintos grados de importancia, en 2009 en Strange Adentures y Rann-Thanagar: Holy War. Después de eso solo volvería a DC para Stormwatch, en 10 números que darían para otro posteo. Pero Max y Synnar no reaparecerían. Así que tendréis que conformaros con estas historias.
04) Hardware (1993 – 1997)/ Hardware: Season One (2021 – 2022)

El Dakotaverso. La última frontera. Bueno, en teoría esto es Milestone, el universo de superhéroes afroamericanos de DC. En la que se podían permitir decir las cosas que no decían en otros sitios. Y lo decían alto y claro hasta un punto en el que lo difícil es no publicar el primer número al completo. Así comienza:



Y a partir de aquí se va a contar su propia historia, que os podéis imaginar:


Por supuesto todo lo que hace le lleva a encontrar que el tipo está hasta arriba de mierda, así que su decisión es destruirle por los medios clásicos: La justicia y los medios de comunicación…

Con los resultados clásicos con la justicia y los medios de comunicación, por supuesto.
Y de ahí a crearse una identidad nueva. Menos por ser un superhéroe que para cargarse a este tipo. Bueno, más o menos, por supuesto no va todo el rato de eso, pero sí que es la línea principal: Por el día empleado sojuzgado, por la noche verdadero justiciero.
Sin olvidar la ironía de que el malvado, como todos los jefes, podría haberse salido con la suya tratándole con un poco de respeto y dándole una paga justa.
Por supuesto la MOLINIDAD NOVENTERA es lo único que podríamos decir que tendría que añadirse a la mezcla.
Y lo hicieron.



McDuffie estuvo unos treinta números -aunque con fill-ins, claro- manteniendo regularmente diferente el statu quo de manera que la idea central fuera la persona y no la situación. Y siempre con su particular sentido del humor.


Para el 34 habría un nuevo equipo… que duraría 4 números. A partir de ahí los equipos creativos durarían bastante menos hasta… que en el 45 decidieron contratar a Chichester como guionista. Como era de esperar eso significó que llegaron al 50 y cerraron. Bueno, de hecho fue peor. En el número cincuenta dejan tramas para cerrar y dicen que habrá un número 51 que significaría el cierre de esta serie.
Pero el 51 no llegó a salir en ningún momento.
Y así quedó la cosa. No volveríamos a saber de él hasta que en 2001 le dieran la oportunidad a McDuffie de recuperar a… Static Shock. Sí, en Static Shock: Rebirth of the Cool reaparecía tras 4 años Hardware. Ahí nos lo encontramos en silla de ruedas y aún con Baraki a su lado, pero con Hardware aún existiendo como robot a control remoto.

La prueba de aguas no dio para mucho, así que hasta 2009 no volvieron a intentar probar algo con Milestone. Esta vez en la Justice League of America, en un ‘evento Milestone’ que guionizaba, claro, McDuffie. Pero del que no llegamos a ver gran cosa. Ese mismo año pasaría por The Brave and The Bold a hacer team up con Blue Beetle –Jaime Reyes, que en aquel entonces solo llevaba 3 años en el cargo- (en un cómic guionizado por Adam Beechen) pero que servía para mantener en mente al personaje mientras aparecía la mini (muy mini, 2 números) Milestone Forever en la que McDuffie -claro que McDuffie– aprovechaba para cerrar los asuntos pendientes, hasta el punto de que parece más ese número 51 que faltaba, hasta el punto de que lo que salía en aquella mini de Static da la sensación de ser posterior a esto y no anterior.
Diez años más tarde -un saludo a los abogados de registros- volvía a parecer para Milestone Returns, un relanzamiento con Reginald Hudlin de entre toda la gente posible guionizando el lanzamiento, que por suerte a Hardware solo le mostraba en imágenes sueltas. Pero lo importante es que servía como el relanzamiento esperable del asunto, incluyendo…

Una nueva realidad con una nueva continuidad. Con deciros que no está ni McDuffie guionizando. Esta versión es bastante más… tibia. Menos política. MUCHO menos política. De entrada, no vemos la discusión con el empresario desde el punto de vista del protagonista sino del empresario, además el protagonista está divorciado o algo, y con un hijo que le han puesto porque a saber. También le han puesto un nuevo interés romántico de un viejo personaje que ahora es bastante más dócil, incluso el empresario parece menos capaz. Así que el dejarlo en el sexto número era casi esperable.
Claro que lo siguiente que hicieron fue darle una mini especial compartida

en la que Hudlin -esta vez sí- se dedica a cosas como darle un dispositivo de viajes en el tiempo, un hermanastro secreto y, bueno, esas cosas.
Aunque, por supuesto, luego fueran sacándolo aquí y allá, en el Milestone 30th Anniversary Special, el New Talent Showcase: The Milestone Initiative y… bueno, de momento nada más.
Pero ya volverán.
Siempre vuelven.
Y, mientras tanto, siempre nos quedará McDuffie.

