
Concretamente, desde 1997.
Pero volvamos por un instante a un año antes, que un salto temporal siempre tiene gracia. Venga… PUM

El caso es que Andreyko tenía un sueño y sabía a dónde dirigirse, directo a CALIBER la editorial en al que su buen amigo Brian Michael Bendis publicaba sus cosillas. Goldfish y Jinx, antes incluso de que empezara a ser acreditado como co-guionista de algunas de ellas. Caliber tenía buena fama entre los artistas independientes, no hay más que recordar que a principios de los ’90 había creado Berzeker en la que colaboraron Ángel Medina y, por supuesto, ROB!
En cualquier caso escucharon su propuesta y le dieron luz verde. Así salió el primer número:


¿Qué era lo más importante de la historia? ¿A dónde podía irse?
Efectivamente: CHAOS!
El día que CHAOS! le importe sacar una teta tendrá que acudir a investigar Fox Mulder -también de moda en los ’90- así que una vez allí redibujaron los dos primeros volúmenes…


Redibujar esos números hizo que Galen Showman, el dibujante, que ya había colaborado para el segundo número con el artists que firmaba como Dimmy Jay, pero iba hacer falta más gente así que se unió a redibujar también Mark Scott Ricketts. Como redibujar es reescribir también los tres empezaron a meter mano en los guiones. La parte buena es que el segundo número The Island Come True, fue bien recibido. Lo malo fue que en el tercer número metieron incluso más mano.

Así que Andreyko, harto de ingerencias y de que Showman no lograra pasar de la portada del cuarto número, decidió partir a pastos más verdes. Dejando inconclusa Lost, demostrando, claro, que en realidad el final no importaba tanto.

En cualquier caso al año siguiente 1998, y alentados por el éxito de subcontratar estudios para hacer Heroes Reborn -de nuevo ROB!, claro- la Marvel decidió pedirle a CHAOS! que mandara alguien para una serie. Los elegidos fueron Andreyko y un jovencito llamado Rodrigo Ivan dos Reis. Que decidió también ponerse un pseudónimo para trabajar con Andreyko y pasó a firmar como Ivan Reis.
Así que pudo meter pié en las grandes y el resto es historia. Incluido el título de la mini.

Supernaturals es una de las cumbres del marketing noventero. Con cada tebeo regalaban una careta (de las de cartón) de uno de los personajes
No lo llames «careta de cartón», llámalo «free halloween mask»
?Contienen subtítulos que fallan y partes cortadas, cual película grindhouse?
¿Y que hace Spawn en medio de una colección Marvel?
Ah no, que es el Hermano Vudú. Ejem…
¡Pero no explicáis nada!¡NO EXPLICÁIS NADA!
The Supernaturals era un desvarío. En ella el Hermano Vudú era el hechicero supremo de esta dimensión. ¿Cabe imaginar mayor disparat…?
Ah, claro…