A medida que la década de los años 60 llega a su fin los miembros del grupo musical The Archies se van dando cuenta de que su carrera está estancada, hasta que a Veronica se le ocurre hacer lo que les suele funcionar a los multimillonarios: tirar de contactos
Sí, Don Kirshner fue el productor detrás del éxito de The Monkees, un grupo de laboratorio donde los que ponían la cara y los músicos que tocaban no tenían por qué ser necesariamente los mismos. ¿Os vais viendo venir cuál será su siguiente éxito? El caso es que el señor Lodge, un padrazo después de todo, le da el capricho a su niña y les lleva a la discográfica
Y allí los Archies tocan algunos temas para «el hombre de la oreja de oro» (por cierto, apuesto euros contra yenes a que el mote se lo puso él mismo)
Como no podía ser de otra manera, las canciones gustan tanto al productor que les ofrece un contrato discográfico ahí mismo
A estas alturas muchos de los lectores de Archie ya se han dado cuenta de que esta cosa tan sosa y previsible que están leyendo no es una historieta, sino que les han colado por la cara un anuncio que ocupa la cuarta parte de la revista por la que han pagado sus buenos 12 centavos. Y para dejarlo bien claro, en la página siguiente…
…está la publicidad del primer álbum de The Archies, en vinilo y en ocho pistas (no, no es una cassette, es otra cosa; llevaba cinta dentro pero era más parecida a un cartucho de videojuegos. ¡Atrevéos a reivindicar eso, hipsters!). Y no, Sugar, Sugar no está aquí: esa canción no aparecería hasta el segundo disco
[Viñetas y publicidad de Archie 189, con fecha de marzo de 1969]
Ponga el Archie donde salían Milli Vanilli.
Los taquiones son muy fuertes en el Archiverse:
Bueno pero al menos los componentes de The Archies sí que tocaban y cantaban realmente sus canciones ¿no?