05) Harley & Ivy: Love on the Lam (2001)

El año 2001 era muy diferente a la actualidad. Con deciros que en Nueva York tenían las dos torres en algo que no eran salas de cine. Pero al final uno sabe cómo comienza el año pero no cómo lo termina.
Con deciros que en esta época Harley e Ivy eran ‘buenas amigas’. Y ella aún estaba dando vueltas con el Joker mientras puddin’ trataba de librarse de ella de una u otra manera.
Y, mientras eso pasaba en los guiones, en los dibujos pasaban…


…otras cosas.
06) Harley & Ivy Meet Betty & Veronica (2017)

Parece una camiseta pero es un cómic, y es que alguien pensó que puestos a mezclar personajes lo mejor era hacerlo con estos. ¿Qué es lo que nos quiere dar a entender? Eso será pregunta para otro día, supongo. O, mejor aún, respuesta. Pero dejemos por escrito que esto existe.
07) Harley Quinn and Her Gang of Harleys (2016)

La última de Harley, lo juro. Pero es que esto TENÍA que aparecer. Porque la popularidad de las películas llevó a buscar todo lo posible y eso incluía… Bueno. Eso incluía.
Total, que una vez reunidos unos Mercs for Money… no, espera, distinto personaje mismo procedimiento de las empresas. Bueno, el caso es que este Gang of Harleys… ¿Cómo es posible que no lo llamaran Poker of Quinns? Bueno, da igual… el caso es que tras debutar en las páginas de la serie del personaje acabaron teniendo su propio cómic que incluía hasta una roll call.

El interior es lo esperable -sobre todo con tanto personaje- y tras el sexto número se acabó. Pero eso no significa que no vayan saliendo -al menos algunos de ellos- aquí y allá como secundarios de la serie.
Quién sabe, lo mismo hasta acaban apareciendo en alguna película. Seguro que Gunn puede lograr algo si le dejan hacer una con Harley.
08) Haven: The Broken City (2002)

Por algún motivo 2002 parecía un buen año para estrenar un cómic en el que unos extraterrestres venían a la tierra huyendo de un tirano en su mundo y buscando la alianza de los Est¡DE LA TIERRA! para derrotarle. No querían ser migrantes interplanetarios sino que las fuerzas de La Tierra inva¡MANDARAN APOYO! para restaurar la paz en su país. Su planeta. Quería decir su planeta. Que a los muy tontos no se les ocurriera decir que tenían petróleo es lo que demuestra la falta de visión. Lo cierto es que después del mini follón este -una mini de 9 más dos especiales con la JLA bien visible como principio y final de la historia. Decisiones, decisiones- y ya con la Mission Accomplished no volvieron a aparecer más allá de una visita al limbo de los personajes de cómic olvidados. Imposible saber qué salió mal con el plan.
09) Hawk and Dove (1968 – 1969) (1988) (1989 – 1991) (1997 – 1998) (2011 – 2012)

Vamos a intentar hacer esto, y hacerlo lo más breve posible. Pero no va a ser fácil. Porque hablamos de una serie tocada por la mano de ROB!
Aparecen por primera vez en 1968 en Showcase, en el número 75, como presentación de personasjes.

Dos hermanos hijos de un juez, sufren un ataque y una fuerza misteriosa les ofrece la posibilidad de esta transformación. Tampoco iban a complicarse demasiado. Así Hank y Don Hall se convierten en Hawk y Dove o Halcón y Paloma. Halcón es impulsivo y fuerte, Paloma … no sé, atrae a los jubilados y se caga en los coches, supongo. Durar no duró mucho y para el 6 lo habían cerrado.
A partir de ahí se juntan con los Teen Titans, y luego desaparecen. Hasta las Crisis Infinitas que aprovechan para matar a Paloma. Y, como todos sabemos, los muertos de las Crisis Infinitas no podían ser resucitados.
[Mira a cámara]
Así que para 1988 deciden que haya una nueva Paloma, Dawn Granger, mujer en este caso, y darle una miniserie para probar.

La miniserie fue un éxito, como no podía ser de otra manera teniendo en cuenta que su dibujante era un más-juvenil-que-de-costumbre ROB! Liefeld.
Al año siguiente tenían ya en movimiento la serie abierta. Aunque con Greg Guler porque no pudieron mantener a ROB! atado.

