Uno de los más atractivos aspectos del estudio de la obra de ROB! es que es trata de una obra de sísifica duración. Antes se finalizaría la tarea de contar los granos de arena de todas las playas de la Tierra que la de registrar la última huella que su obra ha dejado en el tiempo y el espacio. Todos conocemos los clásicos ejemplos de cómo, taquiones mediante, influyó en obras aparentemente anteriores como el Ronin de Frank Miller o la novela gráfica de She-Hulk de Byrne (hasta el extremo de que todavía anda por ahí gente ignorante que osa acusarle de plagio). Y a estas alturas, tras décadas de estudio, uno estaría tentado de pensar que los más importantes casos ya habían sido debidamente identifcados.
Pero estaría equivocado, claro.

Siendo su New Mutants 87 de Marzo de 1990 uno de sus más importantes hitos no es extraño que sea en general esta etapa la que más ecos ha causado. Y siendo Gil Kane un autor entre cuyos últimos trabajos se encuentra una colaboración con el mismísimo ROB! y el Barbas en El Día del Juicio no resulta extraño que en su portada para el Avengers 145 de (casualmente) Marzo de 1976…

…mostrara una patente influencia del opus Liefeldiano.

AVÏV E’NAK!
AVÏV RÔB!
El arma de Assesin es demasiado pequeña, su musculatura parece hasta humana y, por supuesto, va demasiado cubierto en comparación con el festival de vello que Cable muestra… Así que, a lo mucho, sería un homenaje.