Hay debates que no lo son. Hay posturas que realmente no están enfrentadas. Hay personas que de hecho no se encuentran en trincheras diferentes sino que comparten lado. Y es que demasiado a menudo un simple error de comunicación o un mero fallo de información acaban desembocando en innecesarios conflictos.
Por ejemplo, uno podría comprar uno de los muñecosfiguras interactivas de Skylanders edición especial en pro del autismo.
Y lo haría con la mejor intención del mundo. Sin darse cuenta del garrafal error que estaba cometiendo. Vereis, resulta que la ONG beneficiada por tal evento dedica la mayor parte de su presupuesto a… ¿estais sentados? ¡A BUSCAR UNA CURA PARA EL AUTISMO! Que algun malinformado puede que crea que es una buena idea pero resulta que NO, porque el autismo no es una enfermedad sino un don maravilloso. Y sin quererlo uno se ve enfrentado a un ofendido autista que le afea la conducta. Todo por una tonta falta de información.
A veces ambos lados malinterpretan las palabras de su (presunto) oponente y la discusión degenera en una monumental bronca sangrante y dolorosa no sólo por su salvajismo intrínseco sino por su final falta de fundamento. Como el Gwengate.
El año pasado un personaje arrasó en el panorama marvelita como el proverbial toro en la clásica cristaleria: Spider Gwen.
Son tantos y tantos sus méritos propios que sería absurdo enumerarlos. Baste decir que su arrollador carisma ha dado pié a la subsiguiente aparición de Gwenpool.
(y este año que apenas ha comenzado será el año de GHULK! la Gwen Hulk, recordad que lo leisteis aquí primero)
Todo iba bien y todos eran felices hasta que un astuto editor de Marvel decidió que la mejor manera continuar promocionando entre las lectoras las nuevas series dedicadas a personajes femeninos era contratar a Milo Manara para una de las portadas alternativas.
Por algún extraño motivo a algunas lectoras les pareció que esta imagen mostraba a una gratuitamente hipersexualizada Jessica Drew. Es un error de apreciación fácilmente comprensible en personas no acostumbradas a las premisas del género superheroico. Se habría remediado fácilmente mostrándoles que los trajes de los heroes masculinos también se adhieren tanto al coxis que no se los tienen que quitar cuando les hacen un tacto rectal.
Pero nadie lo hizo. Así que tuvimos que ser testigos de una cruel guerra en que se discutieron posturas, anatomías e idoneidades. Una que se podría haber evitado con un poco de diáologo honesto. Una cuyas consecuencias seguimos sufriendo.
Os presento a Frank Cho. Flamante ganador del premio al mejor dibujante internacional de la novena edición del Expofriki. Brillante autor de Liberty Meadows, esa serie adorada por las féminas. Creador de LA OTRA portada de Spider-Gwen.
Cho, obvio es decirlo, por bueno que sea no está a la altura del maestro Manara. Su modelo sonríe y posee una figura que aparenta tener musculatura y hasta un cierto porcentaje de grasa corporal. Pero dejando estos pequeños defectillos aparte podríamos creer que estamos ante una excelente ilustración.
Pero en realidad no lo es.
Una editora de The Mary Sue dió un valiente paso adelante y denunció su imperdonable delito. Su argumento, resumido, viene a ser «Cho puede dibujar las guarradas que quiera allá en su blog y en trabajos por encargo y eso pero que ni se le ocurra tocar a Spider-Gwen porque Spider-Gwen es nuestra, Spider-Gwen es nuestro tesoro, ella vino a nosotras«. Visto en perspectiva es un argumento sólido y perfectamente razonable. Quizá uno podría criticarles que el proceso correcto habría sido que su página acordara una lista de personajes intocables y que se les remitiera a todos los dibujantes para que no los usaran cuando les piden un dibujo guarro en una convención, pero poco más. Y sin embargo, por incomprensible que parezca, Cho se tomó a mal el artículo. Será que está muy estresado o anda en malas compañías o le vence el plazo de la hipoteca.
Y ya tenemos la bronca montada. No demasiado altisonante porque, afortunadamente, aunque errado Cho es un señor serio y responsable que ha reaccionado de manera adulta y equilibrada.