Kesel & Kesel seguían de guionistas y nos iban contando cómo Halcón cada vez era más impulsivo. De paso ese mismo 1989 montaron un Secret Origins para redefinir ese origen.

Y contar que los que les dieron el poder fueron un Lord del Caos y otro del Orden que…

Ciertamente las implicaciones eran muchas. Teniendo en cuenta que uno – Halcón– representaba al Caos y otro –Paloma– al Orden. Y que daban el poder porque estaban enamorados. Teniendo en cuenta que los originales eran hermanos las implicaciones son dignas de V. C. Andrews.
La serie duraría hasta el 28, hay quien dice que porque tras el follón con la identidad de Monarch a alguien le tocaba ser el enemigo secreto y nada mejor que dárselo a Halcón. Y aparentemente matar a Dove. En realidad todo era un truco de Mordru para hacer sus cosas de Mordru. Y de ahí a Extant. No tengo intención de intentar explicarlo. Pero puedo decir que Extant fue muerto en lucha con la JSA.
Aprovechando lo cual sacaron a unos nuevos Halcón y Paloma (1997 – 1998). Sasha Martens y Wiley Wolverman, sin relación alguna con los Lores del Caos y del Orden. Completamente distintos de los anteriores, vaya.

Duraría poco, de 1997 a 1998 pero solo por 5 números. Bueno, y alguna aparición suelta en algún lado. Pero no mucho.
Sobre todo porque la anterior Paloma no estaba muerta -estaba de parranda- así que en 2005 le buscaron una nueva Halcón, y nada mejor que su hermana Holly. V. C. Andrews y todo eso. Pero no en su propia serie sino en los Titanes, claro. Y sí, Hank y Don habían sido sustituidos por Holly y Dawn. Debe ser cosa de las aliteraciones. Por supuesto esto significó que había que traer a alguien especial para dibujar un par de episodios.

Qué os voy a contar.
Pero no nos despistemos. Durante Blackest Night (2009 – 2010) el antiguo Halcón sería resucitado, asesinando a la nueva Halcón. Que sería resucitada a su vez para que ambos persiguieran a Paloma. ¿Y el viejo Paloma? Dijo que gracias pero no gracias.
En serio, puede que hubiera aparecido como ‘resucitado’ en la Guerra de los Dioses o por el Brother Blood, Pero aquí decidió que pasaba. ¿Porque no estaba realmente muerto? ¿Porque hay una relación entre sus poderes y la Blackest Night? ¿Por algún motivo concreto? Pues ni idea porque para qué. Sobre todo porque la cosa termina con la posibilidad de resucitar a gente, lo que lleva a que vuelva a la vida Halcón.
Pero el antiguo.
Ya, yo tampoco acabo de entender el mecanismo, sobre todo porque esto significa que la segunda -¿tercera?- Halcón, Holly, es la única que jamás ha estado en una cabecera propia.
En realidad todo esto da un poco lo mismo porque rápidamente (en 2011) llegan los New 52. Y eso significa

Más ROB!
Durante 8 números (2011 – 2012) ROB! demostraría lo que daban de sí los personajes con un estilo solo comparable al suyo propio. Una situación que hizo que, lógicamente, no volvieran a tener cabecera propia. Porque a ver cómo superas esto.
Los personajes, eso sí, siguieron. Ahora eran parte de los Titanes o de Aves de Presa -sí, Hank también- o de lo que tocara. En su nueva continuidad Dawn es la segunda Paloma. El hermano de Hank, Don, había muerto en condiciones… condiciones. Y Holly, la hermana de Dawn, ni estaba ni se le esperaba. Bueno, miento. Aparece, sin explicación alguna, en un número de Dark Nights: Death Metal. Esta era la versión rápida y sencilla de su continuidad, ¿recordáis? Así que… ¿Qué os puedo decir?
Son los taquiones, que lo enturbian todo.
10) Hawkgirl (2023 – 2024)

Como decía cuando hablamos de Galaxy hace unos meses, Jadzia Axelrod tuvo la oportunidad de regresar al personaje – con Amancay Nahuelpan a los lápices – cuando le encargaron el segundo volumen de Hawkgirl. Y ella decidió hacerlo con un giro sobre lo que se podría esperar del personaje.

Eso sin contar que es el segundo volumen porque el primero apareció como un cambio de nombre de la etapa más extensa… de Hawkman. Que llegó hasta el 50 para pasar a ser Hawkgirl hasta su cierre en el 66. Así que esta se merecía también su propio título, con sus propios temas y, por supuesto, su propia familia encontrada.

