«Deja de actuar, Dwayne, estamos en huelga»
-«¿Que deje de qué?»
Creo que ya he comentado alguna vez por aquí que el wrestling es uno de los deportes más complejos que existen. No existe ningún otro que además de la gran exigencia física necesite de guionistas. Dwayne Johnson fue wrestler, como había sido su padre, y como había sido el suegro de su padre. Tres generaciones bajo el mismo techo dedicándose a lo mismo, para el pequeño Dwayne esa era la realidad cotidiana en casa, no era nada extraño que incluso en las pequeñas disputas familiares se interpelasen unos a otros con micrófonos en la mano en el ring del comedor. Ah ¿no era así en las demás casas? pues Dwayne no lo sabía.
Desarrolló con gran éxito su tarea en el cuadrilátero, en el negocio familiar, entre 1998 y 2004, teniendo sus disputas con unos y otros en ese colorido y competitivo mundo, siempre jaleado por los aficionados que destacaban su buen hacer. Y esos éxitos en el campo del entretenimiento deportivo le condujeron al paso siguiente, hacer papeles en películas, tales como El Retorno de la Momia o El Rey Escorpión.
Puede que para ti como espectador la cosa tirase adelante por las risas, por ver al bruto ese repartiendo mamporros, pero desde el punto de vista de Johnson, lo que había era una serie de representantes dorándole la píldora mientras contaban billetes y diciéndole lo mismo que ya le decían antes en la lucha libre: «Dwayne, tú vales para esto, tú sirves«. Si se lo vas repitiendo y las taquillas funcionan, pues el hombre hizo lo más coherente: seguir con ello. Así se labró una trayectoria en el mundo de la interpretación, y en algún momento indefinido pasó de ser principalmente un luchador a ser considerado un actor.
¿La clave de su longeva andadura en el séptimo arte? lo que le dijeron sus agentes. «Sé tú mismo«.
Varios son los que hipotetizan sobre si Johnson interpreta siempre al mismo personaje, o incluso si simplemente se interpreta a si mismo, pero desde Adlo! me gustaría apuntar otra posibilidad: ¿alguna vez le ha dicho alguien que está en el rodaje de una película?
El gremio de la farándula suele habitualmente vivir bastante desconectado del mundo real, pero estamos hablando de una persona que desde la más tierna infancia veía a sus familiares más pr´óximos en casa ataviados con leotardos de colores y dándose estopa a voz en grito en complicadas y acrobáticas maniobras. Se dedicó a lo mismo que su familia, y luego fue haciendo lo que los representantes le decían que le convenía más. Pero ¿tenemos claro qué es lo que le decían?
Pensamos que Dwayne cree ser un actor, pero a lo mejor lo que vemos de él es cómo vive su vida. Es muy difícil saber qué es la normalidad cuando nunca la has experimentado, y a lo mejor Johnson piensa que la normalidad es lo que le sucede en las películas.
Sea como fuere, de lo que sí es consciente Johnson es de su popularidad, y un buen día decidió ascender un peldaño más en la misma convirtiéndose en un superhéroe.
Black Adam. DC. Casi todos teníamos claro qué podía pasar. Lo que no tenemos claro es qué percibía Johnson. De hecho, es muy ilustrativa una entrevista que se le realizó el año pasado durante la promoción de la película, en la que podemos percibir el largo alcance de la influencia del entorno de Johnson sobre su conducta.
Afirma que le molaba Black Adam desde que era chaval porque era un culomalo. Dwayne Johnson nació en 1972, de manera que podemos suponer de manera razonable que leería tebeos mayoritariamente entre 1980 y 1987, comenzando a los ocho años y dejándolo a los quince, como hemos hecho todos.
¿Sabéis qué tebeos de Black Adam se publicaban entonces?
Pues su mayor highlight fue este…
…en esta aventura.
Y hasta Crisis fue básicamente eso y alguna reedición por algún título. Lo que viene siendo un culomalo, vaya.
Baste decir que si entró en el directorio de personajes DC que aparecieron en el Who’s Who de 1986…
…fue por ser uno de los numerosos esbirros de la gran amenaza conocida como Mister Mente El Gusano.
Podríamos suponer que el personaje ganó en profundidad, oscuridad, matices y malculismo tras Crisis, en la miniserie realizada por Roy y Dann Thomas con Tom Mandrake.
Repito: Roy y Dann Thomas con Tom Mandrake.
Y esto es prácticamente todo lo que hay ¿fueron realmente estos los tebeos que hicieron que Johnson quedara prendado del personaje hasta el punto de querer interpretarlo treinta años después?
Y de no ser así ¿qué tebeos le mostraron a Johnson? o más importante aún ¿quiénes se los mostraban?
¿Es posible que el entrenamiento de la conducta de Johnson para ser un luchador, un intérprete de filmes de acción y un superhéroe vengan de tan atrás? los datos están ahí y la interpretación es plausible aunque inquietante.
Y otra cosa. Nosotros sabemos que la película de Black Adam ha sido un fracaso de taquilla y que ha sido un clavo más en el ataúd que ha sido esta encarnación de las películas de DC, el disparadero para lo que venga después. Yo lo sé, tú lo saben, pero ¿alguien se lo ha dicho a Johnson? ¿lo sabe él? Si lees sus declaraciones tras el estreno y los números de las taquillas, que es de lo que hoy en día se habla, parece que ha sido un éxito y la creación de un personaje angular en lo ha de venir.
Posiblemente en su búsqueda de la excelencia Johnson ha intentado desbancar a trabajadores como Christopher Lee o Ian McKellen. McKellen es Gandalf y es Magneto ¿se puede molar más? Dwayne quiso hacerlo, pero a su personaje habitual le faltaba un registro que quiso cubrir con Black Adam, su admirado culomalo. Hoy por hoy podemos decir que la jugada no le ha salido muy bien. Es más, podemos decir que hoy día hasta McKellen ha sido desbancado.
Margot Robbie es Harley Quinn y Barbie. Así que a grosso modo podemos decir que la mitad de la población mundial quiere ser ella.
Respecto a Dwayne, sólo podemos esperar que haya suficientes esquiroles en la actual huelga de guionistas para seguir guiando su vida.
A fin de cuentas, todos queremos oler lo qué Dwayne esté cocinando.
Si The Rock está esquiroleando es más que condenable, pero la verdad es que el texto no lo deja demasiado claro… Pero si lo está haciendo, dediquémosle una bonita canción
Sí, un tipo calvo y sin gafas.