Aun así estad seguros de que habrá gente a quienes hasta estos sutilísimos y casi inapreciables tironcillos de orejas les habrán parecido intolerables. Y así el Ciclo Sin Fin de Violencia™ se Perpetúa Eternamente™. Y es triste contemplar tanta rabia e indignacion por ambas partes cuando realmente no hay motivos para ello. Pocos autores más feministas y pro igualdad que Cho existen en el mundillo. Y no me refiero sólo a su Liberty Meadows.
Recordemos (nuevamente) ese retrato de mujeres fuertes e independientes que hizo en sus episodios de Hulk en los que junto a JEPH! Loeb narraa cómo RHULK! apaliza, humilla y doblega primero a Hulka…
…y luego a Hulka y las Libertadoras.
O rememoremos (otra vez) cómo, junto BENDIS!, nos presentó a la más letal y devastadora forma de Ultron.
La de Janet Van Dyne en pelota picada.
(¿veis cómo era verdad que hay dibujos que se redescubren y aprecian mejor en glorioso blanco y negro?)
Pero si liberal y avanzado es su trabajo sobre los guiones de JEPH! y BENDIS! cuando escribe su propio material bien podríamos decir que estamos ante una Rosa de Luxemburgo del cómic moderno. A Cho debemos la fascinante escena en que por primera vez aparece Shanna la Diablesa en su miniserie homónima.
Y la no menos fascinante escena posterior en Salvaje Lobato en que Shanna la Diablesa…
…es bañada en vigorizante jugo de Hombre Cosa. Que también me han dicho que es buenísimo para el cutis.
O la no menos apasionante portada que realizó para la revista Wizard cuando le pidieron un homenaje a los tebeos setenteros de la Marvel…
…y les hizo un Black on Blondes.
Cómo será el militante feminismo de Cho que, ¿recordais esa perenne queja sobre lo asquerosamente machista que es La Broma Asesina y esa alegría al comprobar cómo ha sido definitivamente borrada de la continuidad deceíta?
Cho las apoya entusiastamente.
Resulta evidente que Cho y las Mary Sue comparten mucho. Uno hasta podría decir que son tal para cual. Su enemistad nace de una serie de malentendidos que hasta serían graciosos si no hubieran tenido tan terribles consecuencias. Pero sinceramente creo que pueden superar su conflicto con un poco de comprensión y diálogo. Quizá a partir de un pequeño gesto de buena voluntad con ambas partes. Como este que desde ADLO! con esa desinteresada generosidad que nos caracteriza (y que, como todo don, proviene de ROB!) nos permitimos proponer.
¡Ay perdón, que se me había olvidado que a las chicas no les gustan los hombres cachas y depilados! No no, no mireis esa portada, mirad estas…
Menos mal. Al ver eso de «autismo» pensaba que iba a decir cosas feas de los coleccionistas que se ponen hechos una furia si el nuevo tomo de su colección favorita es 0.0001 cms más alto que los demás.
O de los pijameros que se ponen hechos una furia si la versión cinematográfica/televisiva de su pijama favorito no es la que querían.
O…
No hombre no, ja-ja, qué tontería, si aquí todos somos muy tolerantes con esas cosas. Quiero decir, el Jim Gordon de la serie de TV de Gotham no tiene gafas ni bigote y no nos ves aquí quejarnos de tamaña blasfQUIERO DECIR de un detallito sin importancia como ese que a algún maldito ejecutivo cocainómano no le pES DECIR que no es para tanto ni…
¿Este paquete que estoy haciendo? No es… un reloj que les quiero mandar de regalo a WB… Si, eso, un reloj…
Salúdelos de mi parte.
Veo que el staff de ADLO! está preparando concienzudamente su crítica pormenorizada de esa magna obra del cine llamada BvS:DoJ (veis, hasta el nombre es bonito).
No tengáis prisa. Tamaño opus cinematográfico requiere un detallado análisis de sus múltiples facetas semánticas.
La crítica del Superman contra Batman la haremos después de la reseña de la segunda temporada de Daredevil. Más o menos
Entonces me da tiempo de ir de vacaciones a volver a ver DEADPOOL!
(si las tuviera).
Y os vais a esperar a que la echen en Antena 3, no me digas más.