Y como terminó en 2024… Quién sabe si no veremos más de ella en algún momento.
11) Hawkworld (1989) (1990 – 1993) / Hawkman (1993)

Ah, no, no. Después de Halcón y Paloma no tengo intención ni siquiera remota de intentar hablar de Hawkman. Vamos a ir aún más a lo básico:
Para 1989 la nueva continuidad postCrisis estaba lo suficientemente montada como para ir recuperando a los héroes del pasado con un nuevo estilo. O algo. Ya se había hablado de un Hawkman que era un héroe del pasado, y de ahí la idea de poner una serie en el pasado, preparando el relanzamiento y probando a ver lo que se encontraban.
Y fue un exitazo. Enorme. Tanto que decidieron reunirse y ver qué hacían. Y en lugar de sacar una serie de Hawkman en la que hubiera un nuevo Hawkman decidieron seguir con Hawkworld y que la serie ya no transcurriera en nuestro pasado, sino en nuestro presente. Total, ¿a quién le importan un poco más o menos de continuidad?
Así que la serie siguió.

Esta vez con Tim Truman compartiendo la labor como guionista con John Ostrander, y luego, a partir del 10, ya solo con Ostrander. Que duraría como guionista del título hasta su cancelación en el 32. En 1993. Porque había que relanzar a Hawkman pero MÁS NOVENTERO. Es decir:

Sí, esas son tintas metálicas. Pero quizá no ha quedado suficientemente claro, pasemos a la portada del número dos:

Podemos hacer un repaso pero ya os digo yo que Mullet + Garras + Pinchos + Pendiente = Los 90s.
Y sí, el guionista sigue siendo Ostrander. 6 números duró. Luego hubo un par de números de relleno de Paul Kupperberg y la llegada del nuevo guionista fijo: William Messner-Loebs. Ya, bueno, la idea de DC de lo noventero era peculiar, claramente. Pero del 8 al 27 estuvo al pie del cañón. Y luego ya un par de guionistas más hasta su cierre en el número 33 con Christopher Priest al mando.
Y con esto creo que suficiente he dicho sobre el tema.
12) Haywire (1988 – 1989)

La incansable búsqueda de nuevos héroes o nuevas historias o nuevos modos de contar… bueno, os hacéis a la idea… lleva a obras como esta Haywire que es puro decompressive storytelling décadas antes de que eso fuera lo normal. En el primer número casi no sabemos nada, al personaje central le vemos convertirse en su alter ego por primera vez en el cuarto, hay una vaga explicación en el séptimo, a partir del once intentan ponerse a explicarlo y para el trece cierran la historia de una manera que no parece cerrar una historia.
Mientras tanto van dejando estas cosas por el camino:




Porque está claro que si algo está sobrevalorado es tener un guión. ¿Quién necesita algo así cuando puedes estirar la historia de un one shot durante trece números y meter a todas las señoritas ligeras de ropa, orientalismo ful y roboces más-o-menos además de daddy issues que puedas venderle a DC sin que sepan qué es lo que ha sucedido?
13) The Heckler (1992 – 1993)

Lo lógico sería pensar que si Keith Giffen se pone con un héroe con este nombre y estilo tendríamos algo divertido. Y no es que Tom y Mary Bierbaum fueran a hacer nada por impedirlo. Pero alguien decidió que en una serie de estas características las páginas tenían que ser de 3×3 viñetas. No era la mejor de las decisiones posible y a nadie pareció importarle mucho porque, bueno, fue cancelada sin muchos miramientos y el personaje no apareció más que en el fondo de alguna cosa un par de veces. Supongo que hay toda una lección que aprender aquí, pero no seré yo el que la saque.
14) Hercules Unbound (1975—1977)

Parece que siempre hay un hueco para Hércules. En este caso como serie de 12 números en los que se pretendía presentar un futuro apocalíptico – Tercera Guerra Mundial incluida- que llevaría al héroe a vagar por ella para… bueno… para sus cosas. Acompañado de un joven ciego y su perro. Y metiendo a los Atomic Knights o a bichos de Kamandi. Por aquello de que lo mismo colaba. Gerry Conway y Jose Luis García-López con Wally Wood como entintador durarían los primeros seis números. A partir de ahí el dibujante sería Walt Simonson y en los guiones tendríamos a David Michelinie tres números y los otros tres a Cary Bates. Para el noveno número Bob Layton sustituyó a Wood como entintador. Y los dos últimos ya los hizo Simonson por completo. Tanto cambio no es que le sentara muy bien a la serie, especialmente el de guionistas, pero tampoco era como para que años después se dijera que todo había sido una ensoñación del Atomic Knight de nuestra era. De todas formas la explicación oficial pasó a ser que era parte del multiverso, desaparecido con las Crisis y reaparecido tras las Final Crisis. Vamos, que si lo quisieran usar lo usarían, que no lo usan porque no quieren, eh. Nada de abogados, es que no. quieren. ellos.
15) Hero Hotline (1989)

