Hay momentos en la vida en que la emoción te embarga hasta tal extremo que el cerebro se colapsa. Las neuronas destellean hiperactivas e incrédulas ante lo que el córtex visual les está mostrando y razón, memoria y lenguaje tartamudean y fallan.
Hay impactos ante los cuales hasta el más ajado veterano sólo puede balbucear cual tierno infante y rezar porque las escasas y titbueantes palabras que logran surgir de sus labios sean suficientes.
Afortunadamente hay palabras que lo son, como por ejemplo…
AVÏV RÊLLÏM!!!!
Sólo un grande como Miller supo adaptarse a los 90: no te preocupes del dibujo, sino de… hmm…
Aún habrá quien lo justifique con la edad y estado de salud de Frank «soy trending topic en España» Miller, pero eso puede aplicarse a trazo y perspectiva, vale.
Pero cómo le quedan pantalones y botas lo ha hecho él aposta, rayita a rayita, que conste.
Esperemos a ver el arte interior del minicomic.
Mirad las rayitas cinemáticas, ¡Superman está muy enojado! (Con algún moro, supongo.)
No sé de qué os quejais con lo chulo que le ha quedado el Bizarro… O el Zibarro por la posicion de la «S»… O quizá el Superlopez enfadao… Molon en todo caso.
Rob! está en todas partes. ¡Alabemos a Rob!!
Así es el dibujo… Ahora imaginen cómo será la historia.