Toda esta parafernalia de crear una nueva continuidad para el siglo XXI no es una más que un gigantesco truco de marketing diseñado con una sólo función: ilusionar a lo nostre senyor dibuixant ROB! Liefeld para que se dejara de centrar en cómics tan interesantes como The Infinite y volviera a insuflar alegría en las cada vez más grises páginas de DC Cómics (que habían llegado a tal extremo de aburrimiento que Superman en vez de volar iba andando a los sitios como un Forrest Gump cualquiera).
El truco ha funcionado claro, pero todo el mundo sabe que ROB! es un torrente creador (por eso en lo que tarda el salir el número dos de sus colecciones has visto entre cuatro y seis nuevas cabeceras con su firma) y es sólo cuestión de tiempo que, cual Mary Poppins moderna y armada hasta los dientes, busque nuevos caminos una vez arregladas las cosas en casa de Dan Didio.
Pero eso no quiere decir que no vayamos a aplaudir el bonito gesto de conmemorar el regreso de ROB! a la editorial ubicada en Broadway lanzando 51 tebeos conmemorativos a su alrededor, de hecho Sark ya ha hablado de ellos en un par de ocasiones, pero a nosotros sólo nos interesa uno de ellos. Concretamente este (claro):

El tebeo no sólo lo firma ROB! puesto que los guiones son de un tal Sterling Gates, al que le ha tocado el gordo (no, Quesada no, el gordo de la lotería hombre). ROB!, en su infinita sabiduría, dejó en su día trabajar a su lado a gente como Alan Moore o Robert Kirkman precisamente para prestigiar a los mindundis que le pusieran al lado. En un mundo normal, cualquier guionista que trabajara con ÉL! sería el hazmerreír de la profesión, porque todo el mundo sabe que ROB! no necesita guionistas, y la gente afirmaría, no sin razón, que quien firma los guiones no es más que un ayudante de redacción que le lleva los cafés al auténtico genio creativo y hace la faena que el autor no tiene ganas de acabar (lo que vendría ser un Sonny de Cher, un Ringo del resto de los Beatles o un Stan Lee de Jack Kirby…).
De esta manera Sterling Gates, que en condiciones normales no podría aspirar a más que a que en las copas de después de la Comic Con Bendis le dijera que tiene nombre de agencia de publicidad de los años 60, puede ir por la calle con la frente bien alta diciendo que le han cogido para el mismo trabajo que Alan Moore.
Pero una cosa es que ROB! sea modesto y generoso y otra es que los tengamos que ser nosotros que no somos más que meros admiradores de su obra y, por lo tanto, vivimos alejados de su divinidad, aunque sepamos apreciarla. Y por eso debemos decir, que la ROB! se pasa medio tebeo arreglando los despropósitos del señor Gates. Una muestra de esto ya nos lo encontramos en la primera viñeta:
Este es un tebeo de acción, y por eso hay toñas y es un tebeo de DC, y por eso apaliza a cualquiera de Marvel. Si el tío de la derecha está en un escorzo más propio de un caganer que de un tipo que iba a atacar al héroe es, más que nada, porque ROB! tiene una sólida formación clásica que le permite apreciar las costumbres de otras culturas, y porque si te mete Halcón una toña como esa (nótese que hace KRAK en el cuello) lo normal es que se te suelten los esfínteres.
Este tipo de mensajes ocultos en el trazo de su lápiz son comunes en las obras de ROB! y Hawk & Dove #1 no es una excepción. Podemos ver, por ejemplo, una ácida crítica a los medios, vista en esta viñeta:
Donde otros se limitan a calcar el retrato de la presentadora maciza de moda (aquí THE ROCK! te hubiera plantado una Sara Carbonero por la que hubiera cobrado sin ningún remordimiento a la espera de que encima su tebeo le hicieran publicidad gratis en los informativos de Mediaset en España), ROB! te crea de la nada una muchacha bella pero con los ojos a distinta altura. ¿Error? Sólo para los vagos no acostumbrados a profundizar más allá de la impresión, lo que sutilmente nos envía ROB! es un mensaje sobre como la belleza que promulgan los medios sencillamente no existe. Los seres humanos somos imperfectos y eso se nos nota, más que en ninguna parte, en nuestros rostros, que son asimétricos. Y pocas cosas hay más asimétricas que una muchacha con los ojos a distinta altura….estamos pues, ante una belleza más real que la mitad de las que nos aparecen en los cómics de superhéroes mainstream.
