Han pasado ocho años ya. Creo que podemos hablar de aquello. De Perdidos. De Lost.
Una serie de la que pasado el tiempo se habla sobre todo de su ¿críptico? final, pero debemos dejar también en la memoria colectiva lo bonito que fue recorrer aquel camino. Todas aquellas temporadas en las que se iba tejiendo una confluencia de relaciones, acontecimientos, sincronías. Un capítulo tras otro, una temporada tras otra, siempre dejando ojiplatico al espectador y con ganas de más. Disfrutando. Porque sí, disfrutamos de Perdidos, prácticamente de su totalidad. Casi de toda. Por lo menos hasta…hasta…buena pregunta ¿hasta cuándo moló Perdidos para ti? ¿te quedaste en la tercera temporada? ¿en la quinta? ¿crees que la sexta temporada sobraba? ¿por qué tuvieron que darle un final, no podían haberlo dejado estar?
Para muchos, Perdidos fue el gran trampolín que impulsó a J.J. Abrams a sus futuros éxitos de taquilla, aunque años antes había colaborado en una de las películas más molonas de todos los tiempos: Armageddon. Y para televisión, antes de Perdidos ya había creado la serie de acción e intriga definitiva con Alias. Cuando alguien te viene diciendo que Agentes de Shield mola, es recordar Alias y te cae una lagrimita. Molonismo intenso con giros constantes y protagonista empoderada. Una obra adelantada a su tiempo. Una obra que, nunca está de más recordarlo, estuvo a punto de ser adaptada a historieta con guión del mismísmo Abrams, que no se ha prodigado todavía en este medio. Se llegó a anunciar y existen páginas dibujadas, pero se ve que finalmente Abrams y el editor de Awesome Enterntaiment no se entendieron y la cosa no fraguó.
Pero volviendo a Perdidos, aquello vivido en su momento, cuando no se había asentado la tendencia de que te volcasen las temporadas y había que esperar entre un episodio y el siguiente, fue un carrusel de sensaciones. Sorpresa, drama, angustia, adrenalina, todo a cargo de un elenco de personajes a cada cual más singular y enigmático.
Pero siempre queda el tema de lo del final. Claro, se tenía que acabar de alguna manera, la propia narrativa lo exige, pero ¿debe de ser siempre así? ¿todo debe tener un final? si cuando el flujo de la historia es tan placentero que buscarle una conclusión lo empeoraría ¿no tendría más sentido dejarlo un buen día como se ha quedado y no seguir más?
Te había preguntado antes hasta cuándo te moló Perdidos. Retén ese momento, ahí en todo lo alto. Que buen sabor de boca te hubiera quedado si lo hubieras dejado ahí. Como esas sentadas de restaurante magníficas de las que sales con el mal gusto de haber terminado con un café requemado ¿por qué no paraste a tiempo en el postre?
Muchas series quisieron luego coger el testigo de Perdidos, aunque ninguna lo consiguió. Al menos no en televisión. Pero en historieta, tres meses después del final de Lost comenzó en Image Morning Glories.
Su escritor, Nick Spencer, no se cortó al describirla como «Runaways meets Lost«, potente sentencia que estuvo en su top hasta descubrió otra más escueta todavía: «Hail Hydra«. Lo cierto es que la estructura de la serie, con sus misterios ofrecidos y sugeridos, sus flashbacks, sus giros de guión y el que cada episodio tenga entidad por si mismo al tiempo que avanza la trama principal, que se va desarrollando por temporadas, recuerda mucho a la serie televisiva. Otra cosa que tienen en común es conseguir esa atmósfera en la que suceda lo que suceda, el lector/espectador se lo traga. Hay pasajes de Morning Glories (ese invernadero) en el que se hubieran podido cruzar con el universo de Lost y te lo crees.
Panini tuvo en cuenta esta similitud con Perdidos y tuvo en cuenta la lección a la hora de sacar la edición española de Morning Glories. Quiso que fuera como Perdidos, pero mejor.
Y lo consiguió ¿cómo? pues aquí lo tenéis.
Con la lección aprendida de la serie de Abrams, Panini comprendió que no había de dejar que la cosa decayese, tenían que llevar al lector a lo más alto y dejarlo ahí, pues todo lo que siguiera sería cuesta abajo. De manera que sacó el primer tomo, luego el segundo, luego el tercero y ya. Sí, hay otros siete tomos en la edición original, pero ¿y qué? ¿acaso mejoraría la experiencia seguir una trama tan jugosa y sugerente hacia una conclusion que a lo mejor no nos convence? ¿no es mejor por tanto dejarlo cuando mola? pues acertadamente, Panini es lo que decidió, a costa incluso de perder ventas y cabrear lectores. Si no emites la última de Perdidos los espectadores pueden enfadarse contigo, pero a la obra la dejas en un pedestal de aura mítica increible. Eso mismo han pretendido con Morning Glories, retomar la experiencia de Perdidos y mejorarla con la perfección de lo inacabado.
¿Teoría absurda para justificar una cancelación? ¿osáis hablar de teorías absurdas en un texto que se trata sobre Perdidos? nada, de eso, de hecho los diez tomos de Morning Glories comprenden sus cincuenta episodios que a su vez se estructuraron en dos temporadas. Spencer y Eisma tienen anunciada una tercera temporada que continuará el cliffhanger del final de la segunda…desde hace casi dos años. Pero después de haber llegado a la cincuentena sin apenas pausa, ahora les cuesta horrores cuadrar las agendas para poder seguirlo, y algo tienen en mente, sí, pero ya verán si podrán ponerse. Aunque ahora mismo lo han dejado en todo lo alto.
La perfección de lo inacabado.
Y luego está Saga. Saga sí que mola ¿eh? con sus personajes, sus giros, sus misterios y todo eso ¿eh? no es Perdidos ni falta que le hace, que el Vaughan sabe trabajárselo. «Star Wars meets Game of Thrones«, porque todo hay que relacionarlo con algo. Que bien está Saga ¿verdad? pues precisamente hace poco Vaughan y Staples han anunciado que se van a tomar un descanso más largo de lo habitual para afrontar la continuación de la serie. La paran en todo lo alto para seguirla más adelante. En un futuro. Cuando puedan.
¿Hay algo que debas decirnos, Brian?
(para los que no la hayais descubierto aún, el canal Energy está retransmitiendo desde Junio Perdidos; se emite los Jueves, bueno, excepto el Jueves pasado, que termino la segunda temporada y dicen que seguirán con la tercera…pronto)
Lost no es que estaba en alguna plataforma digital… Yo es que vi el final, pero por alguna razón no tengo recuerdos de éste.
La leche, es verdad que no sois un blog de novedades.
Yo pensaba que lo de perdidos era en clara alusión a la sensación de los espectadores a partir de cierto punto. Dejó de molarme entre la segunda y tercera temporada pero la vi hasta el final.