Considero un acierto que el Museo de Bellas Artes de mi ciudad esté dedicando una exposición a Sergio Meliá.
Pues aunque él no se mueva del tablero de dibujo, su obra se encuentra demasiado dispersa por los mercados americano, español, francobelga…y bastantes veces cuando publica fuera de nuestras fronteras el material no termina llegando aquí en castellano
Nos sirve por tanto esta expo para admirar el conjunto de la extensa y variada obra del autor. El material ha sido seleccionado por Sergio, que ha querido mostrar la evolución desde sus comienzos hasta la actualidad. No se ha privado de mostrar blocs colegiales con sus primeras aventuras dibujadas, sus primeros fancines, o el material de su etapa como entintador en los noventa, que dice que le fue útil para aprender narrativa de los artistas a los que embellecía los lápices.
Y debo reconocer que también ha posibilitado algo que no pensaba que terminaría viendo…
…como es el nombre y la obra de Howard Mackie en un museo.
Sobre todo porque a la obra de Mackie no le van a tirar nada. No tanto porque no le importe a nadie que lo hicieran -que es algo que solo existe en el campo de la posibilidad, o de la probabilidad, no sé- como porque es imposible añadirle GENIALIDAD! a su obra. Ni con sopa de tomate.
Pues parece que se merece su exposición, así que enhorabuena.
Ahora solo falta que cuelguen a Terry Kavanagh en un museo. Preferentemente de los huevos.
Claro, si en España nos gusta tanto Marvel que la colgamos en museos cuales clásicos de la pintura (no hecha por IAs; y no, THEROCK! no cuenta como tales). AVIV ÁILEM!