El el noveno tomo de Snoopy y Carlitos (que recopila las tiras entre 1967 y 1968) encontramos la habitual biografía del autor escrita por Gary Groth…
…que ha conseguido que nos sepamos de memoria la vida de Schultz porque aparece al final de todos y cada uno de los tomos de la serie
Pero en las páginas finales de este tomo encontramos una sorpresa. Empezamos a leer lo que parece el acostumbrado ensayo relacionado con la serie escrito por un articulista español (en tomos anteriores obra de Toni Guiral, J.M. Pallarés, Tony Boix., etc.) y…
Un momento, este texto me suena… ¡Es la biografía! ¡Con otra maquetación, pero es ella!
Sí, han repetido el mismo artículo… pero ¡eh! ¡Ha empezado otra vez!
¡Y a partir de la tercera repetición lo que nos encontramos son los párrafos desordenados al azar!
¡Madre mía! Me pregunto cómo pasó esto: si al packager se le olvidó encargar el artículo, si se le traspapeló y puso cualquier cosa creyendo que nadie lo leería… No lo entiendo, es como si el packager tuviera la cabeza en otra parte
Pero con una maquetación muy simpática, no menospreciemos ese logro…
Yo creo que tiene sentido, puesto que estamos hablando de Peanuts, lo más parecido a la nouvelle vague que jamás existió en el cómic de prensa americano.
Es arte deconstructivo aplicado al articulismo. El texto se irá desfragmentando hasta convertirse en un poema dadá en el último número.
Porque no lo olvidemos: Snoopy en tomo es gafapasta.
Ah, pero… Alguien se los sigue leyendo?
Reflexionando seriamente sobre el tema se me ocurren dos soluciones posibles (aunque relacionadas) al enigma:
1- ¡He puesto en la publicidad que el tomo tenía 657 páginas, y por mis cojones que me van a salir 657 páginas…
2- Ahivá, me salen 13 páginas extras por aquello de los pliegos, hay que rellenarlas, no sea que las vean en blanco y no me quieran pagar el packageado.