Quién nos lo iba a decir allá por 2012 cuando Arrow llegó a nuestras vidas que sólo iba a ser la primera de un complejo entramado de series llamado a formar el Arrowverso Deceíta. The Flash supuso abrazar completamente el género superheroico tanto en lo referente a los superpoderes como al universo compartido. Supergirl ya andaba haciendo crossovers con ellos antes de compartir cadena y Legends of Tomorrow supuso su punto final a su peculiar Fase 1. Su Vengadores, su Liga de la Justicia (ojo, la animada).
En este panorama Black Lightning supone una rara avis por su ambiguedad respecto a la continuidad compartida. No parte de un gestalt tan diferente que justifique su separación ni lo hacen sus coordenadas socioculturales si consideramos que las de Luke Cage no eran incompatibles con su decidida pertenencia al Netflixverso Marvelita. Disquisiciones aparte resulta indudable que estamos ante otra sólida propuesta de un Greg Berlanti en el nadir de sus facultades creativas.
Aparte de lo ya expuesto existe un motivo por el que Black Lightning sobresale por derecho propio no ya en entre el resto de series pijameras uniformadas sino entre el completo (y complejo) panorama audiovisual presente en esta Era Dorada de las Series™
Su POLLON.
Su POLLON no había aparecido con anterioridad en ninguna de las otras series del Arrowverso y si bien es cierto que no hemos podido verlo en todos los episodios de la suya su presencia se deja notar de sutiles maneras. Quizá deberíamos preguntaros por qué no se han escrito críticas alabando su excelente POLLON pero, ay, en este humilde blog estamos acostumbrados a fijarnos en esos elementos obvios cuyo patente y rotundo peso específico nadie más se atreve a subrayar.
Y el POLLON de Black Lighting lo es.
De la misma manera que lo fué el POLLON del olvidado Blade televisivo. Lamentablemente olvidado porque ese es el tan principal como obvio elemento que hermana a ambos personajes por encima de épocas o editoriales.
Ambos contaron con ese firme pulso montador de Marc POLLON que tan bien hemos aprendido a reconocer y cuyo futuro le depara una sin duda larga carrera trufada de éxitos. Creedme cuando os digo que en años venideros, por mucho que a algunos pueda molestarle…
…vamos a ver al POLLON de Black Lightning por todos lados.
Yo también extraño al Marciano.
Tranquilo, que a Pollon le gustan los marcis.