Estoy siguiendo los tebeos que ofertan con el periódico Levante de la Comunidad Valenciana, que son los que antes ofertaban con el diario As en algunas privilegiadas autonomías. Baratos, a color, y con una buena selección de historias para los no iniciados. Incluyen además artículos de introducción, y allí me encontré con esta subyugante composición que algunos llamarían «evolución de Superman a traves de las épocas», pero como pertenezco a Adlo! la prefiero titular «La Conga del Hipertiempo».
El pasado Sábado salió Corto Maltés, que pillé por no coincidir sus aventuras con los que ya tenía, que eran, obviamente, los que ya salieron con El Mundo. Loable iniciativa de sacar cultura para las masas a un precio asequible. De esta forma los gags del Hestudio Fénix los ve más gente.
Unos hases. Dignificando la istorieta.
Por cierto, que es una sensación rara esta de volver a pillar tebeos en el quiosco de prensa. Ese ruborizarse al pedir el fascículo de Mickey Mouse y salir con él escondido debajo del periódico retrotrae a entrañables tiempos pasados ¿por qué no venderán periódicos en las librerías especializadas?
Pues en la librería especializada a la que voy yo, (la mejor y más completa de por aquí, por cierto) sí que venden periódicos, y efectivamente abren muy temprano.
Güenas. Seguro que ya lo sabéis, pero harpa es una de las dos grafías correctas, si bien arpa es la más frecuente. Aquella es la forma heredada directamente del francés harpe, donde ya la hache es muda, por cierto. Saludos.
>¿por qué no venderán periódicos en las librerías especializadas?
Pues porque, teniendo en cuenta cuando se reparte la prensa, los libreros tendrian que abrir de pormedio unas 4 horas antes.
Y si, esta vez se han pasado de geniales. Ciertamente se escribe de las dos formas. Al igual que «Sark» o «Saved».
Vale, antes de que se despierte alguien de este blog, quise poner «promedio», no «pormedio». Las prisas…
>>pero harpa es una de las dos >>grafías correctas, si bien arpa es >>la más frecuente
Pues patinazo mío porque no lo sabía. Estos días me han pillado sin dicionario a mano y me limité a buscar el mismo título en las demás ediciones en castellano de Corto Maltés, donde optaron por ponerlo sin hache, como incluso dicen en ese tomo en el artículo de introducción.
Aunque no es disculpa, se ve que es una acepción muy, muy poco usada, esta por la que ha optado el Estudio Fénix.
Patinazo mío entonces, repito. Punto para la banca.
Pues en el tomo de Corto Maltés hablan de la escritora «Susana Fontes» ( autora de Querido Corto Maltés)que en realidad se llama Susana Fortes. Lo que, al margen de si es o no un error reprochable, evidencia que el encargado del artículo nunca ha visto en persona a la Fortes, sino no se hubiera equivocado.