El asunto comienza en Action Comic Weekly, una cabecera semanal -claro- en la que iban apareciendo y rotando múltiples héroes más allá de Superman. Uno de esos héroes… bueno, más bien un grupo… fue estos Hero Hotline que tenían un tono fundamentalmente humorístico y, hasta cierto punto, antiheróico. Parecían héroes con poderes más o menos útiles en los que el único realmente conocido era Mr. America / Ammericomando, ahora bajo el nombre de The Coordinator y, a su vez, el encargado de establecer quién se iba a ocupar de qué. Y, por tanto, actuando como una voz al más puro estilo Charlie antes que como un personaje visible más.
Cinco semanas más tarde sus aventuras dejaron de aparecer en Action Comics Weekly y en cosa de mes y pico aparecen en su propia cabecera en forma de mini de seis y en la que la estructura de las historias permanece.
Por supuesto el orden cronológico no es el orden real. En el propio primer número de la mini lo explican. Cuando los jefes vieron los primeros números pensaron que sería buena idea montar esa aparición en ACW para darle un poco más de publicidad. Así que les tocó improvisar una ‘precuela’ que los lectores verían como un primer contacto.
Lamentablemente ni por esas lograron que la serie continuara. Y es una lástima porque es el tipo de mezcla entre superhéroes y comedia de compañeros de trabajo (juicios incluidos) que demuestra funcionar mejor que… Powerless, por ejemplo. Pero bueno, quizá en algún momento alguien decida acordarse, o recuperarla, y entonces…

… los hijos de Microwabelle la vean como muñeco hinchable en un desfile de Acción de Gracias. Cosas más raras han sucedido. Y la verdad es que se lo merecen. Casi tanto como una edición recopilatoria en condiciones. (Risas)
16) Hitman (1996 – 2001) / Hitman/Lobo: That Stupid Bastich (2000)

Por un lado, creo que la media de edad general facilita que todo el mundo conozca este cómic o sepa, al menos, que tiene ese sentido del humor y conocimiento de los superhéroes de Ennis que creó gags inolvidables como que los supes no llevan bolsillos con dinero en el traje.
Por el otro, supongo que merece la pena mencionar al personaje más exitoso salido de Bloodlines. Más de 60 números de serie propia, un cruce breve con la JLA – en el que tenía lugar ese otro de usar rayos x con Wonder Woman. Ah, que pícaro muchachuelo. – y otro con Lobo

algún spin-off y, bueno, el final esperable para un personaje salido de Bloodlines. No es que tenga intención de dedicarle mucho más tiempo, pero está claro que tenía que aparecer en este listado.
17) Hourman (1999 – 2001)

El primer Hourman fue creado en 1940. Desde entonces hemos tenido a Rex Tyler, Rick Tyler y Matthew Tyler. Pero no Steven Tyler. Ha sido parte, entre otros, del All-Star Squadron, la JSA, los Freedom Fighters y la JLA. Y, sin embargo, no tuvo un título propio hasta 1999. Y no volvió a tenerlo después.
Teniendo en cuenta que esta serie iba del Hourman que era un androide (Matthew Tyler, inexplicablemente no Ratthew Tyler) aprendiendo a comportarse como una persona normal junto a «Snapper» Carr -pero poco- y viviendo aventuras de esas en las que arreglar una cosa es estropear la siguiente, con un tono un tanto humorístico y… ¿cómo decían en los dosmiles? Ah, sí… desenfadado. Lo que, supongo, facilitó que llegara hasta el 25. Aunque no que pasara de allí.
18) Human Bomb (2013)

Jimmy Palmiotti y Justin Gray estaban empeñados en sacar algo más de los Freedom Fighters, así que lograron una mini de cuatro números para varios de ellos, incluido Human Bomb. Un personaje que, en realidad, era alguien distinto.
Distinto al original aparecido en 1941, quiero decir. Ese era Roy Lincoln, creado para Police Comics de Quality, una de esas editoriales que DC compró. En este caso en 1956. Cogieron lo que quisieron y luego ya, con tiempo, fueron recuperando más cosas.