Pero volvamos a la viñeta anterior
Fijaos en la mesa del fondo, la del tipo…¿veis la inclinación? No es un error de perspectiva, ni mucho menos, sino otra señal sutil. Los cómics de DC no pasan en nuestra tierra, sino en una tierra paralela a la nuestra, a lo Fringe. Un plano de existencia que, en un universo que aborrece las líneas rectas, sólo puede estar inclinado y eso se deja notar en todo el tebeo. Se ve en la mesa, se ve en la torre
No es el único guiño, a medida que avanza el cómic vemos
Como el protagonista parece tener otro disfraz, o cambia la altura de los muros

En resumen, y por ir acabando que esto no es un post de Calduch (como ya habréis notado hace rato), que Hawk & Dove 1 debería ser vuestra primera compra a los muchachos de El Catálogo del Cómic, pues en ella ROB! demuestra todo lo que ha crecido como artista. Un tebeo que callará de una vez por todas las bocas de sus detractores.
En él ya no hay exceso de dientes, más bien al contrario:
Y si al final, sale un Halcón de otro color diferente, y alguien te dice que no está claro si es el de antes o es otro.
Gritad pues con más orgullo que nunca: AVIV BOR!!! AVIV NOCLAH Y AMOLAP!!!
Mientras tanto, en su cueva, Ditko se bañaba en orines de caracol (como debe hacer todo buen randiano) para celebrarlo…
Herm… mmm… perdón, pero ve he mojado viendo lo visto…
Está claro que no somos dignos del genio de Rob. Y que muy posiblemente el único merecedor de tan magna obra gráfica sea Rajoy.
Está claro que no somos dignos del genio de Rob. Y que muy posiblemente el único merecedor de tan magna obra gráfica sea Rajoy.
La viñeta del aeropuerto me ha recordado los analisis de calduch.
os imaginais un comic de chuck norris dibujado por Rob????
Añadir que el gran ROB! dibuja de la misma edad a todos, desde el niño pequeño hasta el padre de Halcón porque para ROB! son todos iguales y perfectos y no considera que haya de haber diferencias entre los apolíneos superheroes de la gente normal.
AVIV BOR!!
Yo veo el genio de ROB! Ya en la portada, cuando nos presenta a Halcón con esa pose forzada, casi como un Cristo, pero al llegar a los codos los brazos se ponen en posición de disparar….. Halcón es como un Cristo con dos pistolas, nos dice ROB!, un incomprendido buscando su lugar en el mundo (de ahí los varios cambios de atuendo que el que reseña el cómic no entiende o no quiere entender como expresión del desconcierto interior de personaje que se nos muestra en la portada)
¿Son los colmillos que muestra Halcón (ultima viñeta de la pagina 6) o insinúa (a la altura de los molares, en la 8) otro sutil indicio de la incomodidad de nuestro héroe con s naturaleza humana? ¿Se esta transformando, pero aun no esta seguro de quererlo, en un vampiro y por eso rechaza a la nueva Paloma, ante cuya feminidad no podrá resistirse, como el verdadero Dracula ante Mina Harker? ¿Es una degeneración sufrida por el héroe Como contraposición a los zombies a que se enfrenta?
¿Muestra asi ROB! su postura en el enfrentamiento entre vampiros (crepúsculo) y zombies (waling dead) que presenciamos? ¿Es una revancha hacia su antiguo colaborador Kirkman?
¡Cuantos mensajes ocultos! Apenas he comenzado a descifrarlos