Podríamos hablar de muchas cosas. Es decir, estamos en la semana en la que se ha afirmado por una ex-integrante que un partido de ultraderecha filtró información de El Jueves para ver si ‘les hacían un Charlie Hebdo’ y de esa misma revista se han inventado una portada pro-Rusa para hacer la propaganda. No sabemos si la misma ultra-derecha o una ultra-derecha distinta. Lo que sí que parece claro es que por lo menos ellos saben que se sigue publicando. Que también es una victoria.
Pero no vamos a hablar de eso ni vamos a comentar como una publicación privada puede acabar difundiéndose. Porque, ¿a quién querríamos engañar? Ha sido el fin de semana en la que se ha creado una cuenta de tuiter para reunir todas las tropelías de las Japan.
¿Sabéis lo que significa eso?
¡No tener que pensar el relleno del posteo! Como si fuéramos un medio digital de ‘noticias’.
Así que os dejamos aquí la cuenta que podéis cotillear: Japan Beefend.
Por supuesto ahí se habla de cosillas de nada como reclamaciones por el trato a los asistentes o por el trato a los que ponen stands. Pero sabemos que venís aquí para saber cómo se portó la industria editorial. Y ahí es donde entramos notros:

Hay que reconocer que todas estas cosas de los salones de sitios se parecen al final. Aunque lo único que me sale es: «¿El qué de qué?».
Hale, otra semana de mierda más salvando el expediente.
Seguro que en la caveza de a quien se le ocurrió, sonaba genial.
Bah, eso ya lo habían hecho hace años en una Con sobre el género fantástico. Bajo la dirección de Juanma Bajo Ulloa, nada menos. Así que, TAQUIONES!.