Por eso fue en los ’70s cuando montaron la creación de una Tierra X en la que los Nazis ganaron la guerra. Excepto que ese sería el Roy Lincoln de Tierra 2. Bueno, de Tierra X pero que fue a parar a Tierra 2. Yo qué sé. Por supuesto ese segundo Roy Lincoln acabaría cuando llegaran las Crisis Infinitas.

Siendo sustituido por otro Roy Lincoln que debutaría esta vez en el 60 de All-Star Squadron, en agosto de 1986. De nuevo parte los Freedom Fighters y que acabaría siendo víctima de la Infinite Crisis. Qué os voy a contar. Estas cosas pasan.
¿Y no hubo más Roy Lincoln? Pues claro que sí, que esto es DC. Con deciros que reapareció en Dark Nights: Death Metal (2020 – 2021). Y como esto es DC su primera aparición fue en el 5 y su muerte en el 2. Ah, no, no pienso ni intentar explicarlo.
Por supuesto se ha vuelto a hablar de él porque en 2023 apareció de nuevo, dentro de The New Golden Age, su sidekick Cherry Bomb. Ya, bueno, cosas. El caso es que ahí está en esa JSA que ha visto algún número publicado en 2024. Deberíamos de hablar de los problemas para sacar números de esa gente, la verdad….

¡Pero bueno! Estábamos hablando de Human Bomb. Supongo que os estaréis preguntando cuál es el Roy Lincoln que tuvo serie propia. Teniendo en cuenta que la Infinite Crisis ocurrió en 2005 – 2006 y este cómic es de 2013. La respuesta es obvia: Ninguno de ellos.
El asunto es que ese 2006 vio la aparición durante La Batalla de Blüdhaven de un nuevo Human Bomb: Andrew Franklin. Que se uniría también a los Freedom Fighters. Aunque luego llegara la Final Crisis y… Bueno. Dio igual porque al final volvieron a reunir a la banda. Y ahí estaba, en el aquel último número del segundo volumen de los Freedom Fighters de julio de 2011.
Por supuesto él tampoco sería este Human Bomb.
Como decía al principio, Justin Gray y Jimmy Palmiotti querían más Freedom Fighters. La idea parecía sencilla, montarlo a partir de SHADE, con el Uncle Sam siendo Sam Wilson. ¿Cómo que no os suena Sam Wilson?

Seguro que ya os suena.
El asunto es que intentaron montar unos NUEVOS Freedom Fighters con unos nuevos Lady Phantom, Doll Man, The Ray y, claro, Human Bomb. Unas minis que llevarían a las aventuras de ese nuevo grupo. Y en la que conoceríamos al nuevo Human Bomb: Michael Taylor. Un antiguo sargento de marines que había vuelto a la vida civil trabajando en la construcción hasta que se descubría que había sido usado como experimento por los extraterrestres para convertirle en una… bueno, os lo podéis imaginar. Cuatro números más tardes parecía haber reventado la conspiración extraterrestre, soltadas algunas ideas peculiares sobre la gente que se hace saltar por los aires y los extraterrestres y, finalmente, era presentado a los otros miembros del nuevo equipo. Preparados para una nueva serie…

Que nunca llegó. La siguiente vez que viéramos a los Freedom Fighters sería en 2019, en su tercer volumen, con otros creadores y un nuevo vistazo a Tierra X. De hecho aparecía Roy Lincoln… para ser asesinado de inmediato y ser sustituido por otra persona distinta más: David Mathis.
Qué os puedo decir, está claro que en DC está lleno de bombas. Humanas.
19) Human Defense Corps (2003)

La idea de mezclar un tebeo bélico con un elemento fantástico no es precisamente nueva, pero la forma en la que Ty Templeton decide comenzar mostrando a los soldados como carne de cañón para ir construyendo una pequeña trama durante esta mini que sirve sobre todo para intentar mostrar algún tipo de explicación a de dónde salen todos esos soldados humanos que aparecen en las invasiones de todo tipo que aparecen en la Tierra y que tienden a ser rápidamente barridas con un alto número de bajas.
20) The Human Race (2005)

Atended a esto: Una fraternidad creada para mantener el ADN de la humanidad. La aparición de un virus xenomorfo. Y toda una serie de híbridos salidos de haber olvidado que Giger ya llevaba un tiempo. Vamos, hasta Species llevaba ya un tiempo para entonces. Pero el terror corporal siempre ha estado ahí, y si la nueva carne puede tener origen extraterrestre. Lo que pasa es que no se acaban de decidir y van liando el asunto hasta acabar sacando a la JLA para una de las viñetas más hilarantes que he leído jamás en DC:

