A no ser que haya entrado en una tienda de manga, claro. Y es que en ese caso, un chasqueo de dedos no basta. Se necesita más. Mucho más.
Y es que, ¿como permanecer impertérrito ante el alcance artístico de las portadas de los mangas? ¿Cómo escapar de la atracción que ejercen sobre nuestras almas semejantes prodigios como los autores de las portadas de Togari, por ejemplo?

Observad como, con las ceras blandas Manley con la que nosotros obteníamos mengües garabatos, los autores togarísticos consiguen el mismo efecto que Goya en su (¿injustamente?) aclamado "Saturno devorando a su hijo": terror, angustia, opresión… Una obra de arte en nuestras tiendas, lista para ser comprada por un puñadete de euros, en lugar de permancer carcomida en un museo.
Pero habrá algunos que no se sientan alzados al estrado de la Contemplación con una obra dolorosa como es Togari, sino que necesitarán una línea más clara, más preciosista. Algo como la portada de La melodía de las estrellas #8

Observad como la simpleza de líneas nos permite prácticamente saborear el alma del protagonista de la imagen, objetivo que no podríamos alcanzar en ausencia de la cenefita de estrellas, detalle que ojos inexpertos pueden considerar menor pero que supone la diferencia entre el preciosismo y el minimalismo. Aquellos que pasen por una tienda de manga que se miren la contraportada porque es otro de los ejemplos de expresionismo minimalista más desgarradores que he podido disfrutar a lo largo de esta temporada.

Pero otras portadas han sido creadas con el fin de provocar en nosotros la necesidad de hacernos preguntas que remuevan nuestras consciencias. Por ejemplo, la portada de La Casa de los Herejes. Observe durante sólo dos segundos esta portada, lector…

Otras nos presentan oxímorones de difícil resolución, como la impresionante portada del manga ¿Pero Cómo Pude Amarte? [sic]…

…donde se nos presenta un texto poderosamente romántico, en forma y contenido, junto a una imagen en la que podemos apreciar a dos figuras melosamente típicas y típicamente melosas envueltas en toda la crudeza de una violación. Una combinación durísima creada con el ánimo de sacar a nuestras almas de su zona de comfort y hacernos pensar sobre los tópicos que damos por hechos y sobre las porquería que estos tópicos ocultan y que podríamos descubrir si nos parásemos a pensar sobre nosotros un poquito más, al igual que al pararnos a analizar esta imagen descubrimos la atroz relación entre sus dos protagonistas, a primera vista, tierna e inocente.
Otras portadas juegan con el metalenguaje, como la del manga Armamento Alquimista, que tras observar con detenimiento nos hace preguntarnos…

…si ese antifaz es real o es sólo una licencia artística. O mi preferida, la portada del Mi Año, lo nuevo del autor de esa obra trepidante que es "El Caminante" o la mítica (pero injustamente mal traducida en nuestro país) "El Calendario de mi padre", Jiro Taniguchi.

Una obra en la que los editores han jugado al extremo con ese recurso que es la tipografía, olvidado tristemente por otros muchos diseñadores gráficos, para crear una nueva metáfora de nuestra sociedad. Un tipo de letra para enseñarnos que de cerca, las cosas nos revelan su auténtica naturaleza, ya que de lejos se pierden los detalles, la vista pasa deprisa sobre las cosas que marcan realmente la diferencia y finalmente…

ignorantemente reconozco, me parece puede llegar a relacionar "Mi ano" con "La primavera").
Podría hablar de otras muchas cosas, como de la Honestidad, ese valor que pocos realmente aprecian pero que la portada del número sexto de I"s kanzenban loa con orgullo y grandeza…

…pero prefiero dejar que vosotros, ávidos lectores, descubráis por vosotros mismos estas magnas obras de arte y las compartáis con nosotros en este nuestro humilde ADLO! Novelti Librari. Así os dejo esta semana, mientras espero vuestro feedback. Pasadlo bien, adláteres.
En cuanto leí «manga» supe que se trataba de otro post del homófobo racial de Pedr¡BLEYER!
Bueno, pero normalmente no hay manera de saber si la persona que aparece en la portada es hombre, mujer, ambas cosas o ninguna. Y claro, terminas pensando que el 90% de los mangas van sobre eso que llaman Gender Studies en los países anglófonos.
En general me parece una entrada bastante pesima, como curiosamente todas las leidas en este blog referentes al comic manga, pero el chiste facil referente a la obra del GRANDISIMO Jiro Taniguchi me parece simplemente patetico.
Salu2
>el chiste facil referente a la obra del GRANDISIMO Jiro Taniguchi me parece simplemente patetico
Lo es. De hecho, lo más patético de todo es que es autobiográfico. Vi el tebeo de lejos y pasó lo que pasó y entendí lo que entendí. La cara que me puso la dependiente cuando le pregunté porqué Taniguchi había titulado su último tebeo «Mi ano» no tuvo desperdicio. En mi defensa puedo decir que el radar gay todavía resonaba en mi cabeza después de pasar la vista por delante de La Casa de los Herejes. Que todavía no me había puesto a mirar con atención cuál de todas esas portadas era la responsable de que se disparara el sentido gaynácdico. Por eso tuve que fijarme tanto en todas las portadas. Bueno, y no tengamos en cuenta que al llegar a la de Mistress Fortune tuve que hacer una parada técnica de diez minutos hasta poder recuperar la visión de manera funcional.
En cualquier caso, prometo no volver a hacer nunca un post sacado de mis experiencias reales. Ni mencionar nunca en un post a Taniguchi, el hombre que más premios ha recibido por no contar nada de la historia de la cómic. Eso sí, sus historias son tas lentas, comtemplativas y neutras que no es que sean un coñazo, es que yo no tengo el espíritu lo suficientemente desarrollado ni cultivado para apreciarlas. Maldita ignorancia.
Pues seré yo, pero a mi que el post entero es un pretexto para poner una de las chicas de katsura… Y oiga, se agradece, que una chica de katsura siempre es una visión grata
Yo solo sé que al final hay un culo, que es lo que realmente importa.
«…es que yo no tengo el espíritu lo suficientemente desarrollado ni cultivado para apreciarlas. Maldita ignorancia.»
Es bueno que lo reconozcas.
Salu2
Nunca se juzga una web por su falta de interés en el manga.
Cuando el otaku entra por la puerta, el humor salta por la ventana.
Que lamentable que desde Rurouni Kenshin, Nobuhiro Watsuki no haya sacado nada que valga la pena, con lo que prometía ese autor. Supongo que la culpa la tiene el fenómeno otaku que tanto daño ha hecho a la industria del manga en estos últimos años…
«Cuando el otaku entra por la puerta, el humor salta por la ventana.»
Quisiera hacerme una camiseta con ese lema.
En cuanto un aficionado valiente se levanta para defender sus gustos frente al chistecillo fácil de los ignorantes (porque ahora que habies perdido la gracia sólo os quedan de esos) le atacais en masa. Además de malinchistas cobardes.
Y además la obra de Taniguchi tiene doble mérito por los problemas narrativos que debe afrontar, que a cualquier autor español que quiera hacer un comic nostáligco y profundo le basta con evocar los recuerdos de su padre durante la Guerra Civil, pero los japoneses no tienen de eso. Bueno, tienen la Segunda Guerra Mundial, pero rememorar cómo tu padre cuando era joven ensartaba bebés en su katana durante la campaña de Manchuria como que no tiene la misma resonancia poética.
Creo que vais a tener que poner en los post, e incluso en los comentarios, varios carteles que pongan: «Sarcasmo»
Corre cada «Sheldon» por ahí…