Por supuesto ellos probablemente no querían que fuera casi cómico, pero la idea de que Superman de entre toda la gente, con el Detective Marciano ahí al lado, esté dando una rueda de prensa asegurando haber usado rayos x para comprobar el ADN de la gente de un pueblo para evitar parásitos extraterrestres y, por supuesto, asegurar la salvaguarda de la raza humana… Quizá es con el poder de la ironía con el que esperaban derrotarles. Pero bueno, como tampoco es que ninguno de los personajes implicados haya vuelto a aparecer por DC no es como si tuviéramos que dedicarle mucho más rato.
21) Human Target (1991) (1999) (2002) (2003 – 2005) (2010) (2021 – 2022) // Tales of The Human Target (2022)

Estas cosas pasan. Un día eres Christopher Chance, un personaje creado por Len Wein y Carmine Infantino para un número de Action Comics (El 419 de 1972, concretamente) -al menos si no consideramos al personaje de mismo nombre pero distinto comportamiento y personalidad secreta creada en un número de Detective Comics (el 201 de 1953, concretamente) por Edmond Hamilton y Sheldon Moldoff–

y casi veinte años más tarde, en 1991, la editorial ha vendido tus derechos a televisión y decide darte un cómic especial. El primero con tu nombre. A la espera de ver qué tal lo hacía el tebeo, y cómo salía la serie.
Que tardaran casi una década, 1999 esta vez, en intentarlo de nuevo supongo que es lo suficientemente elocuente.

Esta vez con Peter Milligan a los guiones y Edvin Biukovi´c dibujando. Una mini de cuatro y para Vértigo, nada menos. Pero con suficiente éxito como para repetir, primero como historia única en 2002 ,

después en 2003 como serie abierta.

En ambas ocasiones volvía Milligan pero esta vez el acompañamiento lo hacía Javier Pulido.
Y sí, volvía a ser el Christopher Chance que había aparecido en Action Cómics. No el Fred Venable de Detective Comics, ni aquel Detective Perry de un número de Gang Busters. No. Christopher Chance, que apareció en esa serie pero luego salía también de cuando en cuando en Detective Comics o Batman. Da igual que la primera serie presentara a un teórico continuador de Chance en Tom McFadden. Ya parecía claro que Human Target era Christopher Chance.
Pulido haría los 5 primeros números, los 5 siguientes serían de Cliff Chiang, a partir de ahí irían contrapeándose: Pulido los 3 siguientes, Chiang los 3 de detrás. El 17, eso sí, sería para Cameron Stewart. Pero detrás vendría Pulido para el 18. Y Chiang para ocuparse del 19 al 21. El último número que salió. Ya en 2005.
Y la cosa podía haber quedado ahí. O podía haber regresado en algún momento. PERO.
En 2010 volvió a pasar otra vez lo mismo. Otra vez la tele.
Y, por supuesto, ese mismo año volvió a pasar otra vez lo mismo.

Aunque esta vez como miniserie de seis números. El éxito de la serie se puede medir en que en 2011 tuvo lugar el reboot The New 52 y si se descuida a Chance no le afecta. Porque no volvió a tener serie hasta 2021, cuando Tom King se empeñó en hacer una maxi para Black Label.

Y no contento con eso sacó un especial, Tales of the Human Target, en mitad de la etapa anterior también en 2022. ¿Para darle tiempo al dibujante? No tenéis pruebas.

Pero bueno, uno nunca sabe con Chance cuándo será la siguiente vez que aparezca. Más aún viendo cómo está funcionando ahora lo de las series de televisión.
22) The Huntress (1989) (1994) (2011 – 2012)

Imaginad. Sicilia, 1977, una joven de enormes pechos…

…es presentada como The Huntress, una mujer con un secreto. El secreto era que estábamos en Tierra 2 y ella era la hija de Batman y Catwoman. Helena Wayne. Ese mismo mes aparecía también en All-Star Comics 69, de entre todos los números. Que ya tenía su gracia porque había habido una Huntress antes.

Paula Brooks había sido primero la Tigress, combatiendo junto con los Young All-Stars. Pero, como pasa en estas cosas, fue asesinada. Y luego revivida. Y cuando reaparece lo hace como la villana Huntress. Luego ya volvería al nombre Tigress y se casaría con Sportsmaster y… Bueno, más cosas.
Pero lo importante es que ahora había una nueva Huntress. Que iría apareciendo por Batman Family, Infinity Inc. o Wonder Woman. Y entonces llegaron las crisis. Por supuesto en las postCrisis no podía ser que Batman tuviera una hija. Lo que nos lleva a la aparición de la primera serie.
En The Huntress (1989) -el cómic con la portada de la heroína con el pelucón que hemos visto debajo del nombre- conocemos a Helena Bertinelli, única superviviente de una cena familiar. Que es más que comprensible, pero es que hablamos de una familia mafiosa. Iría viviendo aventuras relacionadas, más o menos cortas, hasta que en el 17 aparece por primera vez por la serie Batman. En una historia que acaba con Huntress teniendo… pensamientos.

Y que marca, además, el final de su serie regular. A partir de ahí pasaría a aparecer como secundaria en otras series como Robin, Detective Comics o Batman Chronicles. Y para 1994 Chuck Dixon pasaría por ahí.

Sí, ya eran los noventa. Y Michael Netzer estaba más que dispuesto a demostrar su estilo. Al fin y al cabo tenía una idea hasta para las portadas de la mini:




Después de esto ya sabemos, minis compartidas, grupos como Birds of Prey, secundaria de la Bat-Familia, blablabla. Incluso un Año Uno en el que considera hacerse monja. Que es lógico, porque infunden el temor en los corazones etc. Pero nadie está preparado para algo tan aterrador.
Ya en 2011 Paul Levitz quiso guionizar otra mini, y a ver cómo le decían que no.

Levitz no dejaba de ser co-creador de Huntress, de Helena Wayne concretamente. Pero, claro, la serie se iba preparando mientras en DC se estaban metiendo en el fregado de la New 52. Así que aunque originalmente estaba pensado que fuera Bertinelli la protagonista. De ahí el que los malos fueran la mafia, matara gente o llevara una cruz. Pero entonces en DC decidieron cambiar las cosas. Ese ser llamado Eddie Berganza saca una columna en la que dice que es Wayne, y parece que los cambios para adaptarlo -aprovechando que en la editorial habían lanzado el título Earth-2 para relanzar (?) la JSA – empiezan a partir del segundo o tercer número de los seis que tiene la mini. Una situación particular que llevaría a que la versión de Bertinelli regresara en Batwoman. Y que esta mini tenga un personaje central y un trasfondo que es una juerga porque va a bandazos.
Por supuesto después de esto las cosas siguieron siendo complicadas porque en Tierra-2 estaba Wayne y en la nuestra, Spiral mediante, aparecía una Bertinelli que era más espía que otra cosa. Distinta de la justiciera tipo ‘mataron a toda mi familia’ postCrisis. Pero esto es el DC post-New 52 y ya sabemos que es como uno de esos restaurantes de cinta. Solo hay que esperar mientras ves pasar continuidades y remakes a que llegue una que te interese. En Rebirth y Lazarus Planet vuelve a ese punto de ‘externa a la Bat-Familia porque sus métodos son muy sucios para Batman‘. Tenga o no que ver con los Dark Nights: Death Metal o como se llame la última crisis.
Y, mientras, el cierre de Earth-2 acabó solo parcialmente con la desaparición de Helena Wayne. Porque una nueva versión reapareció en Stargirl Spring Break Special y, sobre todo, The New Golden Age y más concretamente la nueva JSA,

en la que es un personaje del futuro que vuelve al pasado porque el guión lo requiere y acaba teniendo que quedarse en nuestro mundo pese a que sus acciones parezcan haber cambiado ese momento en el que ella nacía como hija de Batman y Catwoman.
¿Qué queréis que os diga? Al final esto de los cómics de supes es como los caballitos: Siempre son los mismos, dan muchas vueltas entre ruidos y luces, y al final acabas donde empiezas.
Hasta aquí por hoy. Pero ya sabéis que seguimos teniendo mucho abecedario por delante. Que espero que volvamos a DC dentro de dos meses. Y que lo que tenemos por delante en la I va a ser, en dos palabras…

Im-Presionante.
Pues la verdad esperaba más Harleys por aquí, pero no me quejo de lo obtenido…
Pues fíjate que estuve cerca de quitar el de Betty y Verónica. El de Love on the Lam sería el siguiente en caer, pero esas imágenes de Batgirl eran muy… ahm… necesarias.
No se Hable más, DC Ha de seguir Haciendo Historietas que Hempiecen por la H. HAVIV AL H!
Yo veo en su futuro un Holocausto Humanófago, la verdad.
«01) The Hacker Files (1992 – 1993)»
Ostia. Ostia ostia. El dibujo es FEO DE COJONES.
«03) Hardcore Station (1998)»
Está OK nombrar a Stalin como persona horrible, pero sin nombrar también «al otro» canta mucho, Jim.
En «The Hacker Files» se nota que estaban preparando ya los contactos para los dibujantes de Vértigo. Creo que mi parte favorita son los fondos.